Cartas para Lilith. (Bill Kaulitz)

•3•

- Ahora vengo- salgo de la cabaña dispuesta a encontrar a tal ser raro, y voy al parque donde ha dado lugar el avistamiento. Allí me quito la chaqueta y repaso los árboles uno por uno, encuentro algo muy curioso- ¿Mike?- he llamado a mis amigos y todo- Os necesito. Venid al parque, estoy junto a la fuente- cuelgo, y miro el rastro de pelaje que hay- ¡Ah!- miro hacia abajo asustada, es el mismo perro del otro día- Oh, eres tú- me río- Hola, amorcito perruno- lo acaricio, él se revuelca y se pone boca arriba para que le rasque la barriguita- Ooow, que adorable eres-
- Te... Te pido disculpas-
- ¿A mí? Da igual, es un perro muy lindo- sonrío, y miro al dueño. No puede ser. ¿Por qué el de mis sueños?- Es muy cariñoso-
- Y muy empalagoso-
- Como tú, papi humano- lo hago de reír. Pero, me doy cuenta de que todo está sucediendo como en mi sueño, es extraño-
- Siento también no haberme presentado el otro día, iba con muchas prisas y hablaba por el móvil-
- Tranquilo, no te apures por eso- sonreímos- ¿Eres de aquí?- asiente- Yo también-
- ¿Cómo es que me hablas en inglés, entonces?-
- Me has empezado a hablar en inglés, pues pensé que eras extranjero- se ríe otra vez-
- Pues no, soy de Loitsche. Pero, vivo en Los Ángeles con mi hermano-
- Que guay, América. Me encantaría ir a América-
- Está muy bien, pero hay muchísimos más criminales que aquí y da un poco de miedito por las noches-
- Entiendo- asiente- Soy Lilith-
- Ya... Am, soy Bill- le extiendo la mano, él la estrecha-
- Joder, chico. ¿Te encuentras bien?-
- ¿Por qué lo dices?-
- Estás helado. ¿Quieres que te lleve al médico o algo?- niega-
- Suelo ser así- asiento sorprendida- Pumba...- me río al notar al perro restregándose contra mi pierna, busca caricias como antes- Tío, que pegajoso has salido-
- Es una bolita muy mona, ¿verdad?- sonrío cogiéndolo- Oy, por favor. Me muero con él-
- Te lo regalo- nos reímos- Que va, es lo único que tengo. No tengo padres ni hermano-
- Pero si me has dicho que vivías con tu hermano- asiente-
- Éramos tres hermanos, mataron a mi hermana igual que hicieron con mis padres. Él y yo salimos corriendo y nos pegamos viviendo en un orfanato mucho tiempo-
- Jo. Lo siento mucho, Bill-
- Eso fue cuando teníamos seis años- me mira- Y este renacuajo apareció hace poco- lo coge él ahora, el perro le lame toda la cara- Pumba, no seas cochino-
- ¿Pumba?- asiente- Lindo nombre- como el de mis sueños. ¿Esto qué significa?-
- Gracias- sonríe- Me tengo que ir ya-
- ¿Ahora? Si aún está por salir la luna-
- Por eso mismo. Encantado de conocerte, Lilith-
- Igualmente- me estrecha la mano de nuevo, y deja un papel cuándo la suelta- Vamos, Pumba- me sonríe otra vez, y se va con su perro. Abro el papelito como en mi sueño, sólo que ahora veo un número y parece ser el de su teléfono. Llamaré a ver después de cenar-

***
- ¿Hola?- alguien contestó al móvil-
- ¿Quién es?-
- Soy Lilith-
- Oh, Lilith. Soy Bill-
- Lo suponía- nos reímos-
- Me pillas en mal momento, hablamos mañana. Siento cortarte así- parece que está haciendo algo- Buenas noches-
- Buenas noches- cuelga-
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- ¿Bill? ¿Quién es Bill?- miro a Ginny-
- Es un chico-
- ¿No me jodas?- me río- ¿Amigo?-
- Conocido- sonrío- Es muy mono-
- ¿Cómo es?- se sienta a mi lado-
- Es rubio, tiene una pequeña melena alocada-
- Los rubios no siempre son la mejor opción-
- Él es muy simpático, es el dueño del perro adorable-
- ¿Él? Pero si dijiste que era muy arisco-
- Me ha explicado el por qué, y se ha disculpado varias veces. Ha sido un encanto-
- Alerta, alerta: Lilith está enamorada del rubio guaperas del barrio- Mike me mira- Ten cuidado, chica. Tendré que hacerle un examen para ver si es bueno para tí- me río-
- No me gusta, es solamente que fue muy simpático. Es lindo-
- Si dices eso es porque te mola-
- ¡Que no, Mike!- lo miro mal-
- ¡Te gusta Bill! ¡Oh, mi amor, bésame mucho! ¡Billy! ¡Te amo, no pares!-
- ¡Idiota!- le lanzo la bota a Mike, quien ríe igual que Ginny- Sois idiotas- ambos dejan de reír cuando una carta entra por la trampilla de la puerta, pero Ginny se levanta y la coge-
- Carta para Lilith- me mira- ¿Quién cojones te envía tantas cartas?-
- Ni puñetera idea- me río- ¿A ver?- me la da, yo la cojo y la abro-

Queridísima Lilith, la mujer más bella y tierna del mundo. Sé que anoche escuchaste sonidos extraños otra vez, así que no quiero que salgas de la cabaña en estas tres próximas noches, se espera luna llena. No se te vaya a ocurrir salir por la noche bajo ningún concepto, y menos vayas al bosque, hay criaturas que pueden hacerte daño. Sé que la curiosidad te mata, pero por favor, no vayas. Podrías morir, y yo no quiero que mueras, me moriría yo también. Te quiero, y protégete bien estas tres noches. No salgas y no te asustes si escuchas ruidos raros por fuera de la cabaña, las criaturas no entrarán si no abres la puerta. Mantén la calma y duerme, nada te hará daño mientras estés dentro. Te vuelvo a repetir que te quiero, Lilith. Y que tienes un cuello precioso.

Atte: Tu querido admirador.

- ¿Qué es esto?-
- Da muy mal rollo- asiento ante la frase de Mike-
- Saldré-
- ¡No!- me lo prohíben. A la noche salgo cuando se duermen, y me voy al bosque, estoy que no aguanto-
- ¿Hola?- miro detrás de mí, pero no veo nada. Malditos crujidos escalofriantes. Me quedo un rato esperando a ver qué sucede, y cuando voy a avanzar, grito a un volumen increíble cuando me cogen del tobillo- ¡NO, SUÉLTAME!- un rugido gutural hace que mire a la bestia, quién se abalanza sobre el ser que me tiene cogida del tobillo y lo mata delante de mis ojos. Me mira después, es... ¡ES UN LOBO! Me gruñe, y se va rápidamente a través de los árboles- ¡Espera, ven!- nada, lo he perdido. Maldita sea. Esto debo contárselo a mis amigos-