SOLA | BELLAMY B.

CAPÍTULO 30

"Parecen bestias"

El terrestre cayó con un sonido sordo al suelo cuando su contrincante lo derrotó. Estábamos "entrenando", bueno, ellos estaban entrenando porque nosotros o Skaikru —como ellos nos llamaban— sólo veíamos desde una distancia prudente a ellos.  A mi lado se encontraba una ansiosa Octavia que esperaba cualquier oportunidad para pelar. La miré de reojo notando que su apariencia ya estaba muy cambiada a cuando llegó, ahora el cabello lo tenía más largo y lo llevaba trenzado, su ropa era toda de color negro lo cual la ayudaba para el camuflaje, en su espalda siempre cargaba una espada y su rostro ya tenía sus facciones más maduras y definidas. 

Ya no parecía una niña de 17 años. 

Escuché que protestó cuando vio que otro terrestre le había ganado el campo de práctica y se ponía luchar contra el ganador del round pasado.  Anteriormente nos habíamos puesto a practicar las dos y Octavia era realmente buena, tenía mucha agilidad con la espada. Pero no se le había dado la oportunidad de demostrarlo frente a los terrestres. 

—¿Dónde está Murphy?—pregunté intentando distraer un poco a Octavia. 

—Lo último que supe algo de él fue que se unió a Jaha a buscar la ciudad Luz—contestó encogiéndose de hombros. 

¿Qué no se supone que odiaba a Jaha? 

—Es impresionante, ¿no creen?—Kane llegó a nuestro lado mirando fascinado la pelea entre los terrestres. 

Ninguna de las dos contestó, nos limitamos a seguir observando la pelea.  Después de un momento Kane y Octavia empezaron a entablar una platica entre ellos en dónde yo solo asentía o negaba con la cabeza cuando me preguntaban algo. Pues mis pensamientos seguían perdidos en aquella piedra blanca. 

Miré las cicatrices de mis brazos y recordé la que tenía en mi abdomen, apenas y eran pequeñas manchas en mi piel, a excepción de la de mi abdomen pues esa si estaba ligeramente abultada. 

 —Sigo yo—la voz de Octavia sonó fuerte y decidida mientras caminaba hacia el centro. Algunos terrestres soltaron una risa burlona la cual ella ignoró—¿Se supone que debemos entrenar junto, no?

—Sólo los guerreros entran aquí—le contestó Indra. 

—Te salvé la vida y aún así sigues dudando de mi—reprochó la chica apretando los dientes. 

—Y ahora yo estoy salvando la tuya—echó en cara Indra. 

Octavia no le contestó con palabras, sino que desenvainó su espada y se puso en posición de pelea retándola. Indra se enderezó y después de unos segundos ella tomó su espada y se acercó a Octavia, la mujer le dijo algo en su idioma antes de dar el primer ataque. La pequeña Blake no fue lenta en reaccionar y le devolvió el ataque. A pesar de que Octavia era buena con la espada le faltaba mucho para tener la misma habilidad que Indra. Su cuerpo pequeño y delgado le daba más agilidad y rapidez, pero eso no era suficiente para la fuerza y estrategia de la terrestre.  

—Octavia no sabe en lo que se metió—la voz de Kane sonó preocupada.

Sonreí ligeramente antes de responder. 

—Indra tampoco. 

Octavia de un golpe logró tirar a Indra al suelo, la mujer hizo una mueca de olor al caer sobre su mano. La sonrisa triunfante de Octavia no se hizo esperar, pero su error fue darle la espalda a Indra. Con sus piernas dio un golpe en las pantorrillas de Octavia tumbándola al suelo y quitándole su espada. La mujer la acorraló contra un pie en su pecho y apuntándola con amabas espadas.