LO DESCONOCIDO - TRILOGÍA DEL UNIVERSO 1/3 [COMPLETA] ✅

Capítulo XXV: Sospecha

Durmió muy poco y despertó antes del amanecer donde había tomado una decisión. Se duchó y puso su uniforme para después despertar a su amiga

—Kristal —la mueve levemente

—¿Qué? —preguntó medio dormida

—Kristal, despierta...

—¿Qué? —se sentó frotándose los ojos

—Escúchame... Algo no me agrada de la misión y no es sólo por el general. Tengo la sensación que voy directamente a un infierno

—¿Porque lo dices? —bostezó

—Tengo ciertas dudas y sospechas. Toma —le entregó el tuvo

—¿Una muestra genética? —de sorprendió

—Es lo que fuimos a buscar

—¿Y por qué la tienes tú y no el primer general? —la tomó

—Verás... —le contó lo último sucedido

—¿Es por eso que querías hablar con el general? —Emily asintió —aún hay tiempo...

—No, no lo hay... —observó la nave por la ventana

—Pero no puedes irte así, menos con él —se preocupó

—Entrégalo al primer general y dile lo que te conté...

Sin más salió y se dirigió a la nave donde el segundo general la esperaba, comenzaron el viaje de nuevo y ella con un gran pesar.

Al llegar comenzaba a amanecer por lo que comenzaron con la búsqueda inmediatamente

—¿Lista para una gran aventura? —sonrió

No respondió, sólo lo miró con seriedad para comenzar con la búsqueda.
La misma rutina, a paso lento, eso solo la estresaba y molestaba. Casi al atardecer llegaron a una cueva donde nuevamente quedó haciendo vigilancia desde lo alto de un árbol, fue entonces que su comunicador se puso en funcionamiento.

—Emily, ¿Me escuchas? Soy el primer general —dijo del otro lado

—Lo recibo señor...

—¿Dónde está el segundo general?

—Investigando una cueva

—Kristal me contó lo sucedido. Recibe mis indicaciones con atención. Continúa con él, normal pero desde tu dispositivo selecciona un transmisor, quiero que se lo coloques, eso nos ayudará a saber qué es lo que hace. Tenga o no un plan deben regresar al planeta Beta y nos haremos cargo de él —finalizó

—Recibido... —cortó la comunicación

Inmediatamente seleccionó lo pedido y esperó a que saliera, aprovechando el vuelo de unas mariposas le tiró el transmisor sin que se diera cuenta para después bajar.

—¿Entonces?

—Nada, nos quedaremos más tiempo

—¿Le importaría que la próxima vez también investigara?

—¿Para qué?

—Para apresurar las cosas

—Solo sigue mis órdenes...

Continuaron así por dos días, no aparecieron Reptilianos pero tampoco pudo dormir, la incomodidad y las dudas no la dejaban.
¿Temía? Si, temía que le hiciera algo.
Sabía que eso no le favorecía y la debilitaba pero debía estar alerta, después de todo su sospecha era que estuviese vinculado a los Reptilianos y eso era mucho peor.