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Y ambos con una jarra de cerveza en la mano, mientras que las melodías salían por las ventanas y puertas abiertas. Ambos sentados en la orilla del techo de la cantina. - ¿Crees que algún día nos curemos de esto?

-Tae, uno no se cura nunca de lo mano quebrada*, uno nace mano quebrada y se muere mano quebrada.

- ¿Qué es eso de mano quebrada?

-Mi vida, tienes mucho que aprender-levantó su jarra para hacer un saludo de brindis con Tae, este le imitó.

-Por un año más, de que no terminamos en el matadero por ser como somos.

-Por un año más- dijo. Levantaron las jarras, las chocaron, y ambos tomaron de sus jarras hasta el fondo, toda la bebida de un solo brindis.

-Este camino tiene dos finales, uno mal, y uno muy muy mal- repitieron ambos. Lo peor que esta frase tiene razón. Duele, pero es verdad.

.

-Y según la historia, este fue el mejor alcalde que este pueblo ha tenido- Dijo tae, que le estaba contando a Jungkook la historia de una estatua que había en el parque. Ya se estaba obscureciendo, mucha gente estaba llegando, siguieron caminando, se toparon con mucha gente, eran personas aficionados del nuevo alcalde que entraba en el pueblo. Ambos no querían estar ahí, no les interesaba para nada el tema de la política.

- ¿Esa es comida? - Habló Jungkook viendo como movían muchos platos a unas mesas y habían muchos platos.

-Mira que si llegamos a tener suerte comemos gratis hoy- ambos automáticamente se acercaron donde tenían la comida, la misma señora que le dijo a tae que solo con la felicidad pagaban.

- ¿O través ustedes dos? Parece que se van a quedar a cenar con nosotros- dijo ella amble mostrando una linda sonrisa. -Miren si quieren agarren comida ahorita, por que luego ese montón de gente van a arrasar, y ya te dije- miró a Tae -No tienen que pagar nada más que con su felicidad. -dijo, y les extendió un plato a cada uno, ellos podían agarran cuanto, cuando quisieran de comida

Caminaron, y habían muchas cosas -Mira tu agarras lo que puedas sin exagerar que dudo mucho que esto vuelva a suceder- Jungkook habló, empezó tomando con unas pinzas una pechuga a la plancha, ensalada, un pedazo de carne asada, también 4 panes, y camarones en una salsa. Tae tampoco se quedó atrás y también agarró lo mismo, solo que a diferencia de Jungkook él no tomó camarones. Ambos ya con su bebidas que era un fresco de frutas se sentaron en una banca un poco alejada del grupo de gente.

-¿No te gustan los camarones?

-Perdón pero me dan asco los mariscos, aparte que ni sabor tienen.

-No me la cuentes. ¿Cómo? Si son buenísimos.

-Los camarones solo los paso en seviche, pero no me gustan los demás. Y rara vez como el seviche.

-Y yo harto que estoy de ese... añadido a la lista, a Tae no le gustan los mariscos.- dicho este y comió un camarón.

Comiendo en silencio, pero las miradas que Tae le daba a jungkook disimuladamente indicaban claramente que este estaba perdido por el chico, que no tenía mucho de conocerlo, y no sabía si realmente este era así. Aunque el lo negara una y otra vez, sabía que su corazoncito ya estaba ocupado por él. Solo que no sabia como es que había caido ante este chico.

Pasaron la noche muy bonito. Comieron, bebieron, rieron y bailaron.

Bailaron, fue una experiencia única y peligrosa.

-¿No crees que es muy arriesgado?- preguntó Jungkook, la música, las risas, saltos y el tarareo de las personas reinaba en el lugar.

-Yo nací con peligro, no creo que un peligro más me haga daño- dijo Tae tomando el brazo de Jungkook. Realmente Tae nació con peligro, estuvo a nada de morir, fue un milagro estuviera acá. Jungkook con su otra mano tomó el brazo de Tae, este le miró confundido, Jungkook se soltó del agarre de Tae, ahora él estaba tomando a Tae por la mano con sus dedos entrelazados. Tae le sonrió tonto. El alcohol en las venas de ambos ya estaba haciendo efecto. Un efecto muy lindo para ambos. Un efecto que luego puede que no recuerden, una diversión momentánea.

