13: Depresion

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IRISA POVS:
Camine por la calle acompañada de Ciro, Melena y Mats. La prometida de Ciro estaba emocionada porque recogeríamos su vestido a sólo un día de la boda.

Mientras tanto yo miraba el reloj como loca, esperaba a mi Padre y a Marco, ¿Por qué tardaban tanto?

-Es precioso, lo juro -Chilló Melena emocionada.

Me preguntaba como estaba Mila, ayer le había dejado bastantes mensajes alentadores.

-Te ves hermosa hoy, deberías probarte un vestido de novia -Susurró Mats.

Que incómodo momento.

Continuamos caminando hasta dar con la tienda. Era enorme, llena de esos preciosos vestidos.

-Irisa, ¿Segura de que le diste a tu padre la dirección correcta? -Preguntó Ciro.

-Segura -Respondí cabizbaja.

Melena entró a los probadores jalando de mi brazo para que yo entrara con ella.

-¿Busca algo en específico, señorita? -Preguntó la asistente. Negué con la cabeza brindándole una sonrisa.

-Dale uno de encaje, pegado -Dijo Melena. Quería matarla en ese instante pero preferí callar.

La asistente me guió hasta un gran cuarto. Se nota que tenían mucho cuidado e higiene con los vestidos.

Comencé a probarme el vestido, que lindo era.

-Sal, Irisa -Me llamó Melena -Salgamos juntas.

-Me veo ridícula -Grité chillando.

Melena abrió la puerta de la habitación mirándome impactada.

-Los chicos tienen que verte -Me empujó hasta el final de la puerta haciéndome caminar hacia el salón.

-Oh Dios -Dijo Mats, a su lado estaba mi padre.

-¿Marco llegó? -Pregunté ignorando el comentario de Mats.

-Claro que lo hizo -Escuche la voz de alguien que esperaba no volver a ver nunca más, Erin -Marco, ven -Gritó. El Rubio entró rápidamente a la habitación, voltee a ver a Erin y note que traía un vestido de novia. Mi corazón se había roto, se casarían.

-Estaba comentándole a tu Papá lo de la demanda -Interrumpió Mats -Ven, sentémonos y hablemos.

-Entonces, ¿Es una demanda por abuso doméstico? -Mats asintió. El barbón saco su celular y me indico que sonriera, una foto.

-Ella dice que yo la golpee, pero es mentira.

-¿Tiene pruebas? -Preguntó mi padre anonadado.

Mats negó.

-Le juro por el amor que le tengo a su hija que no.

-Oigan amigos de Marco -Gritó la idiota de Erin, la odiaba -Marco y yo nos casaremos, mañana.

Todos hicimos un gesto de desaprobación. Me levanté de ahí y comencé a caminar hacia el probador, estúpido Marco Reus.

-Ese día me caso yo -Sentenció Ciro.

Entré al cuarto y me miré al espejo, ridícula.

-Toc Toc -Dijo Marco desde la puerta -Te amo -Murmuró acercándose a mi -Te juro que quiero vivir mi vida entera a tu lado, pero es imposible, no puedo -Sus labios recorrieron mi mejilla, olía tan bien -Se mi amante.

Que incrédulo -No, no seré tu amante -Respondí ofendida -Pensé que me amabas, pensé que querías una vida conmigo.

-¡Y la quiero! -Me gritó molesto -¡Te amo! Pero entiéndeme ... No puedo.

Marco Reus: ContigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora