Adrien se encontraba en su oficina, en una de las mansiones más hermosas de las Tierras de Piroxeno, estaba revisando el papeleo del viñedo, pues él era uno de los mayores exportadores de vino de todo Twisted Wonderland, en ese momento alguien entró a su oficina.
- Jefe, ya lo trajimos, está en el sótano.
Adrien sonrió levemente mientras mostraba sus colmillos, sin duda alguna estaba complacido.
Adrien: Excelente, ya voy para allá
Aquel hombre salió de la oficina de Adrien, seguido por el pelinegro, llegaron a un sótano que estaba iluminado solamente por la luz de un foco, allí estaba un hombre amarrado a una silla, tenía moretones en la cara, un ojo morado y la nariz rota.
Adrien: Bueno, bueno, bueno, al parecer alguien quiso huir -Dijo el pelinegro en un tono burlón-
- ¡No es justo! ¡Dije que pagaría a final de mes! -Exclamó aquel hombre completamente alarmado y asustado-
Adrien: Eso dijiste hace tres meses, cuando se suponía que ya debiste haber pagado. -Dijo cruzado de brazos-
- ¡Solo fue un pequeño atraso!, Por favor espéreme un poco más -Suplicó asustado el hombre-
Adrien: Lo siento amigo, negocios son negocios -Dijo chasqueando los dedos-
Apenas chasqueó los dedos, aquel hombre empezó a desintegrarse, ocasionando que solamente quedarán cenizas de lo que fue alguna vez...
Adrien: Limpia esto, debo irme -Dijo acomodando su traje, mientras uno de sus empleados asentía- Tengo una llamada con mi hijo Cater.
El subordinado de Adrien asintió a la par que este se iba.
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Tᴡɪsᴛᴇᴅ Wᴏɴᴅᴇʀʟᴀɴᴅ Iɴᴄᴏʀʀᴇᴄᴛ Qᴜᴏᴛᴇs
FantasíaNo hay mucho que decir, solo el hecho de que no me convencía la versión anterior del libro.