34. Amigo cercano

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Sin haber podido dormir en toda la noche, Shen Mu ordenó todos los acontecimientos recientes en su cabeza.

Nunca rehuía las emociones en su interior, pues era su estilo habitual abordar los problemas de frente. Aquel día en el jardín trasero, cuando buscó repetidamente a Xiao Fan entre la multitud, se dio cuenta de que su nivel de preocupación por Xiao Fan había cruzado la línea de "amigo".

El joven se enterró en su cuello y hombro, frotando su cabeza de forma muy leve, al parecer inconsciente de que su comportamiento era diferente al de la vez que le dijo que se fuera. Era como si no se diera cuenta de que lo que estaba haciendo en ese momento era, en opinión de Shen Mu, lo mismo que hacer pucheros y actuar como un bebé.

Esta cognición hizo que Shen Mu se sintiera preocupado.

No dudaba de la dependencia de Xiao Fan hacia él, pero de lo que no estaba seguro era de si alguien como Xiao Fan, que a menudo tenía problemas para percibir y expresar sus emociones, podía diferenciar entre "una amistad profunda" y "amor".

Tenía que preguntar primero.

Rodeado por el alto joven, Shen Mu levantó la mano y tocó la espalda de Xiao Fan, preguntando sin rodeos—Xiao Fan, ¿te gusta que te abrace así?

En el momento en que las yemas de sus dedos tocaron la esquina de su ropa, todo el cuerpo del joven permaneció inmóvil como una placa de acero. Incluso su respiración pareció congelarse, pues no se sentía la más mínima subida y bajada de su pecho. Solo las manos alrededor de su cintura seguían ejerciendo un poco de fuerza.

Shen Mu sabía que había presionado demasiado al hombre, por lo que levantó la mano para darle una palmadita en la espalda con la intención calmarlo.

Como ya estaba sin aliento, solo pudo tirar de la ropa del joven, soltando un suave jadeo con un poco de urgencia—No te pongas nervioso, no quiero decir nada más...

—...Me gusta

— Te gusta

La mano en su cintura se retiró lentamente y Shen Mu, que respiraba con dificultad, levantó la mirada para encontrarse con los ojos de Xiao Fan. Sus negras pupilas ardían y en el fondo pudo ver reflejado su propio rostro. Aquella mirada estaba llena de fervor.

Al ver aquel par de ojos tan puros en los que no había ningún indicio de lujuria, Shen Mu dejó escapar un largo suspiro, pensando que Xiao Fan era realmente demasiado joven para estar involucrado en el amor. Lo había insinuado de forma muy evidente, pero seguía siendo forzado. Las dos palabras que respondió fueron rígidas y torpes.

No importa. Todo es difícil al principio, pero si le enseña paso a paso, Xiao Fan no estará siempre confundido.

Después de recuperar el aliento, Shen Mu levantó los dedos para enderezar el cuello un poco desordenado de Xiao Fan. Tratando de no asustar al niño con demasiada fuerza mientras sopesaba sus palabras con cuidado—Ya que Su Majestad está satisfecho con este presente, ¿puedo pedirle un regalo también?

Xiao Fan se había exaltado hasta el punto de no poder hablar. Su corazón latía con desenfreno y su mente estaba en blanco, por lo que solo emitió un par de murmullos desordenados, sin reaccionar siquiera a lo que Shen Mu había dicho.

—De hecho, en mi ciudad natal, hay una forma especial de expresar bendiciones entre amigos cercanos durante estas fechas.

Mirando de cerca a los ojos de Xiao Fan, su cuerpo se inclinó un poco hacia adelante. Shen Mu se fijó en todas las expresiones faciales del joven y cuando estuvo seguro de que no se sentía incómodo, inclinó un poco la cabeza y tocó ligeramente su mejilla derecha con ambos labios.

El Regente que abdicó después de transmigrar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora