Regresamos de las compras un tanto agitadas y luego de hacer un montón de pausas, llevábamos muchas bolsas entre las manos, pero no olvidé a ninguno, cincuenta y seis lobos en total, memoricé sus contexturas y pies, estoy segura de que todo lo que compré les quedará de maravilla.
En medio de nuestra caminata, me enteré de que Camille y Samanta son hermanas, ambas menores de edad, Cam tiene quince, Sam diecisiete, ninguna recuerda haber estado en una escuela antes, no saben leer y ni escribir, dicen haber estado demasiado tiempo perdidas en el lobo, obligadas por Absalón a hacer cosas que no querían.
Y con esta información nueva, llegué al pueblo, dejé las cosas y regresé a viajar al pueblo vecino para comprar libros de caligrafía, lápices, gomas, cuentos de niños, todo lo necesario para enseñarlos a leer y escribir antes de llevarlos a la escuela, debo asegurarme que todos reciban la educación que merecen.
Los siguientes días fueron caticos, hicimos construcciones más sólidas, puertas en vez de simples cortinas, ventanas, para poder apreciar el clima en el exterior, techos puntiagudos, para no acumular nieve en el techo, ya se nos han caído algunos por el peso, debemos ser más inteligentes, y así, modificamos los feos establos e hicimos bonitas cabañas, ahora con camas construidas con la madera de los árboles que nos rodeaban.
Había lobos que sabían sobre electricidad, compraron todo lo necesario y en menos de tres días, ya teníamos luz y la posibilidad de tener electrodomésticos en el interior de nuestras casas, también había lobos que sabían sobre gasfitería, utilizaron las napas subterráneas y pozos para tener agua, y fosas bajo cada casa para poder ir al baño como las personas normales, ya estábamos cansados de cagar al aire libre en nuestra forma lobuna y cubrir todo con tierra después, era antigénico, agradezco tener un baño ahora donde poner el humano culo.
Y sobre los favores que pedí...
Los lobos que visitaron la manada Hale, llegaron con las manos vacías, dijeron que no había nada, ni siquiera una casa en pie, no había rastros de lobos, ni aroma, no había... nada.
Y los lobos que fueron con la manada Sallow... ellos... tampoco encontraron nada, dijeron que el pueblo olía a fuego y cenizas, dijeron que olía a pelo quemado cerca de un árbol gigante, quemaron cuerpos, el olor de muchas personas se mezclaba en el aire, pregunté si quedaron sobrevivientes, pregunté... si encontraron a alguien con vida, pero no había nadie, todo estaba destruido, quemado y desierto.
Estaba sola, pero no podía derrumbarme, tenía que ser fuerte por todos aquellos que dependen de mí.
Esta sería la nueva manada Sallow, no dejaré que el nombre de mi familia muera en vano.
— Gracias a todos por venir hoy, es un agrado poder compartir este domingo con ustedes, los domingos son días para reunirse en familia, es la tradición, todos los domingos nos reuniremos en el almuerzo, usando esta extensa mesa dónde comeremos lo que preparamos, reiremos y disfrutaremos de nuestra compañía, porque somos manada, somos uno, estamos conectados entre nosotros y a esta tierra, dónde por primera vez estrechamos lazos, dónde fui llamada su alfa por primera vez. Aquí es dónde me conecté con mi verdadero yo dónde puedo escuchar a la tierra hablarme, a la nieve susurrar, al viento traer noticias, este es mi hogar y ustedes son familia — levantando mi vaso— por la manada Sallow.
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Possessive Wolf
RomanceKayla fue encontrada en medio de la nada con la ropa echa añicos, tenía apenas catorce años recién cumplidos, no recordaba de dónde venía o qué había sucedido, su cabeza seguía gritando por auxilio, repitiendo las mismas palabras todo el tiempo "La...