Nuestro Vínculo .

Capítulo 18. No estaba dormida.

¡Regresé feliz! Por fin tendría un lugar para vivir y parecía que todo había conspirado para que fuese mío.

Llegué al departamento de Taichi y nuevamente no estaba su coche. Entre y me cambie poniéndome el pijama, hice una sopa instantánea para cenar y me senté en la sala. Era el tercer día que no lo veía y ya me estaba desesperando.

Había quedado con Azami de ocupar mi nuevo hogar en 5 días así que este fin de semana me encargaría de organizar mis cosas para poder empacar, y además tenía que decirle a Taichi que ya no viviría con él.

Terminé y después de unas horas de estar cambiando frenéticamente los canales a la televisión me fui al cuarto a buscar las maletas que utilizará para llevar mis cosas, tendría que hacer tiempo, comencé a organizar la ropa dejando la puerta abierta para enterarme en cuanto llegara y poder confrontarlo.

Cerca de las 10 de la noche escuché ruidos en la puerta principal y corrí, debería ser Taichi.

Me quedé parada esperando a que la puerta se abriera y poder confrontarlo. Pero no era Taichi quien abrió, era Hikari. Me miró asustada.

-Sora... estás despierta.

-Así es.

-Ahh... eso es bueno.

Miraba a todos lados, menos a mi.

Ladeé mi cabeza a la derecha para ver que estaba detrás de ella, y pude distinguir el subaru.

-¿Vienes con Taichi?

Comenzó a mover los pies nerviosa y cerró la puerta, se acercó a mi.

-Sí. el se encuentra en el coche, no se que paso, pero no quiere entrar.

-¿Por qué? ¿Sabes dónde ha estado estos días?

-Los ha pasado en casa de nuestros padres, ellos están de viaje así que por eso deje que se quedara, pero no se que le pasa, no habla, no dice nada. Ahora me pidió que pasaramos aca por ropa, debió ser algo muy fuerte lo que pasó para que se pusiera así.

Me veía suspicaz posiblemente ella sospechaba algo.

-Supongo que algo de su trabajo- menti- la última vez que hablamos estaba bien.

Hikari se veía muy exasperada.

-Bueno iré por su ropa.

-No espera, veré si puedo hacer algo.

-¿En serio?, Muchas gracias Sora.

Ella se veía preocupada y a la vez como si ya no quisiera a Taichi viviendo ahí, me rei.

Salí despacio y Hikari se quedó adentro, como estaba oscuro y Taichi estaba con los ojos cerrados no se percató que no era su hermana quien se acercaba.

-Volviste pronto, espero que Sora haya estado dormida y no se diera cuenta que entraste.

-No, no estaba dormida.

Abrió los ojos como platos.

-So...ra.

-¿Podemos hablar?- me recargue en la ventana del copiloto.

Parecía que había visto al mismo diablo, no decía nada solo me miraba nervioso.

-¿Podemos?- repetí.

-¿Puede ser mañana?, debo regresar para llevar a Hikari.

-No creo que haya problema por eso, ella puede quedarse.

-Lo dudo, mañana tiene examen.

En eso Hikari se acercó a nosotros.

-Hikari, necesito hablar con tu hermano.

Ella nos veía a ambos

-Debo llevarte a casa- Interrumpió él.- ya es muy tarde.

-Por mí no hay problema, puedo pedirle a Takeru que pase por mí, de hecho se encuentra por aquí.

Sacó su celular y envió un mensaje.

-Bueno Taichi, no veo problema, entonces...

-Si claro.

Taichi se vio derrotado, miró hacia Hikari con un dejo de tristeza ya que no lo apoyo y sabia que tenia que quedarse a hablar, o de lo contrario yo no lo iba a dejar en paz.

Nos quedamos todos en silencio, Taichi no dejaba de ver el volante del coche como si esto fuera lo más interesante del mundo, Hikari no paraba de escribir en su teléfono y yo los veía a los dos, fueron unos minutos muy incómodos para él y para mi.

-Ya viene.

Un coche gris se estacionó detrás del Subaru, era Takeru, sacó una mano por la ventana para saludar.

-Bueno hermano, adios, ¡Nos vemos Sora!

Hikari abordó el coche y acarició el rostro de su novio, partieron de inmediato.

-Bueno Taichi, ¿Pasamos? ¿O quieres hablar aquí?

-Pasamos.

De mala gana bajó del Subaru y me siguió, entramos a su departamento, la puerta se había quedado abierta, me senté en el sofá, pero él se quedó de pie.

-¿Me dirás que pasa Taichi?

Evitaba mirarme a los ojos, ahí con la luz de la sala pude ver que tenía unas ojeras muy marcadas y unas bolsas bajo los ojos, posiblemente como yo, no había dormido.

-Taichi por favor.

-No pasa nada enserio. - contestó desganado.

Seguía parado al lado del sofá mirando hacia cualquier lugar que no fuera donde estaba yo.

-No pasa nada, pero no llegaste a dormir en 3 días.

-Mis padres salieron de viaje y debía cuidar de Hikari, no puede quedarse sola.

-En otras ocasiones Hikari había venido a quedarse aquí, ¿recuerdas?

Abrió la boca pero no dijo nada.

-Taichi si tienes algo que decirme es el momento, se que estas molesto.

-No lo estoy.

Suspiré.

. -Yo... me mudaré este fin de semana.

Ahora sí miró hacia mí, tenía cara de sorpresa.

-¿Te mudarás?

-Sí, era algo que había estado planeando desde hace tiempo, estaba en búsqueda de un lugar cerca de la escuela y por fin lo encontré...

-Si me disculpas, debo ir a mi recámara.

No me dio tiempo para contestar cuando ya había caminado rápido y estaba cerrando la puerta de su cuarto.