Louis respiró hondo y, tras una pausa tensa, se dio vuelta para encarar a Harry, quien lo miraba confundido. Los pensamientos se arremolinaban en su mente, cada palabra no dicha cobrando vida propia. Harry, sin comprender la gravedad de la situación, dio un paso hacia él, pero Louis alzó una mano, cortándolo de inmediato.
"¡¿Quieres explicarme qué es esto?!" preguntó, su voz cargada de una furia contenida, señalando el teléfono de Harry en la cama. Su mirada era fría, fija en él, como si intentara descifrar lo que había hecho.
Harry, al ver su teléfono y la expresión en el rostro de Louis, palideció. En ese instante comprendió que el muro que había levantado para ocultar su doble vida se había derrumbado, y las palabras de Louis ardían como fuego en sus oídos.
"Louis... yo... puedo explicarlo," intentó decir, su voz vacilante, buscando alguna excusa que pudiera calmar la situación.
Pero Louis no estaba dispuesto a escuchar. "¡¿Explicarlo?! ¡¿Qué vas a explicar, Harry?! ¡Las veces que te ibas y no regresabas hasta el amanecer! ¡Las mentiras de las cenas de trabajo!" Su tono aumentaba, su voz entrecortada por el dolor y la rabia acumulada. "¿O quizás quieras explicarme por qué alguien más ocupa mi lugar?"
Harry intentó acercarse, pero Louis retrocedió, el dolor reflejado en sus ojos. Cada paso que Harry daba hacia él era una puñalada en su corazón.
"¡No sé en qué momento empezaste a ver a esa... esa persona, pero no quiero oír más mentiras!" dijo Louis, apretando los puños para controlar su ira. "¡Tú, Harry... eras la persona en la que más confiaba! ¡Creí en cada palabra, cada promesa! ¡¿Y me traicionas de esta forma?!"
Harry finalmente habló, desesperado. "Louis, escúchame, no fue mi intención herirte. Esto... se salió de control, pero tú siempre fuiste el amor de mi vida." Sus palabras sonaban huecas, como si ya no tuvieran el poder de sanar lo roto.
Louis lo miró con una mezcla de tristeza y decepción. "No es amor cuando se traiciona, Harry. Si realmente me amabas, esto no hubiera pasado." Guardó silencio, y en un tono bajo y resuelto, añadió: "Quiero que te vayas esta noche. ¡Ya no puedo soportar verte aquí!"
Harry abrió la boca para replicar, pero nada salió. Sabía que cualquier palabra sería inútil. Con la cabeza gacha y los hombros caídos, dio un último vistazo a Louis antes de salir de la habitación, su figura desapareciendo lentamente, como un fantasma que se desvanecía en la penumbra.
Louis se quedó solo en la habitación, el silencio cayendo sobre él como una losa. Sus ojos, aún llenos de lágrimas y furia, recorrieron la habitación hasta detenerse en una foto sobre la mesa de noche: era la imagen de su boda con Harry. Una sonrisa rota se dibujó en su rostro al recordar aquel día, cuando había creído que nunca habría lugar para el dolor en su historia.
Se acercó, tomando la foto entre sus manos temblorosas. "¿Por qué, Harry? ¿Por qué arruinarlo todo así?" susurró, sintiendo cómo el amor que alguna vez había sentido por él comenzaba a mezclarse con un odio profundo, uno que él mismo no podía comprender. Apretó la foto, sus nudillos blancos por la fuerza con que la sostenía.
Sin poder contenerse más, lanzó la foto contra el suelo con toda la rabia acumulada. El cristal se rompió en pedazos, esparciendo fragmentos que parecían reflejar su propio corazón destrozado. La habitación se llenó del sonido del vidrio quebrándose, y Louis se dejó caer al suelo, su respiración pesada mientras observaba la imagen rota a sus pies.
Todo lo que él y Harry habían construido, cada promesa y sueño compartido, ahora no era más que una mentira. Acarició un trozo de vidrio, y su reflejo le devolvió una imagen que apenas reconocía: un hombre devastado, con los ojos vacíos y el alma hecha trizas.
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¿Adonde Van Los Corazónes Rotos, Harry? (Editando)
FanficLouis Tomlinson, un omega de ojos azules tan profundos como el océano y de belleza inigualable, ha dedicado su vida a ser un devoto esposo y madre desde su matrimonio con Harry, su alfa. Juntos han formado una familia con dos hijos, Andrew y Athenea...