Soulmates. [ bokuaka ]

22

Ninguno de los dos podía creer que aquello estaba pasando pero nadie se separaba, con ojos cerrados siguiendo el beso.

Algo hizo "click" en la cabeza de Bokuto, obligándolo a separarse, Akaashi quiso volver a acercarse pero el peligris lo detuvo.

— Basta, Keiji. - pidió con la voz ronca.- Es suficiente, no está bien.

— ¿Qué tiene? - preguntó un poco aturdido y  confundido inclinando la cabeza hacia un costado.- No es como si hubiese alguien.

— No tiene nada que ver si hay alguien o no-

— Entonces si hubiese gente ¿Te puedo dar un beso igual?

— No, Akaashi, no. Se supone que somos amigos, hasta donde se los amigos no se dan besos y mucho menos en los labios. - dijo pasando una mano por su cuello.-

— A veces no hay que ser como los demás, podemos ser otro tipo de amigos. - contestó con simpleza a la vez que se encogía de hombros.-

— No, no vamos a ser "otro tipo de amigos". - repitió haciendo comillas.- Vamos a volver a como antes.

La verdad es que Bokuto parecía ser el más cuerdo en aquel momento, pero aún seguía aturdido y con ganas de más.

Koutaro nunca había visto de otra forma a Akaashi más que como amigos, si tenían una buena relación dónde se abrazaban pero jamás había ocurrido otra cosa.

No quería hacer la situación más incómoda por lo que por su cabeza paso el hecho de volver a dejarse de hablar, puesto a que parecía que a ambos les había gustado.

— Si querés que volvamos a tener la relación de antes, creo que va a ser mejor que olvidemos que esto pasó y sigamos como si nada. - sugirió el peligris poniéndose de pie.-

Si seguía al lado de aquel chico, probablemente volvería a besarlo.

— ¿Otra vez vas a huir? - preguntó Akaashi y Koutaro se giró a mirarlo de brazos cruzados.- ¿Qué?

— Tenemos que irnos a casa y hay que cerrar, por eso me puse de pie, deberías de hacerlo vos también. - se dirigió a los interruptores y apagó todas las luces del lugar.-

— Me tiemblan las piernas, no creo que pueda. - dijo y ambos rieron levemente.- Creo que voy a quedarme un poco más acá.

— Lindo. - murmuró Bokuto sonriendo y pasando a su lado.-

Había creído que lo había pensado pero al ver a el otro chico sonreírle y ponerse de pie, quiso golpear su frente.

— Gracias. - respondió y beso rápidamente la mejilla del peligris.-

Iba a huir pero Koutaro fue más rápido y lo tomó del brazo, atrayendolo hacia su cuerpo.

— ¿Qué haces, Akaashi? - preguntó irritado.-

— Yo trataba de ir a buscar mí campera para irnos pero vos me agarraste. - respondió tranquilo y se acercó más al otro chico.- ¿Por qué?

— No hagas eso otra vez. - pidió serio y el pelinegro sonrió.- No jugues conmigo.

— ¿O qué? - se puso en puntas de pie.-

— En verdad te estoy diciendo.

— Yo también. - acercó las manos al rostro del chico y delicadamente comenzó a pasarlas sobre su rostro.- Casi no te puedo ver, no se dónde están tus ojos.

Bokuto quien no decía una sola palabra, se mantenía firme en su lugar con ambos brazos a su lado.
Keiji pasó los dedos por sus mejillas delineando su mandíbula para seguido encontrar los labios del peligris.

Lentamente se acercó y volvió a juntar sus labios, se alejó esperando a que el otro chico le dijera algo pero al contrario, sintió las manos de Koutaro en su cintura acercándolo más a él y volvió a juntar sus labios.

Luego de aquella noche, ambos se prometieron que no volverían a sacar el tema del beso. Por el bien de los dos, y para no hacer incómodas las cosas con sus amigos.

De más estaba decir, que era difícil que estén  juntos pues habían experimentado besarse entre ellos.

No es que fuese la primera vez que lo hacían, tanto Bokuto como Akaashi habían estado con otras personas, pero fue diferente cuando era entre ellos.
La tensión que habia cada vez que se quedaban solos o simplemente en grupo, era enorme.

Pero no iban a caer.

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[De nuevo al presente, Bokuto POV']

— ¿Te puedo contar un secreto? - preguntó Akaashi y asentí.- Acercate.

Me agaché un poco para que le fuese cómodo hablarme y sentí su mano en mi nuca evitando que me aleje.

— Yo... - susurró en mi oreja y tragué pesadamente.- Realmente tengo ganas de besarte ahora.

Me quedé unos segundos en esa posición tratando de calmarme, no sabía que hacer.

— Akaashi, seguís ebrio. No voy a hacer algo de lo que después te arrepientas. - dije separándome, pero no muy lejos ya que hizo fuerza en su agarre manteniendome a centímetros de su rostro.-

— Primero, no estoy ebrio. - comenzó a contar con sus dedos y sonreí de costado.- y segundo, nunca me arrepentiría de volver a besarte, pero pareciera que vos sí.

— No me digas que no estás mal cuando te bajaste más de cuatro vasos vos solo. - dije y quite su mano de mí cuello.- Cuatro que solamente yo ví, pero te quiero recordar que estuviste dando vueltas solo con el otro chico.

— Se llama Konoha y es tu amigo también, no le digas el otro chico. No te pongas celoso, algún día podemos escapar nosotros juntos. - acarició mí mejilla y sonrió.-

— Sos increible-

— Gracias. - me interrumpió.-

— Increíblemente insoportable, Akaashi. No te voy a descuidar más. - protesté y su sonrisa se borró.-

— Si ya sabes cómo me pongo ¿Para qué me invitan?

— Bueno, bueno. Hasta que los encuentro. ¿Cómo están mis padres? - ambos nos giramos y vimos que era Konoha.-

— Apareció el desaparecido. - escuché a Oikawa detrás de mí y luego su brazo en mí hombro.-

— Vos me abandonaste con el bartender, nunca estuve más incómodo. Sentí que en pocos minutos me iba a golpear. - comentó Akinori y reímos.-

— Konoha, vamos al baño. - le tomo el brazo y ambos se fueron.-

— ¿Por qué algo me dice que no van al baño.? - pregunté y Oikawa negó con la cabeza.-

— Porque el baño queda para el otro lado. - respondió y suspiré.- Vamos con los chicos, déjalos ser.