Sorry, i love you - Lee Felix

7 - ¿Who are you?

Era la tercera semana que llegaba algo a la oficina, pero en esta ocasión no eran flores o algo parecido, sino un sobre. No quise arriesgarme a nada y fui a recibirlo directamente del chico que ya todos recordábamos. 

-¿Enserio no sabes quién es?

-No, lo siento. Solo me entregan los paquetes y me dedico a entregarlos -hice una pausa. Aquello comenzaba a inquietarme. ¿Quién era y por qué tanta insistencia?

-Bueno, gracias... supongo -el chico se marchó, por lo que volví a ocupar mi lugar en la mesa. Todos me observaban a la expectativa, pero no me moví.

-¿No lo abrirás? -cuestionó Hongjoong a mi lado.

-No -respondí segura.

-Oye, tenemos la espinita de saber quién será ese chico, me parece algo misterioso que esto comience a ser algo tan constante -miré a mamá en silencio. Ella estaba bastante al tanto de la situación, aunque procuraba no hablar al respecto de eso. Después de todo, su instinto de madre posiblemente le decía otras cosas.

-Anda -animó papá un poco más tranquilo. Al principio parecía molestarle un poco eso, pero ahora lucía un poco curioso a la situación.

-Ok -miré a Dania de reojo. Claro que aun estaba dolida por lo de Jackson, pero estaba sobrellevando la situación mejor de lo que esperaba. Abrí el sobre lentamente, para encontrarme con una serie de tres fotografías en su interior. 

La primera era una mía evidentemente mucho más chica de edad y solo eso. La observé sin prestarle mucha atención. La segunda era una mía aparentemente en Japón. Wow, y yo que deseaba tanto conocer el país, sin recordarlo, ya había estado ahí. Aquello me sacó una sonrisa. La última de ellas, era una selfie que había tomado mientras montaba la parte trasera de una bicicleta con un chico. Este no mostraba su rostro, solo su espalda, pues iba concentrado en conducir el vehículo de ruedas, mientras yo captaba el momento. Pero... ¿un chico rubio? Aquello me confundió un poco, ¿rubio?

-Esperas, ¿quién es él? -Dania tomó la fotografía y me miró.

-No lo sé. No conozco a nadie rubio.

-Y te ves super pequeña. ¿Hace cuanto habrá pasado de esta foto? -Soobin las observaba en silencio con bastante curiosidad. 

-No lo sé.

-Pues habrá que encontrarlo y hablar con él. Tal vez él tenga la respuesta de donde estuviste el tiempo que estuviste lejos -mamá no soltó las fotos por un buen rato. Lucía conmovida por lo que veían sus ojos.

¿Quién era ese sujeto y por qué tenía tanto interés en mí? ¿Cómo me había encontrado? ¿Tenía que ver con mi vida pasada? ¿Mi desaparición? 

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-No creo que esto sea una señal cualquiera. Si está tratando de comunicarse contigo es por algo, te conoce -Dania hablaba seriamente mientras daba vueltas de un lado a otro bajo la sombra de los arboles. Aquel parque se había vuelto nuestro lugar favorito por muchas razones. Ella para poder despejarse de lo que la abrumaba mentalmente durante los últimos días, y yo por Felix y Ryujin.

-Es obvio que me conoce -reí -no por algo me hizo llegar estas fotos.

-Entonces -hizo una pausa y se colocó frente a mi tomando mis hombros -tú tienes la culpa.

-¡Yo por qué! 

-No recuerdas nada. Ay, a veces quisiera reiniciarte y que recordaras todo ya.

-¿Crees que no quiero eso? No sabes lo terrible que es llevar una vida que ni siquiera recuerdas haber llevado alguna vez antes -aquella conversación comenzó a molestarme un poco -no recordaba a mamá ni a papá, a ti o a Soobin, a Hongjoong... a nadie. Y todavía, sobreviví de milagro. ¿Qué pasó antes de eso? No lo sé ¿si? Simplemente no lo sé -me puse de pie y comencé a alejarme lentamente mientras me abrazaba a mí misma. No quería irme muy lejos, pero tampoco quería seguir conversando sobre eso. Mi vida hasta antes de que el primer regalo llegara estaba bien, y en 3 semanas estaba cambiando drásticamente en muchos aspectos.