[Play media video (escucha la canción y con el ritmo de esa imagina que bailan)]

Llegaron donde habían más personas, moviéndose al ritmo de la música, sin saber si esta podría llegar a ser la última vez que podrían bailar juntos. Ambos se sentía felices, se sentían en otro mundo. Ahí felices rodeados de más personas. Los dos bailando.

Una sensación extraña y jamás sentida, una que no tiene descripción alguna. El estar con más personas, música, una experiencia, muy extraña. Así lo describirá Tae.

Por el lado de Jungkook sería: Raro. Jungkook nunca se había sentido así. ¿Será que esta es la perosna que su madre le decía que llegaría a la vida de jungkook para hacerlo feliz? ¿Para que ambos sean felices? Tal vez, Jungkook no sabe nada del mundo exterior tanto como Tae. Nunca a gustado de nadie y no sabe como sentirse al respecto, el estar con Tae es una sensación de fuegos artificiales, que le dan ganas de nunca dejarlo y si es dejarlo es solo para ir al baño. No quiere que más nadie le aleje ese felicidad que el tiene... no sabía que cosa hacer él en un país tan ajeno a él, lo único que sabe de ese país es su idioma que le cuesta un poco. Después de eso, nada.

La canción va a un ritmo suave, que le hace tomar a Tae por sus manos y colocarlas en sus hombros, y las de él en su cintura, ambos moviéndose al ritmo de esa canción nueva para ellos. Esta no era una tocada solo por piano, violín, violonchelo, cosas convencionales, tenían perosnas que tocaban un artefacto con tambores y algo parecido al violín, mas grande y sin el arco; se podía escuchar un poco de letra, pero era indescifrable por el ruido.

Observó la cara de sorpresa de Tae, le pareció graciosa, y luego una cara un poco roja de Tae cuando el colocó sus manos en su cintura.

Lastimosamente la canción había cambiado repentinamente, ambos se asustaron y bajaron la posición en la que estaban, y ahora solo se movían alocadamente, sin saber a donde moviéndose. Haciendo combinaciones de bailes raros... realmente el alcohol con estos dos era suficiente para que hicieran muchas cosas.

La campana del reloj del ayuntamiento sonó anunciando que ya eran las 12 de la noche.

-Creo que ya debemos de irnos, no nos querremos despertar por la mañana- habló Tae tomando el brazo de Jungkook.

-Tienes razón, yo ya tengo sueño- le respondió, ambos avanzaron a la salida.

-¡Perdón! No vi por donde venía- un chico chocó con Tae, le acomodó el delgado saco que Tae estaba utilizando, Tae le respondió com un "no hay problema" para librarse del chico y seguir el camino.

Les costó un poco subir las gradas, iban literalmente cargándose de risa al ver que el otro no podía subir las gradas y lo mucho que les costaba. Finalmente hecho llegaron a la habitación. Lo primero que hicieron fue cae en la misma cama. Tal vez ya habían acordado en que cama pero en este momento no saben ni como se llaman. Que solo se lanzaron a la primera cama que vieron.

-Te quedas aquí entonces?- preguntó Jungkook a Tae, pero este solo le respondió con un murmuro que no sabía que había dicho, y los brazos de Tae le rodearon. Abrió los ojos, trató de sacarle pero le fue imposible ahora con la pierna de Tae aferrándose a él. Suspiró aceptando que ahora dormiria con un Tae versión pulpo que lo tiene sujeto a él, dándole una última mirada pudo corroborar que Tae ya estaba dormido, él ya tenía sueño. Solo cerró sus ojos y también calló en sueño. No sabe en qué momento, pero su mano descansaba sobre la de Tae. Y así durmieron.








*expresión coloquial que se utiliza para decir "gay" de una manera despectiva


Polot twist: Al final mi mamá cocinó KAJDKSKKSS. Lpm raza, ando cansada dios mió. La escuela me mata. Pero escribiendo me doy cuenta que me desconecto de este mundo y me voy a otro. [cry]

El chico del tren [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora