Little Thinks | [Willgan] [Hiatus]

🌻Capítulo 19

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Las puertas del auto sellaron de golpe asustando al albino recostando en la puerta del copiloto, estaba apunto de tener la conversación más intensa con el castaño moreno que no despegaba su vista del volante como si estuviese dudando de su decisión.

No pasó un segundo escuchandose las ruedas del auto avanzar por una larga calle dejando suspirar al menor apoyando el brazo en la ventana cerrada sintiendo una incómoda tensión en esas cuatros paredes generando una ligera ansiedad en su razón.

De vez en cuándo, veía al guardaespaldas conducir con un semblante serio agachando mínimamente la vista al gps incrustado frente a la palanca optando a ignorselo y seguir con sus pensamientos.

No quería adelantarse a los hechos, sabía que todo saldría de control en cuánto comenzarán a hablar de los sucesos del día anterior incluyendo las preguntas, tenía que haber lloros de media o algún golpe.

Le costaba admitirlo.

Willy sentía un enorme miedo crecer en la boca de su estómago aferrando frustado la mano en el corazón buscando tranquilizarse, sin embargo, el semblante serio del castaño causaba más intimidación en su persona.

¡Él debería estar serio con el guardaespaldas!
¡No el guardaespaldas con él!

Esa situación le estaba pareciendo demasiado ridícula, ya quería llegar cuánto antes a la zona de camping para solucionar todo ese lío y por una maldita vez en esos últimos 6 meses, poder ser feliz junto a su protector.

Aquel auto seguía rodando en esa carretera teniendo a un pérdido castaño mover sus manos en el volante buscando un autoservicio de comida rápida, no iba a dejar que la impotencia de su interior comenzará a matar toda su "dieta".

Había descuidado demasiado sus horarios alimenticios por sus problemas con el abogado, pocas veces comía o sólo tomaba café cómo desgraciado, cosa que jamás debía enterarse el albino porque tendría que pagar una urna de la que armaría.

El castaño solamente se preocupó por alimentar a las niñas de la casa cómo al albino, pero jamás tocaba un solo trozo de ella, la dejaba completa o la escondía en la nevera excusandose que era tarde.

Indudablemente, pensó en contarle la verdad al oji-verde apoyado en la ventana optando a quedar callado para no tener peleas, o algún reproche larguísimo por no querer descansar, estar empeñado en el trabajo y no querer hablar las cosas.

¿El amor era así de complicado?
O ¿Ambos eran así de complicados antes de conocerse?

Los labios del moreno soltaron un fuerte bufido estacionando el auto delante de un autoservicio indicándole al abogado que bajará del auto escuchando sus reproches de querer bajarse con él.

Obviamente, le negó esa opción dándole la severa orden de que estuviera tranquilo en el auto.

—Cuidate, imbécil—Dijo entre dientes Willy acomodandose en el asiento.

Fargan cerró la puerta dirigiendo sus pasos al local de comida rápida notando la enorme soledad del mismo teniendo la oportunidad especial de apresurarse a comprar las cosas y regresar su ruta al camping más alejado de la ciudad.

Caminó rápido hasta las cajas siendo atendido por una señorita de cabellos claros diciéndole amablemente que ordenaría, pidió algo ligero para ambos, o bueno, para él que llevaba días sin comer decentemente.

Ordenó para el abogado que trataba de cuidar su figura, una hamburguesa de doble carne con algunos nuggets, patatas junto a un jugo de naranja, mientras que para él, sólo pidió una ensalada césar y otro jugo de naranja.