🍷Aferrate en mi🍷PAUSADA

🍷3🍷

No les pasa que despiertan con  un sueño que incluso piensan que en cualquier momento se quedarán dormidos de pie en cualquier lugar?

Bueno pues haci despertó Park Jimin

Con el sueño hasta los huesos y la flojera en todo el cuerpo.

Un desastre andante

Hoy era viernes, el preciado viernes para muchos
Último día de clases, de trabajo, de hacer las responsabilidades y más.

Pero cuando vas ha bailar frente a más de 200 personas y tienes que ensayar, no existe el viernes.

— te ves fatal sabes — hablo Taehyung.

los tres caminaban por los pasillos de la institución, sus clases de la mañana ya habían pasado y ahora se encontraban en su hermoso descanso, se dirijan a su lugar de siempre bajo su árbol de cerezo mejor dicho " Nana" como Jin le avía puesto.

Jin y sus cosas poniéndole nombre a un árbol.

—concuerdo con Tae, parece que te paso un carro encima, y eso que no vemos tu cara completa imagínate — respondió Jin, sentándose en la banca junto a Tae y jimin enfrente.

— tan mal me veo?— los dos mayores asintieron — mierda!!, ensaye toda la tarde ayer y en la noche hize la tarea de química y terminé a las 3 de la mañana— explico, mientras recostaba la cabeza en la mesa.

— pues eso explica porque pareces un zombie — opino Jin metiendo una papita en la boca.

— confifmof — hablo Tae.

— que asco Taehyung!!! Tus babas y comida calleron en mi cara — grito y se quejo el menor. Tratando de limpiar la comida que había caído en el cubrebocas.

— nifnodof— respondió metiendo mas cómoda a la boca.

— ajjj asqueroso, iré al baño a cambiar mi cubrebocas ya vuelvo— informo a los mayores, para levantarse y ir rombo al baño.

Cuando el menor llegó al baño entro a un cubículo para cambiar su cubrebocas, abrio su mochila y saco un cubrebocas de repuesto, jamás se sabía cuándo tendrías una emergencia, tiró el sucio a la basura y miro su reflejo en la pantalla de su celular.

Tenía  leves ojeras, sus ojos se miraban cansados y con nada de vida.

— tienen razón parezco un zombie,—.

Miro su reflejo por última vez, peino su cabello rubio un poco y bajo sus ojos se puso su crema, su salvadora, sin ella no salía, se miró y se dió cuánta que se miraba menos zombie, se colocó su cubrebocas y salió del cubículo.

Y quedó estático un segundo.

Una espalda ancha, bien marcada con tinta negra, que mejor dicho un tatuaje, solo se alcanzaba a notar unas garras y una cola, tal ves sería un dragón quien sabe.

Bajo su mirada hasta la cintura y noto lo pequeña y fornida que era.

Y pensó lo peor.

Camino hasta el lavamanos y se colocó dos lugares alejado del pelinegro.

Cuando terminó de lavar las manos levantó su mirada al espejo y noto que el pelinegro lo miraba.

Su mirada negra y profunda, pero con un brillo, que si lo mirabas te perdidas en esos orves negros.

Desvió la mirada y tomo un papel para secarse las manos, para luego tirarlo al basurero.

— oye — lo llamo el mayor.

— que?— pregunto dándose la vuelta para mirar al menor.

— tienes algún trapo o algo para que me seque?— pregunto dándose la vuelta completa y dejando a la vista su cuerpo de dios griego.