Así soy ✓ [COMPLETA]

La verdad Parte 1

Bad blood -Taylor Swift

—Si... —Y colgó-.

No pude pensar más, porque después de esa llamada, al reunir todas mis emociones y valor para decir lo que dije, me quedé profundamente dormida.

Al día siguiente desperté en el lugar menos esperado, —en realidad no se ni qué hora ni que día es— en el cuarto de Lisa ¿Cómo llegué ahí?

No lo.... Claro que lo recuerdo, fui a mi cuarto y encontré a Mía, y después fui al cuarto de Lisa para poder llamarle a Alex, ahora somos ¿novios no?, no fue una declaración común y mucho menos una respuesta buena, solo dijo... sí, pero bueno que esperaba recibir si le llamé en la madrugada, en fin, ahora podré relajarme un poco ya que mis padres están fuera de la ciuda....

—VERÓNICA, LISA MARIA, VENGAN ABAJO, ¡¡¡¡COMO VAN!!!! —Gritó mi madre desde la planta baja.

No se suponía que llegaban hasta mañana, espera, ¿qué día es?

Lunes ¿Por?

Mierda, mierda, mierda, no, no, no, nos quedamos dormidas todo un día.

Antes de bajar, busqué rápidamente a Lisa, -que se encontraba dormida en el cuarto de mis padres- La desperté y le expliqué rápidamente la situación, bajamos con sumo cuidado y al pisar el último escalón las dos recibimos una advertencia de parte de la chancla de mi madre.

—Se puede saber que carajos sucedió aquí? —cuestionó molesta, enarcando una ceja y señalando un con brazo el espacio donde estaban los sofás, y sí, digo estaban, y no, no nos los robaron, solo están de cabeza en la cocina, a excepción de uno,

¿Cómo llegaron ahí? no tengo idea.

¿Por qué solo queda uno? Eso si lo sé, es el sofá en el que vomitaron, el que tenía que limpiar... En el que al parecer se sentó mi padre JAJAJA, digo, ay no, que asco.

— ¿Y bien? ¿Qué pasó aquí? —siguió preguntando Claudia—Ahora resulta que aprovechan la oportunidad de cuando no estamos para hacer una fiesta en la que vienen delincuentes, sinceramente estoy muy decepcionada de ambas, pero más de ti Verónica, —me apuntó con un dedo—eres la mayor, ¿Cómo es posible que dejaras que pasara esto? Dijimos una reunión con amigos cercanos, con los que nosotros conocemos, no con delincuentes que voltean los sillones y vomitan encima. Que, hablando de eso, su padre está demasiado molesto, se tendrán que disculpar, y limpiar toda la casa, Mas tarde tendremos una conversación acerca de su muy merecido castigo. —Espetó su regaño y con eso terminó, al mismo tiempo se fue a la parte de arriba. No había rastro de papá.

Y así se fue nuestra tarde, limpiando el desastre que había, porque en verdad parecía que un tornado había estado dentro de mi casa.

— ¿Crees que nos castiguen muy feo? —Preguntó una curiosa y al mismo tiempo una angustiada Lisa.

—Espero que no, aunque mamá está demasiado enojada y ni hablar de papá —reí más fuerte de lo que planeaba—, perdón por reírme, pero cómo fue posible que se sentara sin darse cuenta de lo que había en el sillón.

›› La verdad, no espera un buen regaño, pero valió la pena. —choqué los cinco con mi hermana.

Al terminar de limpiar ambas fuimos a nuestras habitaciones, no duró mucho nuestra soledad, ya que, a los 5 minutos de subir, nuestros padres nos llamaron a la sala—más limpia que nunca eso si— y empezaron con su conversación, algo de que no debimos hacer la fiesta, que a quien metimos, que hemos cambiado demasiado, que qué les pasó a las niñas que éramos, las bien portadas y sin secretos y amigos que bien podrían ir a una correccional. Sinceramente el regaño lo sentí más para mí por ser la mayor y no tener control y conciencia de lo que pasó en la reunión que para mi hermana, al terminar su reprensión, me di cuenta que sí, que la mayor parte de la carga me la iba a llevar yo.