Veinticuatro.

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San Andrés lo enamoró por completo. Desde sus hermosos paisajes verdosos hasta su increíble mar de siete colores. Nadó junto a Amelia, Jaden y Louis. Algunos fans de Louis se acercaron y otros tantos de Harry igual. Todos fueron muy amables, incluso una mujer mayor peinó el cabello de Amelia en trenzas, unas trenzas típicas del lugar y que hicieron ver a su niña muy preciosa.

Pero el día de partir llegó y Harry sentía que dejaba una parte de sí en aquella mágica isla. A pesar de que conoció hermosos lugares con las personas que más ama en el mundo, quería quedarse.

"Cuando los niños estén mayores y vayan a la universidad, me gustaría envejecer en una isla." Dijo Harry mientras caminaban por la playa.

Descalzos, sus manos entrelazadas y Amelia y Jaden corriendo frente a ellos. Harry se sentía en un cuento de hadas, en un sueño del cual no quería ser despertado.

Louis lo miró y Harry pudo ver cómo sus ojos se llenaban de lágrimas. Frunció el ceño y Louis bajó su cabeza y con la mano libre apartó el agua salada que quería salir de sus ojos.

"Es increíble." Susurró Louis.

"¿Qué te pasa, Lou?"

"Es increíble esto. Nunca pensé que pudiera volver a vivir cosas así contigo. Mucho menos que incluyeras a Jaden en el futuro y, me duele el pecho de lo feliz que estoy." Confesó Louis sorbiendo su nariz.

Harry lo abrazó y dejó un beso en su mejilla.

"Yo también me siento realmente feliz."

"Te amo, Eddy." Dijo con la voz quebrada.

Los ojos de Harry se llenaron de lágrimas al instante de escuchar aquello. Tomó un suspiro hondo y río de felicidad.

"Yo te amo mucho más, Boo." Correspondió sonriendo.




























Ahora era el turno de México, Louis y los chicos estaban realmente emocionados por tocar en la ciudad pues tenían unas fanáticas mexicanas dignas de admirar.

Estaban en el estudio, ensayando antes del show. Liam entró con Stephan en brazos y saludó a Zayn con un beso.

"Iré a por un helado. ¿Amelia y Jaden quisieran ir?" Preguntó el de ojos cafés.

Los dos niños saltaron de sus asientos con felicidad y asintieron.

"¿Podemos?" Amelia preguntó mirando a Harry y luego a Louis.

Ambos se miraron y sonrieron, asintieron también dejando que sus hijos fueran con el tío Liam.

"Yo te acompaño, amor." Dijo Zayn dejando una guitarra en su lugar.

"No tardamos." Prometió Liam.

Louis y Harry se quedaron totalmente solos en el lugar y el silencio reinó. El rizado dudó antes de hablar.

"¿No hay nadie más aquí?"

"No, todos están en el teatro donde tocaremos."

Harry apretó sus labios, luego los lamió y Louis lo miró raro. No quiso decir nada porque le avergonzaba pero, justo aquel día se había parado a pensar en todos los días que habían pasado sin tener sexo y ya sentía la necesidad, pero habían estado con los niños todos esos días y no tenían un tiempo solos. No como ahora.

Louis rio bajito y caminó hasta él, pareció leerle la mente pues lo empezó a besar y metió sus manos bajó la camisa de botones y estampada con hojas verdes que Harry tenía puesta.

"Mírate, pareces un chico inocente, sin poder pedir que lo follen." Se burló Louis en sus labios.

Harry se quejó pero dejó que lo besara, mordió el labio inferior del castaño.

Pronto terminaron sentados en una de las sillas, medio desnudos, Harry sentado en el regazo de Louis y rodando sus caderas para crear fricción entre ellos. Louis agarró su trasero y lo masajeó.

"Hazme el amor, por favor." Pidió Harry desesperado.

Louis liberó a Harry de su ropa interior y bajó la suya hasta los tobillos. Se dieron cuenta de que no llevaban lubricante con ellos y Louis lo miró serio.

"Vamos con cuidado." Propuso Harry.

Louis asintió y lo besó de nuevo. Toqueteó durante un rato la entrada del rizado haciéndolo jadear contra su boca. Luego alineó su miembro y se hundió en él con lentitud. Harry cerró sus ojos con fuerza y clavó sus uñas cortas en los hombros de Louis.

"¿Te duele?"

"U-un poco." Logró decir Harry.

Mordía sus labios para soportar el ardor de tener a Louis entrando en su interior sin ningún tipo de ayuda. Pero no quería parar, necesitaba sentirlo, y besarlo. Se lanzó a sus labios en un intento de distraerse mientras la polla de Louis terminaba de introducirse por completo y sirvió un poco.

Al estar en su interior, ambos supiraron y esperaron a que el rizado se acostumbrara a su grandeza.

"No quiero hacerte daño." Dijo Louis buscando la mirada del rizado con preocupación.

"Estoy bien, Lou... sólo dame unos segundos." Dijo y respiró hondo.

Se sentía un poco mareado debido al dolor mezclado con el placer que le había producido aquello. Pero pronto pudo comenzar a rodar las caderas y Louis gruñó.

"Sigue moviéndote así, vamos." Pidió Louis.

Harry mordía sus labios para opacar sus gemidos. El hecho de que su miembro ya bastante erecto se frotaba con el abdomen de Louis y él suyo cuando se movía para montar al castaño, estaba llevándolo al límite. Y no sabía si podía aguantar demasiado.

"Mírame." Pidió Louis tomándolo de los rizos.

Abrió los ojos, veía un poco borroso debido a las lágrimas que ya no sabía si eran de dolor o placer. Pero pudo reconocer los hermosos celestes de su amor.

"Lou..." Gimió.

"¿Te gusta?" Harry asintió. "Ahora quédate quieto, mi amor."

Harry obedeció y dejó de moverse encima de Louis. Este lo tomó por las caderas y comenzó a moverse adentro y afuera de su interior con un ritmo bestial que hizo a Harry tirar su cabeza hacia atrás y gemir sin control.

"Oh, mierda, mierda." Se quejó el rizado apretando sus manos en los hombros del castaño.

Alcanzó el orgasmo sin darse cuenta y sin poder avisar. Su cuerpo se llenó de espasmos que lo hicieron moverse de un lado al otro estimulando la polla de Louis de sobre manera, logrando que este también alcanzara su límite y se derramara dentro del rizado, apretando sus nalgas.

Se besaron por unos minutos más y luego Louis salió de Harry con cuidado de no lastimarlo. Lo besó de nuevo cuando estaban vistiendose. Ayudó a limpiar a Harry de sus fluidos que se escurrieron por sus piernas antes de dejarlo vestirse con sus pantalones.

Diez minutos más tarde, llegaron Liam y Zayn con los niños muy sonrientes.

"Les dimos tiempo suficiente, ¿no?"

"Vaya que s-" Harry tapó la boca de Louis antes de pudiera contestar por completo.

Zayn y Liam rieron divertidos.

"Es hora de ir al teatro." Avisó Liam viendo su reloj.

"Bien, aquí vamos." Dijo Louis levantándose de su asiento.

Amelia & Jaden | Larry Stylinson. [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora