Cartas para Lilith. (Bill Kaulitz)

*10*

- Lobito- suelto al aire al notar que no está a mi lado, aunque hay un rastro de pelos, los guardaré como los otros. Es tan mono, es tan cariñoso, tan tierno. Me encanta. Me ducho y bajo cuando me visto, Mike está pegadito a Ginny como de costumbre y acaricia su barriga, ella está haciendo el desayuno- ¡Buenos días!- ellos me miran, y sonríen-
- Aquí tienes tus tortitas- Ginny me sonríe-
- Muchas gracias, bonita- ambas nos abrazamos. Termino de desayunar y voy en busca de mi amigo Bill, necesito hablar con él y contárselo todo porque él entiende de esas cosas más que yo incluso. Pego al portero de su casa, y cuando nadie me contesta, se abre sola. Al ver que no está él entro, y pego al timbre de su puerta, pero no hay nadie de nuevo y tampoco detrás de la puerta, pero sí que hay un rastro de pelos grises. Los sigo, y eso me lleva a la habitación de Bill, quién está totalmente desnudo y en posición fetal dormido. Los pelos llevan hasta su cama, que extraño. ¿Le habrá hecho algo mi amigo? Lo dudo, Pumba dormida plácidamente en el sofá y se despertó porque lo acaricié. Cuando voy a tocar su espalda, él se mueve-
- Buenas, Lilith- ¿Cómo sabe que estoy aquí? Sí he sido la más silenciosa del mundo. Hasta me he quitado los tenis para entrar en su habitación-
- ¿Qué te ocurre? ¿Estás bien?- asiente. Se levanta poco a poco, escucho como algunos huesos crujen, pero me pongo roja al ver que está como dios lo trajo al mundo del todo. No tiene nada que cubra su... Ya entendéis, y eso a mí me da vergüenza. Él se ríe cuando llevo las manos a mis ojos tapandolos-
- Oye, no pasa nada. No te avergüences, por favor. Ya estoy bien- me los destapa, y me mira a los ojos- Es que anoche caí redondo como un bebé al tocar las sábanas de la cuna- me río con él- Ayer tuve un día agotador, tuve que rescatar al personal- asiento, él sonríe- ¿Quieres algo?-
- No quiero molestar-
- Que va, no molestas. ¿Café, colacao?-
- Un colacao- me lo prepara, él siempre bebe café. Ambos hablamos hasta que se hace tarde, la verdad, y sobre mi amigo peludo además- Me encanta ese hombre lobo-
- Está enamorado de tí, te tienes fichada, y ahora sé aproximan los celos de nuevo. Ten cuidado. Habrán luna llena esta noche y la de mañana. Pasadas dos semanas habrá durante cuatro días, que es cuando acaban con el celo- ¿Cómo puede saber tanto? Ahora que me fijo, tienen los ojos muy parecidos. Él vuelve a negar rápidamente cuando se da cuenta de que miro sus ojos, yo me sonrojo un poco- En fin- pero, tengo una pregunta. Si mi amigo llega a hacer el amor siendo un animal.... ¿Podría quedar embarazada? Porque yo niños no quiero en estos momentos- No, no tienes por qué. Puedes tomarte una píldora anticonceptiva y ya- pero, ¿y si su semilla es más fuerte que la de un humano? Podría dejarme encinta y no, eso sería un horror y un desastre a tan temprana edad- ¿Qué te crees, que tienen un semen mutante o algo? De eso nada. Es como el del humano, chica- ¿Cómo sabe tanto?- Oye, lo siento, tengo que irme. Gracias por venirse visita-
- Gracias a tí siempre-
- Nos vemos esta noche- dice en bajito antes de cerrar la puerta. ¿A qué se refiere?-

