IRISA POVS:
-Pensé que tu vestido sería dorado -Dijo Neymar entre dientes -Me has hecho ir a comprar una corbata dorada y tu maldito vestido es rojo con plata, me debes 10 euros.
Abrí los ojos y dije - ¿10 malditos euros por una corbata? Mi vestido es rojo con color dorado.
-Es plata.
-Dorado y se acabó, vamos o llegaremos tarde ¿Si? -Neymar asintió y me abrazo fuertemente.
El camino al restaurante fue corto pero silencioso.
Estaba en perfecto desacuerdo con la vida casi siempre, pero hoy, hoy era diferente.
-Irisa, baja del auto -Dijo Neymar estirando su mano. Era un lépero, maleducado pero al mismo tiempo era un caballero.
-Que forma de pedirlo -Dije burlona. Caminamos hacia la entrada y me gire para arreglar la corbata de Neymar -Al entrar todo cambiará.
Entramos al restaurante, estaba lleno de futbolistas del Borussia y sus parejas. Aunque no sólo ellos, también estaban los futbolistas del Bayern Múnich, claro ¿como no? Si casi toda la banca del Múnich eran ex futbolistas del Borussia. Neymar se acercó a Bastián y me hizo una seña de que enseguida venía.
Visualicé a Ann y Mario sentados, me acerqué a ellos y los abracé al mismo tiempo.
Al igual que a Lewandowski que por cierto iba sólo ¿En dónde estaba su dulce mujer?
-Irisa -Dijo una voz a mis espaldas. Era Ciro - ¿Podemos hablar en privado? - Todos los de la sala hicieron una bulla.
-Seguro, amor -Dije sonriendo -¿Han visto a Marco Reus? -Le susurré a la mesa en la que Lewandowski estaba sentado. Todos negaron. Me gire y camine hacia Ciro.
-Tengo que decirte algo, vamos al baño -Arqueé la ceja con desacuerdo ¿Baño? Lo seguí hasta los baños.
-Muy bien, habla.
-Irisa, perdóname por lo que te voy a decir.
MARCO POVS:
-Bajá más rápido del maldito auto, que la mierda -Le susurré a Erik.
Caminé hacia el restaurante con Erin a mis espaldas.
-No debiste de haber tomado en casa -Me regañó Erin.
Me giré y le sonreí hipócritamente ¿Quien creía que era?
Reconocí a Neymar sentado al lado de Bastián - ¿Tú qué haces aquí? -Pregunté malhumorado.
-Irisa me ha pedido que venga, ¿Tienes algún problema? -Preguntó levantándose.
-Si, tengo millones de ellos y 2 millones de ellos se deben a ti, pero eres el menor de ellos, ¿En dónde está ella?
-En el baño -Gritó Lewandowski.
-En el baño con Ciro -Siguió Robben.
¿Por qué mierda había tantos patanes del Múnich?
-Quédate con ese de allá -Dije señalando a uno del Múnich. Erin asintió y caminó hacia el chico.
Caminé hacia el baño y puse mi oreja en la puerta.
-¿Entonces matrimonio? -Preguntó Irisa emocionada.
-Exacto ¿Qué dices?
-Claro que sí, Ciro, me harías la mujer más feliz.
Maldita Irisa.
Sentí como quitaban el seguro de la puerta y corrí rápidamente hacia el bar.
