Fusionados

capitulo 25

Cap. 25

Desperté al medio día y solo porque me rugían mis tripitas.

Volteé a ver al poste acostado a mi lado, aún no había despertado. Me levanté y me fui a dar un baño, sentía que apestaba regacho. Al salir me vestí con ropa de Vene otra vez. Salí del baño y llamé al servicio del hotel para pedir algo de comer.

Regresé a la habitación, Rusia ya no estaba en la cama, fruncí el ceño por la confusión, pero escuché como la regadera se habría y entendí que se estaba bañando. Salí de la habitación y entré a la de al lado, donde se estaban quedando Arge y Perú, aunque estoy segura de que cambiaron de compañeros.

-hola, naricita.

-calla boluda, que te acomodo una piña- dijo mientras se acomodaba en la cama.

- ¿estás crudo? - dije sarcástica, ganándome un almohadazo- voy a agarrar ropa tuya para prestársela a Rus, no voy a nuestra habitación porque ha de estar llena de zombis.

-has lo que quieras, pero ya tómatelas.

Agarré la ropa y salí del cuarto, entre a la de col, fui a la habitación y me encontré con un ruso en toalla.

-tanta carne y yo en cuaresma- dije, me miró curioso.

- ¿qué?

-que tú eres de sonora ¿no?

-no.

-tons ¿por qué tan Hermosillo? - soltó una risa y se acercó a mí.

-no tengo que ponerme.

-si quieres te traigo tu envoltura, bombón- su cara era de desconcierto puro- ten, te traje esta ropa, es de Arge.

-creo que voy a tener que pagársela, ya es la segunda vez que me presta.

Le iba a contestar, pero tocaron a la puerta.

-no es necesario, ya estamos acostumbrados a pedirnos cosas entre nosotros y nunca devolverlas- dije caminando a la puerta abrí y era nuestro desayuno- gracias, señorita.

Cerré y regresé a la habitación, donde mi farola ya se estaba poniendo la camisa.

-ya llegó la comida.

Desayunamos entre platicas y bromas. Después nos pusimos una película, cuando ya iba por la mitad me llegó un mensaje de Vene, en el que me decía que nuestra habitación ya estaba limpia y ordenada, que ya podíamos regresar.

Limpiamos lo que habíamos ensuciado y nos fuimos. El resto del día la pasamos en la habitación, viendo películas, hablando y comiendo como puercos en engorda.

Cuando dieron las 7 de la noche Rusia me dijo que si quería ir a comer afuera, le dije que sí.

Fuimos a un restaurante que está cerca de donde nos estamos quedando. Todo estaba normal hasta que un par de jóvenes se nos acercaron.

-buenas noches- dijo la chica más alta- ¿es cierto que son pareja?

-sí- dijo rus tratando de disimular su cara de culo, aunque no le salió muy bien.

- ¿es por conveniencia o por amor? - preguntó la otra niña.

-por amor- dije sonriéndoles- este wey me enamoro bien cabron, dicen que se me nota un chingo.

Ambas soltaron una risa.

-sí, se les nota mucho a ambos.

Las chicas nos pidieron una foto y se fueron, nosotros continuamos comiendo tranquilamente. 2 horas después ya estábamos de regreso en el hotel. Nos alistamos para dormir y nos acostamos en la cama.