Reencuentros y despertares

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Maratón 2/5

Don't call me up -Mabel

Durante tres semanas mi relación con Said se ha fortalecido; y aunque muy pocas veces hemos hablado en persona, lo he podido considerar uno de mis mejores amigos, algo que no puedo decir es que le he agarrado la confianza mundial, hemos platicado sobre cosas superficiales de nuestra niñez y familia, pero sigo sin confiar de todo, sigo sin poder decir abiertamente mis miedos, mis sueños y anhelos. Pero a pesar de eso me siento cómoda con él, es fácil hablar y sacarnos algunas carcajadas, es como si ya lo hubiera conocido de antes y ahora retomáramos de nuevo nuestra amistad.

Ya ha pasado un mes del semestre, lo cual significa que se viene el primer juego de la temporada, el primer juego de Said como titular en el equipo. Said se transfirió de escuela porque él y su familia se mudaron a la ciudad, pero antes de dejar a su equipo, se aseguró que dentro del Instituto San Angelé hubiera un equipo de buen nivel, se aseguró de contactar con el coach e hizo algunas pruebas, para que cuando empezara la temporada pudiera sustituir a Carlos —nuestro antiguo safety— y no quedarse en la banca.

— ¿Estás nervioso por el juego? —pregunté mientras caminaba a lado de Said.

—Mucho, es muy importante este juego, tengo que demostrar el potencial que tengo, además de que, necesito tener un buen desempeño dentro de las temporadas siguientes para que pueda jugar de manera profesional. —todo lo dijo muy rápido— Necesito entrenar y, ay no se. ¿Estarás el día del juego ahí apoyándome verdad Vero? —Pregunto mientras calmaba un poco su ansiedad.

—Obviamente, no me perdería los juegos ni, aunque me pagaran los millones de dólares —le respondí con mucha energía, animándole y calmándolo de sus nervios.

***

Llegó el viernes, el día de juego, Lu, Lisa, Mía, Dalia y yo íbamos en el auto, en camino al campo de juego, la verdad es que a Mia y Dalia no les importa mucho el ir o no, les gusta, pero no les apasiona, al contrario de Lu, que prácticamente le rogué —como todas las temporadas— para que nos acompañara, Lu no es fan del deporte, le aburre y dice que no le ve sentido ver correr a 11 jugadores a través del campo.

—Mejor vamos a comer, ya me aburrí y ni siquiera hemos llegado —Dijo Lu haciendo una mueca de aburrimiento.

—No seas amargada, es el primer juego de la temporada —le respondí de manera entusiasta.

— ¿No será porque quieres ir a ver a una persona en especial? —preguntó Dalia, asomándose por el hueco de los dos asientos delanteros.

Con la presentada oficial de Dalia que nos dio Mia, se convirtió en una amiga más del reducido grupo, Joss se separó de nosotras, que, aunque bueno, si hubiera seguido con nosotras, sería algo incómodo para mí; bueno, Joss no es el punto, el punto es Dalia, como convivimos más con ella, pudimos conocerla a profundidad, ahora es otra de mis mejores amigas, ahora entiendo la frase de "por cada persona que se va de tu vida, llegará una más para hacerla mejor".

—Obviamente no, ustedes saben que literalmente amo el futbol —respondí señalándome el atuendo que llevaba, un jersey del equipo, la cara pintada con los colores del mismo y una gorra con la figura con el escudo, que en este caso es una copia de los saints, que básicamente consiste en la flor de lys.

—Ajá, nosotras te creemos —me contestó Mía con algo de sarcasmo— ya dinos que te traes con el nuevo, ¿cómo se llama? ¿Santiago?

—Said, —corregí—ya se los he dicho muchas veces —me iba a interrumpir Mía, pero le gané haciéndole una seña con el dedo índice— y antes de que me interrumpan, no, no somos nada, es solo un amigo.

Así soy  ✓ [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora