A Sweet Omega | JiChen

Segunda Parte: Descubrir.

Capítulo X.

“De corazón calmado, rostro tranquilo,
frente serena.
Como el otoño, frío,
como la primavera, cálido.
Airado o alegre según el humor de las cuatro estaciones.
Adaptándose a las cosas, a los seres,
sin que nadie conociera sus límites.

Así, un Santo al frente de un ejército
conquistaba un país sin perder sus habitantes.
Repartía sus bienes entre mil generaciones
sin que el amor lo empujara.
Quien se regocija entre los hombres,
no es un Santo.
Quien actúa con afecto,
no es benevolente.
Quien escoge el momento,
no es sabio.
Quien no equipara pérdidas y beneficios,
no es un hombre de bien.
Quien actúa por renombre y se pierde,
no es un hombre honesto.
Quien se destruye huyendo de la verdad,
no es apto para el gobierno.
Hu Buxie, Wu Guang, Bo Yi, Shu Qi,
Jizi, Xu Yu, Ji Tuo y Shentu Di
servían como esclavos de los otros,
se complacían complaciendo a los demás,
pero nunca complaciéndose ellos mismos.”

Zhuang Zi; Capítulo VI
EL GRAN MAESTRO ANCESTRAL.

[...]

—Esa no es una razón para que actúe como un idiota.

Su alfa lo controlaba, decía cosas estúpidas. No era él mismo, el Jisung que conocía sería más sensible con respecto al tema... O era su actitud de Omega la que creía eso.

Jisung sacudió la cabeza y lo miró.

—Lamento ser un insensible, pero debería superarlo.

—¿Por qué actúas así? —Murmuró Chenle con timidez.

—No siento empatía hacía Kunhang hyung, es complicado explicarlo. Es difícil sentir “lastima” por él cuando repite una y otra vez que los omegas son inútiles, pobre de su omega.

Sintiéndose incómodo por el incomprensible tono de voz de Jisung, cambió de tema.

—¿Por qué te preocupa que me hagan daño? —Indagó.

Jisung sonrió, no era tan grande, a penas se veía. Nada sorprendente de su parte, no obstante, su fue algo que lo sorprendió.

—Me importas, eres mi Omega.

Chenle abrió los ojos soltando un sonidito impresionado.

¿Había escuchado bien?

Sonaría ridículo no decir que una parte de él esperaba esa respuesta. Escucharlo era otro tema, sonaba más definitivo.

No, oh dios... Se está quedando sordo.

—¿Cómo estás tan seguro de eso? Te estás adelantando un poco a los hechos, ¿No crees?

—Mi alfa solo reacciona a tu Omega, puedo apostar a que provoco lo mismo en tí. —Respondió sonriendo.

Bien, esa es un argumento adelantado, y lamentablemente cierto.

Jisung giró su cabeza para mirar los alrededores, solo quedaban unas pocas personas, al parecer Kunhang se fue.