***
- Debes ir al médico, Lilith. ¿Cómo vas a hacerlo? ¡¿Has imaginado el tamaño que puede tener?! ¡Te partirá por la mitad enterita!- ni que fuese gigante-
- Tendré cuidado, bobo- miro a Mike, él suspira. Aprovechan para celebrar el sexto mes de embarazo de mi amiga para ir al cine, así también nos dejan intimidad. Decidido, hoy acabaré con mi existente virginidad, tengo mucha curiosidad de saber qué se siente. Estoy tumbada en la cama con el móvil, los vídeos chorras siempre me ayudan en este momento, hasta que escucho aullidos y pasos. Bajo saltando las escaleras del tirón como la primera vez que le abrí la puerta, y allí está él, con esa mirada aterradora a los ojos de los demás. A mí me encanta-
- Hola- sonrío- ¿Quieres pasar?- él está dudando, pero entra al final- Ven, hay algo que te quiero enseñar- miro hacia atrás cuando subo el primer escalón, está comiéndose las chuletas de la nevera. Adiós a nuestra cena- ¿Están ricas?- solamente mastica, a veces es un poco frío. Sube conmigo cuando termina de comer, y entra en mi habitación dejando que cierre la puerta. Lo mira todo, pero le mira a mí al escuchar que echo del seguro- Oye, sé que te querías aparear conmigo hace unos meses, y yo te dije que no por miedo. Pero...- me mira fijamente como siempre hace- Quiero saber qué se siente, estoy lista. No seas muy duro, por favor. Soy virgen- él asiente, y me abraza retirando mi ropa con cuidado. Me va lamiendo el cuello de mientras, eso me encanta, hasta que me quita mi primera prenda de ropa interior. Retira mi sujetador tirándolo a tomar por saco, y me besa los pechos, cosa que me sorprende pero que me gusta también. Apasionado, un lobito apasionado y ardiente, me encanta- Willi, cielo- termina de desnudarme, y me mira al completo, me da un poco de vergüenza. Me tumbo en la cama boca arriba dejando que se meta entre mis piernas, pero me coge de la cintura y me pone como él desea, a cuatro como un perrito. Sus garras acarician mi espalda, no llega a hacerme daño ni mucho menos, me encanta que acaricie mi espalda- ¡Ay!- exclamo encogiendome un poco por el pinchazo de dolor que he sentido, y es cierto que empieza un poco bruto. Pero, va lento cuando pasa un tiempo, y yo me siento mejor. Al final, ¿saben qué? Me encanta, me encanta que me haga el amor. Me embiste dulcemente mientras acaricia mi cuerpo con cariño, y gruñe i aulla un loco cuando se me escapa algún gemido, es muy mono- ¡Willi!- terminamos nuestro acto amoroso con mi mano y su garra entrelazadas, eso es en símbolo de amor. Él se separa de mi cuerpo a los segundos, sale de mi entrada y hace que me ponga encima suya, es un peluche. Me encanta su suave pelaje, amo dormir sobre eso, me encanta todo de él por muy monstruo que sea- Te quiero- le digo pegada a la oreja izquierda, él me mira- Te quiero- me abraza como si me entendiera, yo también me acomodo mejor. Él echa la manta sobre nosotros, y me lame el rostro, cosa que me hace reír- Eres muy mono. Gracias- le doy un beso en el hocico, y me acuesto de nuevo abrazándome a él. Es tan adorable. Me dormí enseguida, fue una gran noche-

***
- Oh, Mike...- digo rascando mis ojos cuando Mike entra imitando a la trompeta del ejército, yo rápidamente miro a mi alrededor, no hay nadie. Maldita sea-
- ¡Buenos días, bella durmiente!- sonríe- El colacao con la pastilla anticonceptiva y tú bocadillo favorito-
- Gracias- sonrío. Después de desayunar y arreglarme bajo a hablar con Ginny, pero el grito de Mike have que ambas lo miremos- ¿Qué ocurre?-
- Nada-
- ¿Qué pasa en el ordenador?-
- No te preocupes- me dice sonriendo de manera nerviosa- No es nada malo-
- Entonces no es tan malo, ¿o no?- nada, no me deja verlo- Oish, muy bien- me rindo. Ya lo veré en cuanto pueda, jejeje.

Bill
- ¡Ya voy!- abro la puerta- Que bien verte, Lilith-
- No soy Lilith- miro a su amigo- Escúchame bien, niño. Déjala en paz. He visto el vídeo, tú eres el lobo y el vampiro que atemoriza a todo Loitsche. ¡Ella te ha regalado su virginidad!-
- Y es un gran regalo, yo la amo más que a mi vida- sonrío-
- Dejala, maldito traidor. Eres un mentiroso-
- Mira, ten cuidado con quién hablas porque soy un vampiro también, y puedo dejarte más seco que el desierto del Sáhara. Si yo no le digo, ella dará con la tecla seguro, y si no le diré. Fin de la historia. Ahora afuera-
- Si no lo haces tú, lo haré yo a través del vídeo-
- Atrévete, nenaza con patas. ¡Vamos, fuera de mi casa, vete! ¡Vuelve a entrar sin permiso y verás!- me siento delante de la chimenea al cerrar la puerta, y cojo una foto de ella sonriendo-
- Muy pronto, Lilith. Pero, por ahora no. Ten paciencia, queda menos para que llegue la noche de las creaciones, tranquila mi amor-