Lazos Involuntarios (Re Editando)

008.-Preguntas.

//Lamento la tardanza :c 
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Los ojos de Akashi Seijūrō como Bokushi brillaban intensos, afilados. Si su padre había tocado un solo cabello de su preciado chihuahua lo cortaría en montones de pedazos.

— ¿Dónde está mi prometido, Masaomi?— Le dedico una mirada completamente fría con la cual podría partirle en dos si pudiera.

El hombre mayor hizo un gesto de molestia juntando las manos en una pose de seriedad.

— ¿Por qué te interesa tanto ese simple intento de perro Seijūrō? —Había una curiosidad sincera en aquellos ojos del mayor, necesitaba los motivos de su hijo sobre todo de su otra personalidad , unos buenos motivos.

—Estoy enamorado de él. Además es mi destinado, no dejaré que le hagas daño.

Masaomi Akashi miraba atentamente a su hijo, se parecía tanto a su ex esposa Shiori en su manera de actuar tan decidido, también su doble personalidad y sobre todo aquella cabellera pelirroja como la sangre.

— ¿Destinado? Seijūrō, sabes bien que cuando una pareja es la destinada de la otra, ambos sienten una atracción tan fuerte que es casi imposible que no se unan en el primer encuentro. —Se acomodó en su silla sin dejar de ver a su hijo. —Es imposible que sea tu destinado.

—Hay una buena razón por la cual no nos hemos unido. De todos modos no vengo a explicarte nada, quiero que me des a Kōki ahora mismo. Su olor está aquí, sé que lo tienes en alguna parte.

La puerta de atrás se abre y aparece Kōki como si nada sorprendiendo a Seijūrō y en parte aliviado de verle.

—Lo siento, cuando me pongo ansioso me dan ganas de ir al baño. Lo siento Kuroko-kun.

Kuroko se hizo visible mostrando que tenía amenazado a Masaomi con un arma.

—Vamos, es cierto que este —Indicando a Kuroko con un gesto—Derroto a mis soldados cuando creí tener la situación en mis manos volviéndose invisible cuando te tenía en mis manos chihuahua, pero ¿Realmente creen que ustedes dos podían vencerme?—Hablo con total arrogancia mirando al chico fantasma y a Kōki con arrogancia. — Es porque Seijūrō venia que me quede quieto. Ustedes dos son un par de insectos comparados con un león.

— ¿Sei...?—Mira a donde estaba su prometido y sonríe aliviado al verle. Bokushi también le sonríe a su vez de la misma manera.

Kuroko se alejó del padre de Akashi cuando vio que Furihata y su prometido se acercaban el uno al otro.

—Seijūrō, teniendo a tantos pretendientes que son tan hábiles como tú, tan millonarios y agradables ¿Te quedas con la rata ladradora y pobre?

Bokushi abrazó a Furihata mientras contestaba a su padre que se mantenía atónito y furibundo ante la situación tratando de planear como separarlos. Le parecía inconcebible que la otra mitad de su hijo quien siempre fue la más fría y racional también parecía estar colado por los huesos de un simple chihuahua.

—Antes de Kōki, creía que ningún hombre estaba a mi altura. No importaba su posición económica, todos eran falsos. Mi prometido esta hecho de honor y encima de ello me ha vencido dos veces. —Besó la mano de Furi quien se sobresaltó, pues aún este no podía acostumbrarse— Vencer a un Akashi dos veces es suficiente para pasar mi vida junto a él.

— ¡Pero si ese chihuahua no te merece! ¡Cualquier Alfa u Omega se hubiese enlazado sin pensarlo contigo en el primer encuentro! ¡Se atreve a despreciar tu unión contigo! Eres demasiado para él, como un jugoso filete de primera calidad para un pobre perro callejero que siempre ha comido basura.