Especial III: Kunhang.
Chenle miraba al público con una expresión asustadiza, aquellas personas eran frías e ilegibles. En ese espectáculo estaba su gran oportunidad de entrar a la escuela de música más prestigiosa de Shanghai.
Un nudo se formó en la boca de su estómago.
—Estarás bien. —Dijo Kunhang para animarlo.
—¿Y mamá?
—Estará aquí cuando estés allá afuera.
—¿Y los abuelos?
La expresión de Kunhang se oscureció.
—Están lejos, no pueden venir aún.
Chenle no comprendería por qué su familia no podía darse un descanso de su agitada vida, tampoco quería repetir las palabras de sus abuelos el momento en el que les dijo sobre el espectáculo de Chenle. Recuerda cada palabra:
“Cuando logre algo realmente significativo en su vida, estaremos ahí. Esto no es importante”.
No, en cambio, prefería mentirle diciendo que ellos quisieran estar ahí apoyándolo. No creía seguir siendo capaz de soportar la culpa de engañar a Chenle y hacerlo vivir en una piadosa mentira. Estaba mal.
—Tú puedes hacerlo, estoy aquí contigo. —Añadió observando la expresión intranquila de su hermano.
Él asintió suspirando, entonces un poco de todo el gran e inmenso pánico guardado desapareció. Y cuando salió al escenario, observó al público directamente con sus rasgados ojos.
Lágrimas aparecieron en los ojos de Kunhang y marcaron su rostro.
¿Dónde estaba mamá cuando la necesitaban? ¿O papá? No había nadie.
Estaba harto de engañarlo, diciendo cuan querido era cuando él mismo ha llegado a cuestionar.
Ser mayor implica tener la vista más cerca al mundo adulto, significa cuidar de los pequeños para no salir heridos, porqué son inocentes y no merecen guardar rencor en sus corazones.
Desearía ser mayor y así poder tomar a su hermano y sacarlo de ese infierno, no puede hacerlo, él también es un niño. Uno que tuvo que madurar cuando no debía.
Chenle tocaba con maravilla, sintiendo cada sonido.
Kunhang miró al público, exactamente a los únicos tres asientos vacíos. Sabía cuánto le dolía a Chenle verlos así, sin nadie que los ocupe.
Minutos y minutos, seguían vacíos. Cuando acabó, sabía que tenía preguntas a las que responder, no sabía cómo.
—¿Dónde está mamá?
Primera pregunta, sabe que las mentiras que dice son por el bien de ambos.
—Su vuelo se atrasó, no pudo asistir.
Chenle se preocupó al instante.
—¿Está bien?
—Si, justo ahora debe estar descansando.
El menor asintió.
—¿Crees que le hubiera gustado?
Segunda pregunta, la cual sabía cómo responder pero sería cruel.
ESTÁS LEYENDO
A Sweet Omega | JiChen
FanfictionUn simple pueblo ocultaba grandes maravillas y secretos, entre ellos estaba Chenle. →Jisung Top! Chenle bottom! Inicio: 09/07/2021. Terminada: 01/02/2022.