DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON La Acosadora Sexual (Doctor-X/Doctor-Y)

Corriéndome dentro tuyo

Kaji terminó de trabajar muy tarde aquel día, su desmayo había retrasado mucho su agenda. Durante todo ese tiempo había tratado de evitar cruzarse con Michiko y evitado hablar sobre su relación con ella con sus compañeros de trabajo. Cuando por fin terminó su jornada, se fue a su departamento a descansar.

Grande fue su sorpresa cuando entró y encontró allí a Michiko, con la cena puesta.

"¡¿Pero qué mierda estás haciendo aquí, loca?". Se paró en seco en la entrada de la puerta, furioso y asustado. "¡Vete de aquí antes de que llame a la policía!".

Michiko le sonrió burlona, poniéndose de pie al lado de la mesa, acercándose a él lentamente con una mirada despiadada.

"¿Cómo puedes ser tan cruel con tu novia, amor? ¿Te preparé la cena y todo lo que recibo son amenazas? ¡Qué mal prometido eres!".

"¡Tu prometido un carajo, vete de aquí antes de que pierda la cabeza y te mate, loca de mierda!". Retrocedió hacia la puerta, temblando de terror y furia, dispuesto a huir de allí. Se dio media vuelta para desactivar el seguro de la puerta pero Michiko se le fue encima en un segundo y lo agarró fuertemente del cabello haciéndolo gritar de dolor, lanzándolo de espaldas fuertemente contra el suelo, subiéndosele encima mientras él intentaba levantarse, manoteándola desesperadamente.

"¡No me toques, maldita hija de puta! ¡Suéltame ya!".

"¡Ya quédate quieto de una vez!". Gritó Michiko, tratando de agarrarlo por las muñecas hasta que recibió un fuerte cachetazo de él, dejándola sorprendida. Kaji también se quedó sorprendió e inmóvil, realmente no sabía si la había golpeado adrede o sin querer.

Con horror, vio cómo la expresión de Michiko comenzó a cambiar, oscureciéndose, dándole un aspecto muy sádico y siniestro.

"¿Así que te gusta jugar rudo, no? ¿Te gusta golpear a las mujeres, verdad? Lo sabía, eres de esos...".

"No...". Kaji negó lentamente con la cabeza, aterrado. De pronto, recibió un bofetón tan fuerte que lo hizo gritar de dolor, a ese golpe le llegó otro y otro más hasta que ella lo tomó del cabello con ambas manos a los costados y golpeó varias veces su cabeza contra el piso hasta que lo dejó completamente aturdido, con la boca y la nariz sangrando por las fuertes cachetadas y con las manos sueltas a cada lado se su cabeza, tosiendo con esfuerzo.

"Mira lo que me hiciste hacer, cariño, yo no quería golpearte pero no me dejaste otra alternativa... ¡Y yo solo quería que tengamos una simple cena romántica para celebrar nuestro compromiso!".

Kaji la hubiera mandado a la mierda, pero ni siquiera podía hablar de lo adolorido y confundido que estaba, el dolor de cabeza era terrible, nunca en su vida había sido golpeado de esa manera y no estaba acostumbrado a ese tipo de trato. Era sorprendente lo débil que se sentía y lo difícil que le resultaba respirar y ordenar sus pensamientos.

"Bueno, entonces tendremos que celebrarlo de otra manera, ¿no?". Comenzó a desabrocharle el cinturón y el pantalón, mirándolo a la cara muy excitada, disfrutando el momento, gozando con someterlo.

Kaji nada podía hacer para evitarlo, sintió cuando ella lo desnudó de la cintura para abajo, sintió el frío del piso bajo su trasero, pero no pudo moverse para escapar, su cuerpo apenas le respondía, sólo sentía un intenso dolor en el rostro y un horrible dolor en la parte de atrás de la cabeza que comenzaba a extenderse por todo el resto de la cabeza.

Notando que él apenas estaba consciente, Michiko se puso de pie, tiró los pantalones y la ropa interior hacia un costado, se desnudó y fue a ponerse un strapon nuevo. Estaba muy satisfecha con su nueva compra. Tomó el dildo con una mano y miró a Kaji, aún sobre el suelo, completamente indefenso, semidesnudo, apenas intentando moverse, y eso la excitó muchísimo, entonces se acercó a él lentamente, friccionado el dildo con una mano, estimulándose sexualmente, sonriendo sádicamente.