Concéntrese, Potter

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- Recuérdame solo una vez más porque estamos aquí - susurra Remus mirando al miope a su lado.

Ambos buscaron a Draco y a Harry minutos luego que estos se fueron, por petición de Potter, quien expresó que no confiaba en la cercanía que tenía su "leoncito" con la "serpiente rastrera" y que quería corroborar que estuviera bien. Un motivo algo cuestionable en opinión de Remus.

Si bien Sirius quería ir con ellos, más fuerte fue el golpe que le dio James reclamándole que debía cuidar de Ron y Peter de la "serpiente retorcida" de Crouch, logrando que a regañadientes - y con el orgullo herido a causa del golpe - Sirius se escabullera para vigilar a Peter, Ron y Barty en la cocina mientras James y Remus - quien solo quería dormir - buscaban a Draco y a Harry.

— Porque esa rubia creída puede estar planeando algo en contra de nuestro Harrito — responde asomándose por una columna, mirando fijamente a Draco hablar sobre dios-sabrá-qué en el jardín — Y porque no tengo nada más que hacer — agrega sincero. Remus lo mira mal.

— Hay doce proyectos sin empezar en tu escritorio que dicen lo contrario —responde pero James alza un dedo, indicándole que se callara antes de señalar hacia Draco y Harry de nuevo — ¿Qué? — mira hacia el jardín.

— Ten, necesitas leer todo esto. Y muéstraselo al idiota de Wallace — indica Draco entregándole los cinco pergaminos con información detallada sobre la Guerra de los 7 Magos al miope, quien aceptó la entrega antes de guardarla en su morral — Y espero que se les ocurra algo, yo estoy con la mente en blanco. Pero seguiré intentando — promete antes de alejarse de Harry sacudiendo su mano a modo de saludo.

— ¿De qué hablan? — murmura James extrañado y Remus tan solo se talló el ojo con la mano.

— No sé, ni me interesa ¿Podemos ir a dormir? — suspira pesadamente.

— ¿Hola? — tanto Remus como James voltean, encontrándose con Harry — ¿Puedo saber que están haciendo? — cuestiona alzando una ceja. James estaba de rodillas en el suelo y Remus se asomaba sobre él.

— Buscábamos mi lente de contacto — responde Remus, sin querer admitir que había espiado a alguien, sobre todo a él.

— La verdadera pregunta es: ¿Qué estás haciendo tú? — responde James por otra parte mientras se levanta y lo señala con el dedo. Remus suspira y se pone de pie.

— Yo estaba ayudando a Draco con un examen que tiene sobre Historia de la Magia — responde tranquilo mientras sujetaba la correa de su morral — ¿Tú que estabas haciendo? — Inciste.

— ... —

— ¿Me estaban espiando? — alza una ceja otra vez y James aprieta los labios.

— ¿No? — responde y Harry mira a Remus.

— Yo enserio estaba buscando mi lente de contacto — alza un pedazo de plástico con basuritas que no era para nada un lente de contacto. Harry suspira y se soba el puente de la nariz.

— Chicos, aunque agradezco su preocupación me gustaría que dejaran sus prejuicios, al menos sobre Draco, para que podamos progresar ¿Si? — pide. James jadea indignado.

— Tal vez Sirius te haga caso, pero yo no. Los Slytherins son serpientes rastreras, hoy y para siempre — afirma — Y yo no voy a descansar hasta que lo veas — afirma alzando un dedo con determinación, antes de dar media vuelta e irse con seguridad y paso firme.

— Adviértele que otra de estas y lo golpeo — recomienda serio a Remus, quien asiente rápidamente antes de correr tras James, desesperado por regresar a su cuarto y dormir.