El ángel que cautivó a mis sombras

Cap. 22 Ana y Christian

A/N perdón por tanta ausencia, un capitulo para calmar un poco las ansias

Christian (POV)

Estamos mirándonos en silencio creo que ambos compartimos el pensamiento de si esto es real o no, pero yo se que es real, siento el calor de su cuerpo en mis dedos que la sostienen del brazo, siento su respiración y su aliento caliente en mi rostro y percibo su aroma maravilloso a vainilla y coco, dulce, embriagador, inolvidable.

-Ana? - le digo, ella parpadea

-No estoy soñando? - me pregunta y ahora confirmo que ella también soñaba conmigo.

-No - le digo y ella intenta recuperar fuerzas en su cuerpo, cuando la siento plantada en sus pies le suelto el brazo, y mis manos se sienten vacías.

-Tu eres Christian Grey? - me pregunta, asiento, - yo sabía que tu nombre era Christian, pero nunca pensé que fueras Christian Grey, no lo relacione con esa vez del ascensor. No sabia que eras el hijo de Grace y hermano de Mía.

-Yo nunca supe tu nombre hasta que soñé contigo - le digo y aunque parece descabellado esa es la realidad.

-Yo tampoco - nuestras miradas no se apartan, se siente como si al romper contacto visual, vamos a despertar de este sueño, pero ambos sabemos que no es así,  ella se acerca a mi y su mirada cambia a preocupación, su mano se alza automáticamente hacia mi rostro y sin pensarlo me acaricia, yo cierro los ojos ante su suave toque. - estas bien? - me pregunta consternada - anoche, la oscuridad...

Abro mis ojos de golpe, ella recuerda, ella me recuerda

-No, no estoy bien - y se acerca un poco más a mi, y me mira directo a los ojos 

-Lo sé, pero yo no le temo a la oscuridad - me dice tan segura de si misma y con tanta calma que no me puedo resistir, la tomo en mis brazos y le doy un fuerte abrazo, ella me corresponde hundiendo su rostro en mi pecho y cerrando sus brazos en mi espalda, si realmente este es un sueño, no quiero despertar nunca.

Ana (POV)

El llanto se desata sin que pueda detenerlo, es todo en uno, es felicidad, es preocupación, es sorpresa, es alivio, son un conjunto de emociones, solo sé, en lo más profundo de mi ser, que todo lo que viví en mis sueños, él lo sintió también, estábamos juntos en algún lugar. Nos conocemos, nos conectamos, nos necesitamos.

Cuando logro calmarme un poco, separo mi rostro de su pecho y lo  vuelvo a mirar y aunque estoy firmemente agarrada a su espalda no puedo evitar las palabras que salen de mi boca.

-Eres real verdad? - y una sonrisa se dibuja en sus labios

-Déjame mostrártelo - me dice y me da un suave y dulce beso en los labios, y siento una corriente eléctrica que recorre mi cuerpo, empezó en mis labios y se alojó en mi estomago, ya que siento mil mariposas revoloteando,  y también tengo una sensación de calor en el pecho que no puedo explicar, mi corazón esta desbocado, tengo ganas de volver a llorar, pero se que es la emoción, cambio de posición mis manos y las alojo en su cuello, él me acerca más a su cuerpo y su cercanía enciende sensaciones que jamás tuve, cosquilleos en partes inexploradas, un fuego que baja desde mi pecho y termina alojándose abajo, en un lugar que nunca despertó. Empezamos a profundizar el beso, pero un ruido que escuchamos nos separa automáticamente, pero no nos alejamos, seguimos ahí, codo a codo, es como si necesitáramos la reafirmación de que esto no es un sueño.

-Christian - le dice Mía y viene y le da un pequeño abrazo - mamá me dijo que ibas a venir, me explico que iban a hacer una declaración a la prensa.

-Sí, mi gente dice que es lo mejor, salir al paso y aclarar las cosas.

-Me parece bien - se gira hacia mí - Ana - y parece que ahí se percata - perdón, no te presente. Ana, él es Christian Grey mi hermano, Christian ella es Anastasia Steel, la fisiatra neurológica con quien trabajo.