"Vivirás para ver lo que hay después de la lluvia, te lo aseguro".
En teoría, es mi primera historia, por lo que tengan paciencia en caso de que la lean.
Issa Estábamos en clase de economía, aveces era algo difícil mantener el hilo - seguramente por me deficits de atención y la ansiedad -, recordé el raro momento de ayer intentando comprender que fue lo que sucedió que el chico me miraba de esa forma extraña. Varias posibilidades me pasaron por la mente: Uno, tenía algo en la cara. Dos, Me miraba de casualidad. Tres, se burlaba de mí. Cuatro, en realidad me hago cuentos con algo trivial. Todas igual de probables.
Sencillamente me miraba como cuando miras a alguien cualquiera, te fijas como es y te haces un perfil, incluso si no vuelves a ver a esa persona. Eso es. Si, seguramente era eso. Quiero decir, ¿qué más podía ser? No podía ser otra cosa.
Berthold Vaya, todavía estoy impresionado. La extraña chica de ayer tenía unos ojos hermosos, que se veían un poco verdes y castaños. Creo que son más espectaculares a corta distancia. Es muy baja, mucho más baja que yo. Desde donde estoy puedo ver que tiene un rostro hermoso, ella me miró con esos hermosos ojos, y juro que me pareció extraño, fue extraño porque no la conocía, y solía gustarme otra clase de chicas, sociales, que me hablaban. No la conozco, pero cuando me miró, me sentí un poco petrificado, pero para mi desgracia aparto la mirada. Esto es bueno, porque al menos ya no me siento raro, por una chica de la que no sé nada y puede ser más joven que yo. Lo encuentro muy extraño porque parece más joven que yo y nunca me había sucedido con chicas menores, ni siquiera cuando se me declaraban. Estos sentimientos pueden estar mal, pero no es que realmente me guste de todos modos.
La clase salió bien, excepto que mis pensamientos fueron consumidos por alguien que no debería...Sí, muy bien. Nos asignaron un trabajo y no indicaba ser una nota ni algo importante, pero que yo sepa, es obligatorio.
Unos minutos después, me di cuenta de que Alex estaba hablando - antes de distraerte pensando en esa misteriosa chica, querrás decir -, hablaba de nuestro proyecto. El cual básicamente consistía en reunirse con otros estudiantes más jóvenes que nosotros e interactuar entre nosotros. Comprender y compartir nuestra experiencia para hacer una tabla- espacio para las generaciones futuras. Este trabajo me parece un poco estúpido, es del azar, ni siquiera puedes elegir a alguien con quien quieras trabajar. Esto es innecesario.
Nos despedimos fuera de la institución, aunque vivimos cerca, participo de un programa deportivo del que formó parte desde hace varios años. No siempre puedo ir porque tengo que ayudar en la casa, pero soy muy bueno y compensó algunas de mis deficiencias con eso.
Issa Luego de terminar el día, me iba a casa comiendo un rico helado de crema - ese con el logo de un oso - no podía evitar pensar en el chico y en el trabajo que nos habían asignado. Me ponia muy nerviosa tener que hacer un trabajo con alguien de un curso superior e insegura de tener que hablarle de mis metas y sueños, ni siquiera con los chicos de mi salón lo hacía y ahora debía con alguien extraño. Almenos no tendría que estresarme de toparme con esa persona el próximo año, aun que el próximo año podía pasarme lo mismo con alguien a quien yo tendría que entrenar, almenos no sería yo la nuevo en esto.
¿"Entrenar"? Ni que fueras el señor Miyagi, Issa.
Espero que no quede sola y que me toque alguien agradable.
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