Un viaje en carretera que termina en una mudanza repentina.
Un pueblo con extrañas personas: "Es mejor no venir nunca acá", "no metas tus narices en dónde no te incumbe", "si tus vecinos hablan bien frente tuyo, hablan mal a tus espaldas".
Un diari...
He narrado mucho, es momento de que lo haga la protagonista: páginas del diario secreto de Rebecca Blanc. Tengo los sentimientos en la punta de la boca, sólo léanlo y disfruten. por el amor a Timothée Chalamet.
"Querido diario:
Estoy exhausta. Pareciera que una manada de cuervos voló sobre mí y me sacudieron hasta mis interiores más profundos. Pasaron muchas cosas, esas que apenas piensas y tu cabeza comienza a dar vueltas y vueltas.
¿Por dónde comienzo, mi querido diario?
Primero, tuve la mala suerte de pescar una fiebre en menos de dos días.
Probablemente, las caminatas bajo la lluvia se cancelarán durante unas cuantas semanas. Fue horrible, tenía ganas de sacarme la cabeza y reemplazarla con otra, mi cuerpo parecía recién salido de un baño dentro de un plato lleno de sopa caliente y mis mareos sólo fueron la cereza del pastel. Fueron emociones tan random que daban cringe mis expresiones y comportamiento.
¿Viste eso, diario? comencé a buscar en Internet "abreviaciones y palabras que usan los jóvenes".
No es ningún secreto de que mi forma de hablar trajo muchas burlas por parte de algunas personas *cof, cof, Max, cof, cof*. Entonces, he decidido que para una mejor adaptación en mi entorno, es necesario buscar temas de conversación generales o, al menos, expresarme como lo haría un adolescente de esta época y "tener cultura". Pero si soy honesta, esta pequeña gripe me ha impulsado a hacerlo.
Una corta pero buena explicación:
Cuando me engripé, no estaba en el mejor ambiente que digamos. Me encontraba caminando de forma rápida y bajo la lluvia detrás de un chico alto y de hombros tensos llamado Maximiliano. Este chico, en uno de esos momentos, se acordó de que no iba sólo, y cuando fue a chequear mi estado, ya me encontró volando en fiebre y apenas respirando. Todo esto pasó por la pequeña aventura que tuve, en donde hasta me amenazaron.
En fin, Max me llevó hasta su casa y me mantuvo calentita hasta que llegara mi mamá. Como no desaprovecho ninguna oportunidad, traté de conocerlo mejor e intenté hablar con él. Las conversaciones fueron débiles, algunas un poco profundas pero no rescaté ningún dato "extraordinario" sobre el joven. No mencionó su película o comida favorita y menos lo de su actividad de medio tiempo — que es el baile.
Tal vez lo haya soltado en alguna parte de nuestro diálogo, pero hubo momentos en los que no estaba concentrada.
Mi concepto acerca de Max ha cambiado un poco, siento que es un chico que es muy cerrado, pero una vez que están solos y tocas su fina línea que separa la simpatía de lo sarcástico, puedes llegar a escuchar la risa más hermosa del planeta.
