SOLA | BELLAMY B.

CAPÍTULO 19

Nos encontrábamos caminando nuevamente en el bosque, sólo que ahora en compañía de los terrestres y en dirección hacia la nave. La comandante le había pedido a Clarke pruebas de que Lincoln había dejado de ser un carroñero y que la rubia podía curarlos. Nos había dado un voto de confianza a pesar que Indra le decía lo contrario. 

Miré a Clarke por el rabillo del ojo, ella iba con la cabeza en alto y el ceño ligeramente fruncido. Toda su postura estaba tensa al igual que la mía. Sabía qué, al igual que yo, ella también estaba nerviosa a que todo el plan se fuera por la borda. Así que por primera vez en mucho tiempo, quise aferrarme a la ilusión positiva de que todo iba a salir bien. 

Llegamos a la nave y los nervios sólo se incrementaron aún más, detrás de esos muros de metal se encontraba nuestra única esperanza. Clarke y yo caminamos hasta la estampilla y nos detuvimos ahí para mirar hacia la comandante, la cual no tenía buena cara al presenciar todos los esqueletos casi calcinados en el lugar. Todos aquí estábamos conscientes que entre todos esos montones de huesos iban tanto guerreros de su lado cómo del nuestro. Guerreros que no pudieron escapar del fuego. 

—Es por aquí—habló Clarke haciendo un movimiento de cabeza hacia el interior de la nave. Todos la seguimos en silencio. 

Subimos por la escotilla teniendo de fondo el sonido de nuestras pisadas, Clarke iba arriba, después yo y de mi seguía la comandante junto a sus guerreros. Fue aquí dónde deseé que los segundos pasaran más lentos, pero fue todo lo contrario, al igual que mi ilusión por que todo saliera bien. En cuanto Clarke abrió la última escotilla para subir al tercer piso el llanto de Octavia inundó el lugar, haciendo que la situación se pusiera más tensa de lo que ya estaba. Dentro del tercer piso nos encontramos a la menor de los Blake llorando e implorándole a Lincoln que volviera dentro de él nuevamente. Bellamy observaba la situación nervioso y más cuando vio a los terrestres detrás de nosotros. Tomó su rifle y con un movimiento sutil de cabeza nos indicó que nos pusiéramos a su lado. 

Mi mirada se posó en la comandante la cual le dio un asentimiento de cabeza a Indra, la cual gruñó antes de dirigirse a sus guerreros. 

—Maten a todos—ordenó haciendo que ellos alzaran sus espadas y lanzas, y Bellamy le quitara el seguro a su arma. 

"Mátalos primero antes de que ellos los maten a ustedes"

—¡No, por favor! No tienes por qué hacer eso—suplicó Clarke hacia Heda, pero esta negó con la cabeza antes de hablar con ira. 

—Mentiste y ya no hay tiempo—escupió antes de hacerle una seña a un guerrero. 

El guerrero se acercó a Clarke alzando su espada, listo para matarla. Pero el sonido de pasos corriendo nos alertó a todos. De la escotilla aparecieron Abby junto a guardias del Arca armados con rifles, los cuales apuntaban a los terrestres. Esto provocó una gran distracción en ellos lo cual Abby usó a su favor para correr hacia Lincoln y apoyar el taser en su pecho. El hombre gruñó de dolor en respuesta a la descarga eléctrica. Después arqueó su espalda en un ángulo doloroso y dio una pequeña convulsión antes de caer rendido al suelo. 

—Haz eso de nuevo—ordenó Clarke hacia su madre la cual no perdió el tiempo en repetir el doloroso proceso de nuevo. 

Lincoln dio una bocanada de aire antes de abrir los ojos y toser un poco en el proceso. Todos estábamos impacientes ante su reacción. Octavia se acercó a él poniendo de forma cautelosa su mano en el hombro del moreno. 

—Lincoln...

—Octavia—susurró el su nombre con alivio, antes de abrazarla y dejar que la chica llorara en su pecho.