original aqui : http://www.amor-yaoi.com/viewstory.php?sid=170721
Sin querer ni siquiera soñarlo la vida de Furihata queda atada a la de Akashi, quien es un cambiaformas del clan de los leones.
Y todo comienza por una torpeza del castaño con lo cua...
Kagami simplemente volvía a recordar ese suceso, después de tantos meses ninguna pista siquiera de su paradero ¿Cómo podía ser posible? Incluso recurrió a Akashi quien apenas pudo dejar de lado su ferocidad, mando a hacer una investigación, pero no logro encontrar a esa persona a pesar de todos los esfuerzos para intentar encontrarlo. Si al menos supiese una pista, ni él ni Mayuzumi fueron encontrados ¿Estaban muertos? ¿Habrían huido juntos? El tigre no dejaba de hacerse mil preguntas en su cabeza.
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Ese día en que lo iban a hacer, se habían asegurado de que no hubiese nadie en casa en ese momento que los interrumpiese y de que llegaran más o menos tarde, tanto el tigre como el chico que se hacía transparente empezaron a besarse con fogosidad, con pasión, una pasión contenida desde hace mucho. El tigre besaba el cuerpo ajeno con desesperación, con anhelo de poseerlo completamente mientras lo desnudaba. Hasta que de pronto sintió que fue empujado por una fuerza invisible hasta una pared. Kuroko parpadeo sin comprender en un primer momento que había sucedido, pero luego trato de alejar a esa persona invisible, sin embargo, fue dejado sin consciencia de un golpe y a pesar de que Kagami había luchado y tratado de golpear a esa fuerza esta logro dejarlo inconsciente también y no solo eso, cuando despertó Kuroko había desaparecido.
Desesperado se empezó a vestir y corrió buscando a donde podría estar su Omega, pero ni siquiera sabía dónde vivía el sospechoso principal de todo ello: Mayuzumi. El tigre trato de todos los medios de averiguar y cuando llego con su pareja preguntando que había pasado en el tiempo que estuvieron ausentes (Mientras pensaban presentar a los bebés a sus amigos) Kagami casi le rogó por ayuda, el león preocupado lo hizo puesto que Kuroko era amigo de él y obviamente Kōki, sin embargo, en la casa de Mayuzumi no había nadie. En la casa que había sido la de Furihata y que Mayuzumi había entrado sin permiso a veces tampoco. Buscaron a través y fuera del país, pero absolutamente nada había, ningún resultado, todo en vano, no había ni huellas. Incluso había gente que vigilaba la casa del chico de cabello gris todos los días, pero no había cambios.
Kagami simplemente estaba derrumbado, no podía ser que algo así pasara delante de ellos, sin poder defender siquiera a su Omega. ¿¡Como rayos no previno un ataque así!? ¿Y porque en tanto tiempo aún no se sabía nada? Cada día despertaba con pesadillas y sueños donde Kuroko desaparecía o era asesinado de manera no muy sutil. Casi no dormía y desarrollaba ojeras, algún día lo encontraría, tenía que.
Himuro fue un poco duro con el tigre diciéndole que es muy posible que Kuroko hubiese decidido huir con el otro chico fantasma, aunque por decir eso Kagami y este casi se golpean sin descanso. Kiyoshi intervino, pero también en cierto momento fue golpeado y al final fue el oso quien termino separando al trio para que dejasen de discutir y pelear.
Akashi fue mucho más frío al decir de pronto que era bastante probable que incluso estuviesen muertos, por el tiempo que había trascurrido y que ni siquiera hubiera algún dato lo suficiente concreto de huellas o algo. Kōki y el casi empiezan a discutir fieramente por esa deducción. Lamentablemente poco se sabía de los cambiaformas fantasma, casi toda la información estaba escrita ya en una lengua muerta, imposible de descifrar.
Y los padres de Kuroko se oponían a hablar de ello como si las características de los hombres fantasma fueran algo que debía mantenerse solo entre la gente de su especie.
¿Dónde estaría Kuroko decían todos? ¿Qué fue lo que ocurrió? ¿Aparecería algún día?
