Capítulo. Segundo Nuevo Compañero

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Se levanta en la mañana, temprano para ir a clases, se da una corta ducha para relajar un poco el dolor que la atormenta, se viste, un uniforme sencillo, falda azul, blusa calcetas azules y un poleron celeste, baja a desayunar, al entrar en el comedor, nota que su padre ya no está y su madre lava el fregadero, como siempre, fingiendo que tiene una familia perfecta, Alice siente pena al mirarla, tiene marcas en el cuerpo, y sus ojos, están sin vida, como si su alma estuviera cansada de ya sufrí y a abandonado ese cuerpo maltratado.

Sale de su casa y emprende el camino a el edificio educativo en el que estudia, para ella esto es normal, la soledad, la tristeza, los dolores físicos y psicológicos, lamentablemente, esta es su realidad.

Nadie la mira al entrar al gran edificio estudiantil, ella, como ya te debes imaginar, es invisible para todos, cuando entra a su salón, percibe un alboroto a una esquina, las chicas coqueteando, los chicos riendo, todos en un círculo, definitivamente a llegado un alumno nuevo, carnada fresca, al caminar a su puesto - no está de mas decir que es el de mas atrás, a una esquina - nota un bolso rojo sangre y lleno de parches en la silla que comparte mesa, es extraño, nadie nunca se acercado a ella, intenta no prestarle importancia mientras ocupa el asiento de al lado - vale decir además, que los puestos son de una mesa y dos sillas, puesto que ya devén imaginar la situación de la chica- se centra en su cuaderno, garabateando cosas sin sentido para pasar el rato, cuando percibe movimiento a su lado, la silla se arrastra y escucha como un gran peso se desploma a los escasos céntimetros de espacio personal que ofrecía su puesto.

-Hola- siente una voz masculina, pero suave hablar ¿de verdad se dirige a ella? - oye, los chicos me an dicho que no me acerque a ti, porque según ellos eres rara, ¿pero sabes? Me pareces muy linda y me gustaría ser tu amigo- ¿estará hablado enserio? La chica se mantiene en el refugio que le da si cabello, impidiendole asi, ver al chico, seguramente es una broma pensó - ¿que me dices dulce Alice?

-¿como sabes mi nombre - y en ese entonces, al atreverse a levantar la mirada, se encuentra con esos ojos que la visitan cada noche, con ese hermoso cabello lacio negro como el carbón, se encuentra cara a cara con el, su Angel ¿estará alucinando? - ¿quien eres?

- vamos Alice - le respondió con uma sonrisa hermosa-no me digas que no me reconoces, soy yo, tu Angel.....

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Hola, esta es otra de mis historias en esta magnífica aplicación, espero les guste
¿que les parece?
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Mi Chico El AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora