Destello Azul

6. Los discípulos invitados

Semanas antes de partir a clases en Gusu, los Jiang fueron invitados a visitar la secta Jin para afianzar las relaciones entre los jóvenes prometidos. Como ya era costumbre, la actitud de Jin Zixuan fue altanera y apática, también fue grosero con Yanli cuando sus padres no estuvieron presentes. Las cosas hubieran continuado de esa manera si el Pavo Real hubiera intentado disimular el desprecio que sentía por la idea de su compromiso.

Estando su novia como invitada en la secta era inevitable que sus compañeros discípulos hicieran comentarios acerca de su afortunado compromiso, futura felicidad y lo bonita que era la señorita Jiang, aunque estos eran bien intencionados surtieron un efecto contrario provocando la ira del joven —No me parece que mi compromiso pueda ser catalogado como afortunado— soltó sin pensar — ¿Quién puede considerarme un hombre afortunado? Más bien me siento obligado a casarme con una simple beta, que por si fuera poco no cumple con el mínimo nivel de cultivo—

—Jin Zixuan, deberías disculparte con mi hermana— detrás de él Jiang Cheng apretaba los puños con fuerza tratando de calmarse y no romper la bonitamente inútil cara del joven. A su lado estaban Wei Ying y Yanli quien se limitó a bajar la mirada avergonzada, detrás de los hermanos se encontraban sus padres y los señores Jin.

— ¿Por qué habría de hacerlo? ¿Desde cuándo expresar mis opiniones es motivo para pedir disculpas? — Si algo caracterizaba al joven heredero, era su carácter voluntarioso que no le permitía dar marcha atrás a sus palabras. No vio llegar el golpe hasta que literalmente se encontró besando suelo y ninguno de los presentes pudo molestarse con el agresor: Wei Ying. Al estar los padres del novio presentes durante el desliz no hubo mucho qué hacer o decir en favor del pavo real, finalmente los Jiang partieron con un compromiso roto y la promesa de continuar con la amistad que los unía.

El tan esperado día para partir con destino a Gusu había llegado y Wei Ying se despertó temprano sin necesidad de ser amenazado por su hermano y tía. El comportamiento del joven era tan extraño que tanto la señora Yu como Jiang Cheng se preocuparon por su salud.

—Tía, Cheng-Cheng, llevan un año recordándome de que debo portarme bien y no hacer que nuestra secta pierda la cara. Como pueden ver, este atractivo omega está dispuesto a comportarse de lo mejor— La descarada sonrisa del joven solo preocupó más a la mujer y a su hijo.

—Eso espero, porque de lo contrario probarás a qué sabe Zidian—

—Y yo voy a romperte las piernas—

—Cheng-Cheng, ¿Te das cuenta de que esta visita es una buena oportunidad para convivir con los futuros líderes de otras sectas? y es muy probable que encuentres a una víctima inocente que quiera casarse contigo, digo, tan feo no eres, solo asustas a la gente con tu ceño de marca registrada y tu carácter más ácido que el jugo de un limón— Yanli y su padre escondieron una carcajada limpiando sus bocas con un pañuelo. La señora Yu simplemente se dio una palmada en la frente.

—Este niño no tiene remedio— susurró.

—Debí ahogarlo cuando lo enseñaba a nadar de chiquito— Se quejó Jiang Cheng.

—A-Xian tiene un poco de razón, fomentar las buenas relaciones entre los futuros líderes de secta es una de las razones por las que se organiza este tipo de enseñanzas— confirmó el líder —A-Cheng, moderar tu mal carácter no es un mal consejo—

— ¿Cuál mal carácter? Soy una gran persona cuando no tengo que lidiar con este irremediable tonto— señaló a su hermano mayor —Si no queremos perder la cara ante las demás sectas debemos dejarlo encerrado en muelle de loto y nunca dejarlo salir—