Tᴡɪsᴛᴇᴅ Wᴏɴᴅᴇʀʟᴀɴᴅ Iɴᴄᴏʀʀᴇᴄᴛ Qᴜᴏᴛᴇs

♡ 37 ♡

James había hecho un excelente trabajo como capitán, había ganado prestigio y respeto.... Además de que había notado que cierta persona se había acercado mucho a el, al principio quiso restarle importancia y creyó que era por la relación General-Capitán, pero después se dió cuenta de que no era por eso.

Lilia siempre estaba al pendiente de el, le llevaba de sus "deliciosos" platillos, que con trabajo comía, pero era por compromiso....

El consideraba a Lilia como un amigo cercano.

Un día Lilia llegó a un lugar de un bosque donde el peliblanco estaba entrenando y le dijo algo maravilloso.

Lilia: Jamie~

Ese apodo era un tanto extraño para el peliblanco, pero se había acostumbrado a ello.

James: Lilia, ¿Qué necesita? —Preguntó el peliblanco mirando a Lilia—

Lilia: James, quiero ser sincero contigo —Dijo el más bajo tomando las manos de James entre las suyas—

James: Lilia.... —Murmuró mirando a Lilia—

Lilia: James, por favor se mi pareja —Dijo mirando a los ojos del peliblanco—

James dudaba en si aceptar o no, su instinto le decía que no lo hiciera porque algo iba a salir mal, pero decidió hacerlo por curiosidad, además de que pensaba que iba a estar bien.... No era como si se fuera a enamorar o como si esto fuera a llegar más lejos.

James: Supongo que si —Dijo el peliblanco con calma, el no solía sonreír—

Allí fue cuando comenzó una relación, Lilia amaba a James, quien solo tenía curiosidad por saber como era esto del amor, pasaron varios años juntos, pero las cosas no eran tan de color de rosa para la pareja, pues Lilia quería sentir más que solo la compañía del peliblanco, quería sentir su calor, quería tener abrazos, besos y mimos del peliblanco 24/7, quería que James fuera el estándar de la pareja perfecta en el Valle de las Espinas, pero James no lo hacía, el peliblanco no era meloso, eso no encajaba con el, James era un soldado hecho y derecho, no alguien que simplemente debía servir solamente para complacer a su pareja.

Lilia constantemente le decía a James que quería que tuvieran una vida perfecta juntos, quería que James dejara de ser soldado y se convirtiera en el señor de Vanrouge, pero James le decía algo como "Aún no estoy listo para casarme Lilia, tengo que proteger el Valle", Lilia se fastidiaba con ello, pero no lo demostraba, James lo sabía muy bien.

Un día James fue asignado a una misión muy lejos del Valle de las Espinas y por ello tendría que estar fuera por un tiempo....

James se despidió de Lilia, pero Lilia dijo que cuando el volviera ambos se iban a casar....

James internamente se había quedado sorprendido por aquellas palabras, incluso consideró decirle que no iba a hacer eso, pero no lo demostró, así que sin tardar más partió a su misión, Lilia y todos los subordinados de James (Es decir los miembros del 8vo batallón) fueron a despedirse de James.

James partió a cumplir su misión, pasaron exactamente 6 años sin saber del peliblanco, cuando el regresó sin previo aviso al Valle de las Espinas, los primeros con los que se encontró fue con sus subordinados, ellos lo recibieron alegres, pero dos de ellos lo miró con tristeza... Eran Albert Tennyson, su mejor amigo y segundo al mando junto con su amiga Chantel DuBois, una demonio y amiga de la infancia de James.

James: ¿Mmm? ¿Albert, Chantel ocurre algo? —Preguntó mirando a su amigo con preocupación, claro que no lo demostraba—

Albert: James... Estoy feliz de que regresaras a salvo.... Pero....

James: ¿Pero?

Chantel: Hay algo que debes ver.... —Dijo cruzada de brazos, sabía que lo que su amigo iba a ver posiblemente le iba a doler—

James: Vamos a ver que es....

Albert le hizo señas de que los siguiera, James lo hizo, pero lo que encontraron fue horrible....

Lilia estaba abrazando a una mujer mientras ella correspondía, incluso lo escuchó decirle lo mucho que la amaba y le pedía que fuera su compañera de toda la vida.... Lo peor era que ella le correspondía a esas muestras de amor.

Al ver esa escena, James sintió un gran dolor en su pecho a la par que sentía su corazón romperse en mil pedazos, pues a pesar de que solo había estado con Lilia por curiosidad, eso le había dolido y no precisamente poco, se sintió traicionado y decepcionado, dió media vuelta y rápidamente procedió a retirarse, no sin antes mirar a ambos por última vez mientras por primera vez en mucho tiempo salían lágrimas de sus ojos por el coraje.

Albert y Chantel siguieron a su amigo, les dolía verlo así pero tenían que alentarlo en aquellos momentos de dolor.

Albert: James, no te preocupes, seguramente el no era el indicado para ti, tengo fe en que conocerás a alguien más y-

James: No Albert.... No habrá nadie más, esto me pasó por confiarme en lo que me decía el corazón y no hacer caso a mis instintos.... ¡Fui alguien estúpido y descuidado! —Dijo histérico y dolido—

Chantel: —Ella se acercó a James y lo agarró de los hombros obligándolo a mirarla— James, escucha, esto no fue tu culpa, es culpa de Lilia, estoy segura que si Lilia hubiera ido en tu lugar tu no lo hubieras cambiado a pesar de que no lo amas, así que mejor termina esa relación por lo sano o voy a romperte tu preciosa carita, ¿Esta claro? —Dijo seria—

James: Esta bien....

Albert miró con tristeza al peliblanco, sin duda esto era algo de lo que su amigo no iba a recuperarse fácilmente....

James se sentía estúpido.... En primer lugar por pensar que todo iba a salir bien.... Y segundo por creer en promesas falsas y vacías de alguien que nunca había valido la pena....

Y Chantel.... Bueno, la pelirroja quería cometer un crimen de odio contra Lilia y contra aquella humana insignificante y rastrera, pues Lilia había lastimado a su mejor amigo, aquel que desde que eran pequeños la había considerado parte de su familia, cuando todos los demás la consideraban un ser que no debía existir y que merecía sufrir antes de morir.