Destello Azul

30. Amargas verdades

Un par de días después de la partida del grupo de Gusu, la caravana Lan decidió quedarse a dormir en una posada. Wei Ying arrulló a A-Yuan hasta que se quedó dormido, luego se sintió vago y decidió bajar para recorrer los alrededores. —Meng Fei— Justo al dar vuelta en una esquina se encontró con el espectro del joven quien estaba agazapado tratando en la medida de lo posible vitar ser visto por algún cultivador.

—Joven maestro Wei— No se mostró sorprendido.

—Meng Fei ¿Qué haces aquí? ¿Me estás siguiendo? ¿Me espías? ¿Estás acosándome? ¿Te gusto? No, no, no debo gustarte, recuerda que soy un hombre felizmente casado—

—...—

—Olvídalo, te entiendo y ya sé que soy muy hermoso—

—Soy un omega— susurró Meng Fei.

—Si, si, si— Wei Ying sacudió su mano.

—Joven maestro Wei, justo hace un par de días experimenté una extraña sensación y sin darme cuenta mis pies empezaron a seguir a un grupo de cultivadores de Gusu en el que usted y el pequeño joven maestro iban, en un principio traté de detenerme por temor a ser visto por los cultivadores, pero no pude evitarlo y no entiendo mi conducta—

— ¿Te sientes atraído a seguir a alguien es específico o solo sientes el impulso de seguirlo? —

—No lo sé. Desde esta distancia es imposible identificar la fuerza que me atrae—

—Interesante— Wei Ying sacudió su nariz —Como no sabemos la causa, debes evitar acercarte al grupo—

—Si—

—A todo esto ¿Por qué estabas aquí afuera espiando? —

—No es mi intención, media hora antes de que el joven maestro Wei saliera, vi salir de su habitación al segundo líder de la secta Lan, se dirigió a una habitación alejada del resto y poco después entró un alfa cubierto de la cabeza a los pies con una capa negra—

— ¿Es así? ¿Dónde está ahora? — Una pícara sonrisa afloró en los labios del omega —Xichen-ge dijo que no podía acompañarlo, pero se dio su tiempo para tener una cita clandestina con Yao-ge— miró al joven fantasma — ¿En qué habitación se encuentran? —

—La del fondo a la izquierda— después de soltar la información sus ojos se abrieron con sorpresa, aunque Wei Ying no pudo verlo debido al velo —El joven maestro no guarda malas intenciones en su mente ¿Verdad? —

—Claro que guardo malas intenciones— se dio la vuelta y se dirigió hasta el lugar indicado, pero para sorpresa del joven Meng, se limitó a parar oreja y escuchar detrás de la puerta con una brillante sonrisa que poco a poco fue borrándose de su cara mientras continuaba escuchando.

Jin Guangyao se levantó de la cama y puso su bata sin mirar al joven que continuaba acostado y mirándolo con una sonrisa lasciva — ¿Lograste repararlo? —

—Lo hice, si tuviera la pieza completa sería mucho mejor, pero mi trabajo final es bastante aceptable—

—Aceptable no es el trato, quiero mejorar o por lo menos igualar el sello del Tigre Estigio—

—Lo siento cariño, lo que ves es lo que hay—

—Muy poco— Jin Guangyao miró con menosprecio al hombre recostado en la cama.

—No decías eso hace algunos minutos—

—No tengo muchas opciones— Poco antes de que su padre muriera le presentó a un joven alfa muy talentoso que aseguraba podía reparar el Sello del Tigre Estigio partiendo desde uno de los fragmentos rotos que Wei Wuxian dejó al destruirlo. En un principio tanto el padre como el hijo dudaron, pero poco a poco se dieron cuenta que el joven tenía el potencial para lograrlo, su nombre: Xue Yang.