Venganza

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-¿Qué se supone que estás haciendo? - preguntó J'onn al ver que Alex ajustaba un arma a su pierna sana.
-Te acompañaré - contestó de manera decidida.
-Tu pierna aun esta herida, hubiera preferido que te quedaras con Lena todo el día.
-No podía hacerlo, aun debemos acabar con el Joker - dijo haciendo caso omiso - además, el bioesqueleto que diseñó Lena hace que mi pierna no tenga que realizar ningún esfuerzo.
-¿Y que pasa con Kara?
-¿Qué hay con ella? - la pregunta tomó por sorpresa a Alex que respondió a la defensiva.
-Tienes que estar aquí cuando despierte.
-Tal vez mi hermana no despierte nunca J'onn y hay que ser realistas con eso, ademas perdimos a SuperGirl, aun si despertara, es muy probable que sea una humana, así que debemos encargarnos del cuidado de la tierra nosotros mismos.
-Bien, puedo entender todo lo que acabas de decir, pero te quedarás aquí, con ella, yo me haré cargo de esta misión.
-J'onn - Alex quiso prestar, pero fue atajada por el marciano.
-Intento protegerte, no dejes que falte a mi palabra, a la promesa que le hice a Jeremiah.
-Yo...
-Comprendo mejor que nadie lo que estas pasando Alex, siento tu miedo, incluso el bloqueo que tienes desde que entraste aqui.
Alex se puso nerviosa ante esas palabras, no quería relajarse y olvidar suprimir el beso con Lena, si J'onn se enterara de aquello... La odiaría. Le diría que traicionó a su hermana en su "casi" lecho de muerte. Y era lo que había hecho, aprovechó un momento de debilidad en Lena para besarla y no openerse desde el principio. Llevaba tiempo sola y habían momentos en los que sentía la necesidad de otro cuerpo, de probar otros labios, pero no los de Lena Luthor, no de esa manera tan desleal hacia su hermana y menos sabiendo que Luthor no la quería para "algo más" sino para una noche pasajera.
-Te necesito aquí con ella, Alex.
-De acuerdo - dijo derrotada.

                        ***

En lo más alto de un edificio, una capa negra se ondeaba por las fuertes ráfagas de viento, el vigilante nocturno acechaba a su presa, había olvidado a cuantos Jokers y de cuantas maneras los había matado. Esta vez parecía que el payaso del crimen hacía negocios con unos simples traficantes de armas, como siempre, acabaría matándolos a todos por simple diversión y robándose las armas que había negociado comprar. Al menos, de esa manera le ahorró a Batman deshacerse de más escoria. Una capa roja se ondeó a su lado, por un momento su corazón latió con fuerza imaginando a Clark a su lado.
-¿Qué haces aquí J'onn? - El marciano sintió el corazón de Bruce latir acelerado por un momento y calmarse enseguida.
-Vine ayudar.
-Viniste por venganza y eso mi, querido amigo, es algo en lo que no debes dejar caer a tu corazón, no lo hiciste por tu familia, no lo hagas ahora por esta familia que haz elegido tener; vete J'onn, te prometo que el Joker va a sufrir por todo lo que le hizo a Kara y Alex.

                          ***

En las oscuras calles de National City, se elevaban las altas torres de un viejo castillo con detalles góticos en su fachada, las gárgolas de roca y sin vida, vigilaban desde lo alto a los transeúntes. Dentro, en la oscuridad de una habitación, a la que se accedía por una puerta secreta que llevaba a un sótano, estaban ellos. Todos con elegantes trajes negros, pulcros y finos, sin hacer ningún ruido, con las caras cubiertas. Esperando... Hasta que uno de ellos rompió el silencio y habló.
-Bien damas y caballeros, esto será sencillo, debemos debatir si Lena Luthor vive o muere - dijo de manera mórbida uno de los personajes del salón.
Estaban reunidos más de trece personas en aquella habitación oscura, se notaba por el paso del tiempo, que el lugar era muy antiguo, además de tener reliquias decorando el salón apenas iluminado por una tenue luz proveniente de las velas de un menorá antiguo que estaba situado en el medio de la mesa donde todos los asistentes estaban al rededor, atentos, escuchando las indicaciones dadas.
-Si la dejamos vivir - opinó de repente uno de ellos - tendremos que elegir en, si dejarla en el total desconocimiento de nuestra existencia o decirle de nosotros y sobre nuestra organización, en la que por derecho de sangre le corresponde ser líder.
-Si de un derecho de sangre se trata, ella no sería la única en disputar el liderazgo de nuestra organización.
Todos los presentes comenzaron a murmurar, opinar entre ellos sobre la decisión que se tomaría a futuro.
-Pero no se sabe nada de Lex Luthor, desde la muerte de Kal-El.
-¡ESO NO SIGNIFICA NADA! - gritó uno de los miembros más ancianos.
Nuevamente se alzaron los murmullos. Ninguno estaba de acuerdo en los actuales acontecimientos, se quejaban de los posibles líderes y maldecian a los antepasados.
-¡YA BASTA! - levantó la voz quien parecía ser el actual líder - a expensas de la desaparición del señor Lex Luthor, creo que lo mejor será... Asesinar a la joven Lena.

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