Capítulo 33: Tiene Razón

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Narra Rebeca
No era sierto que tenía sueño...
Simplemente quería salir de ese lugar, pero no quería que Diego se sintiera obligado a dejar a su amigo, pero...
Creo que fue peor, no me fui al cuarto, me quedé en el pasillo para escuchar un momento lo que Mía decía, pero después de escuchar todo lo decía me puso a pensar que es sierto lo que ella dice, eso me puso muy triste y me fui rápido al cuarto ya que escuche que Diego estaba muy enojado con Mía, llegando al cuarto, cerré la puerta y me puse a llorar pensando en ¿que pasaría cuando se acabaran mis estudios? o ¿si Diego tuviera que irse por que lo ficharon en otro equipo?, estaba tan metida en mis pensamientos hasta que el sonido de la puerta abriéndose llamó mi atención

Narra Diego
Estaba muy enojado por como se había comportado Mía con Rebeca y todo lo que había dicho de ella que ni siquiera recordé que Rebeca seguía en mi casa, corrí hasta mi cuarto donde me dijo que estaría por que se quería dormir pero es obvio que no era eso por lo que se fue, abrí la puerta de mi cuarto esperando ver a Rebeca acostada en mi cama, pero no, la vi parada viendo hacia afuera por la ventana, en el momento que abrí la puerta no me percate de que estaba llorando, sino hasta que ella me volteo a ver, me quedé un momento parado en la puerta ya que estaba pensando ¿porque lloraba?, pero sin preguntarle nada solo me aserque a ella y la abrace para consolarla, una vez que ella estaba
más tranquila decidí hablar

-¿Quieres decirme por qué llorabas, amor?

-*niega con la cabeza*

-Está bien, no te obligarte, pero, ¿ya quieres irte?

-*niega nuevamente*

-Está bien, ¿te quieres quedar a dormir conmigo?

-*asiente con la cabeza*

-Bueno, pero ven, te daré ropa para que duermas mas cómoda

-*lo sigue*

Narro yo
Rebeca no se quería ir a su casa y aprovechando que al día siguiente no tenía clases se quedó con Diego, después de un rato bajaron porque escucharon a Mary llegar, Mary se dio cuenta de inmediato que Rebeca había llorado así que les dijo

-¿Qué pasó?

-¿Qué pasó de que mamá?

-A mí no me engañas, Rebeca estuvo llorando

-Pues...

-¿Porque Rebeca, que te hizo Diego?

-No me hizo nada, señora, no se preocupe

-Claro que me preocupo, no me gusta saber que estabas llorando y menos me gustaría enterarme de que el culpable es Diego

-Su hijo no me hizo nada, señora- *le sonrie* -Pero gracias por preocuparse por mi

-Bueno, y si Diego no te hizo nada, quien fue

-Es una larga historia, mamá

-Pues tengo el suficiente tiempo para escucharla

-Esta bien, le vamos a decir

-Pero por lo pronto, Rebeca se quedará a dormir hoy aquí, mamá

-Claro que sí, pero, con eso me dijeron que algo no anda bien

Bueno ya, hasta aquí hoy una disculpa por hacer tan enredosos los capítulos pero si no entienden algo, solo preguntenme, yo les contestaré, y sin mas que agregar, nos vemos luego, adiós, los amo, gracias por leer

¿Encerio, me quieres? [Diego Lainez] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora