Humano

Revelaciones

Los tacones de Lena Luthor resonaban por toda la sala principal de la mansión Wayne, Lena recordaba muy bien el lugar, los pisos cuidadosamente pulidos mostraban su reflejo muy claro, el joven que vigilaba la entrada no pudo evitar que Lena entrara al lugar cuando esta se presentó exigiendo ver al señor Wayne.
-Joven Lena, ¿qué la trae de visita? - Alfred llevaba el desayuno a Bruce.
-Necesito hablar con Bruce, Alfred, ¿se encuentra?
-Sí, un tanto indispuesto a esta hora del día y tal vez no debería...
Lena se dirigió directamente a la habitación de Bruce, conocía perfectamente la mansión, pues en varias ocasiones sus padres asistieron a fiestas que los Wayne organizaban para beneficio de obras de caridad, mismas obras que Bruce siguió cuando se convirtió en adulto.
-Sigues igual, no dejas de pedir el desayuno a la cama, ¿no Bruce? - comentó a modo de saludo, una visiblemente enojada Luthor cuando ingresó sin tocar en la habitación de Wayne.
-Y tú sigues sin tocar la puerta cuando estás enojada.
-No tienes nada nuevo, nada que no haya visto antes, tal vez unas cicatrices de más por jugar a ser un vigilante nocturno.
Cansado de la situación, un Batman sin traje miró a Lena, se encontraba en chandal con el torso desnudo y el cuerpo con las cicatrices que Luthor había mencionado anteriormente.
-¿Qué es lo que quieres?
-Lo sabes.
-Supe lo de Kara y también que sacaste a Frío de Arkham.
-Sabías quién era SuperGirl, no me sorprende, siempre has sido igual de ruin y mentiroso que ella.
-Estas dolida, Lena y por el cariño que nos teníamos, no pienso responder a tus ataques de furia. Todo mundo sabe que la amas.
-Amaba.
-Sí así fuera no estarías aquí, lo que me hace pensar... ¿Cuál es el motivo exacto de que me visites?
-Cuando Clark... - titubeó un poco al pensar en sus siguientes palabras - cuando Clark perdió el juicio por lo de Lois...
-Por Dios, no me hables de eso.
-Cuando pasó, tú sintetizaste un suero algo que lo privó de sus poderes.
-¡Y POR ESO MI MEJOR AMIGO ESTA MUERTO! ¿No lo entiendes? No quiero saber mas de eso, Clark y Lois están muertos y todo es mi culpa, si hubiese acabado con el Joker cuando pude, nada de esto habría pasado, Clark, Lois y el bebé estarían vivos, Kara estaría bien y tú estarías con ella. Pero ese maldito mal nacido, encontró la manera de rompernos a todos, de acabarnos.
El dolor en las palabras de Bruce eran palpables, en verdad estaba arrepentido de que las cosas pasarán de la manera en que lo hacían, tenía los puños crispados y los nudillos blancos.
-Mi mejor amigo se fue, Lena; la mujer que amas esta agonizando y no puedo hacer nada.
-Sí puedes, tienes que, sintetizaste la kriptonita azul para que se mezcle con el gen de los El, puedes revertirlo, yo sé que sí - Bruce parecía no escuchar la súplica de Lena.
-Kara estará bien, si su cuerpo logra resistir el cambio genético; supongo que Frío ayudará con eso, no te preocupes, resistirá al igual que Clark lo hizo y te tiene a ti, así que no hará nada que la dañe, como Clark no pudo hacerlo.

Tras la muerte del Joker a manos de Clark, este impuso un orden mundial que parecía inacabable, por lo que Bruce con toda la tecnología de su lado y con ayuda de Lex Luthor, logró sintetizar dos rocas de kriptonita, una azul para hacer humano a un kriptoniano, la misma que ahora estaba acabando con la vida de Kara, y la X, que lo volvió metahumano a él, por lo que pudo vencer a Clark convertido ahora en un hombre común. Un ya cansado y derrotado Superman, después de los sucesos de la pérdida de su esposa e hijo y la caída de su orden mundial, terminó por quitarse la vida. Y tras este hecho se reveló que el Joker, antes de ser asesinado, logró hurtar las inversiones de Lex y buscó la manera de clonarse a él mismo cientos de veces para seguir la interminable batalla como un juego enfermo contra Batman, dejando a este moralmente derrotado. Cazando y matando a los demás jokers, Arthur Fleck probó que Bruce Wayne era un vengador más y no un justiciero.
-Ahora, si me permites, debo acabar con el desgraciado que mandó a Kara a la UCI.
    
                           ***
Lena se resguardaba en su auto que estaba estacionado a las afueras de la DEO, había sido una mañana difícil después de visitar a Bruce, nunca lo había visto tan cansado, tan desesperanzado. Recordó todas aquellas veces que sus padres se reunían con los padres de Bruce, mientras ellos jugaban en el laberinto hecho en el jardín de la mansión Wayne. A veces deseaba volver a aquellos días, que el tiempo no hubiese transcurrido.
El teléfono celular de Lena sonó, Alex llamaba. "Alex... Debo arreglar las cosas con Alexandra" pensó.
-¿Qué sucede?
-Kara despertó. Debes estar aquí, esta preguntando por ti.
-Estaré allí en un momento. Alexandra, respecto a lo de anoche... Yo.
-No. No tenemos porqué hablar de ello, ni mencionarlo nunca más. Mi hermanita te necesita y te ama, a pesar de todo lo que pasó, lo que nos pasó, sólo te pido que le brindes una oportunidad, al menos de explicarte los motivos que tuvo para ocultarte la verdad.