| III |

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La cabeza del demonio rodó por el suelo y su cuerpo comenzó a desvanecerse, rojito guardó su nichirin en su funda mientras que _______ dejaba en el suelo la katana que antes tomó de ahí, que seguramente perteneció a algún cazador que murió

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La cabeza del demonio rodó por el suelo y su cuerpo comenzó a desvanecerse, rojito guardó su nichirin en su funda mientras que _______ dejaba en el suelo la katana que antes tomó de ahí, que seguramente perteneció a algún cazador que murió.

Miró con curiosidad las acciones del pelirojo, pues se acercó al cuerpo desvaneciéndose.

-Que olor a tristeza..murmuró y tomó la mano del demonio más grande—por favor, Dios...ayúdalo..-

Y de ahí susurro algunas cuantas cosas que no logró entender, aquello lo dejó impresionado; la mano terminó por desaparecer y cuando el semi-cazador quiso preguntar por el nombre del chico que lo ayudó, se percató de que ya no se encontraba.

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Pasó el resto de los días, ayudando a varios espadachines y uno de los que resaltaron más fueron un rubio que corrió en cuanto lo vió y un chico con cabeza de jabalí que lo persiguió por casi toda la montaña tratando de decapitarlo.

Luego del incidente, por fin encontró las apestosas flores de glicinia que ahora mismo comenzaba a amar porque significaban que su tortura de siete días terminó, cuando llegó no había nadie así que asumió que aún no llegaban, se acercó a 'las niñas' que esperaban a los espadachines.

Explicó su condición y el por qué estaba ahí, con gusto lo dejaron irse no sin antes dejarle una carta a Oyakata-sama, creó una sombrilla improvisada con algunas ramas de los árboles de glicinia que estaban en el suelo y la parte inferior de su kimono que hace días arrancó para tener más mobilidad, luego se despidió del peli-negro y la peli-blanca.

Tardó demasiado tiempo cruzando los arboles de glicinia ya que se veía obligado a hacer pausas cuando su piel tocaba sus pétalos y le causaba una enorme irritación, teniendo que tomarse un buen rato para regenerarse, cuando logró salir y avanzar algunos metros, una voz lo llamó desde atrás.

-¡¡O-Oye!!extrañado miró hacia atrás, encontrandose con el pelirojo de haori celeste y nubes.-

-¡Ah, rojito! Me alegra verte vivocorrió aún sosteniendo la sombrilla improvisada hasta acercarse a él.-

-¡Soy Kamado Tanjiro!rió por la actitud tan amable del chico.-

-Soy _______ Kibut-, solo _______sonrió de la misma manera, sin percatarse de que sus colmillos fueron vistos—¿a donde vas? Quizás pueda llevarte, por lo que veo apenas puedes mantenerte de pie.-

-Ah...Voy al monte Sagiri.-

Pensó durante unos segundos antes de ubicar completamente el lugar, había tenido misiones ahí o cercas anteriormente así que no era problema para él, claro que tendría que comer algo primero pues pasar siete días sin tener ni un solo aperitivo lo tenía como loco.

-¡Puedo llevarte! Aunque queda bastante lejos no será nada para misonrió y le tendió la mano.-

-¡No te preocupes, puedo ir por mi propia...!cayó al suelo—cuenta...-

-Claro, como digas Kamado.-

Dejó la sombrilla en el suelo para agacharse y quedar a la altura del pelirojo.

-¡Sube!exclamó sonriente señalando su espalda.-

-¿A-ah? ¿No será mucha molesfué interrumpido cuando se percató de que ya estaba en la espalda del chico—¡¿Ah?!-

-Muy bien, asegúrate de cubrirme con la sombrilla por favorle pasó la dichosa sombrilla y así comenzaron su recorrido.-

Por supuesto que Tanjiro notó el aroma un tanto raro que _______ desprendía, decidió no tomarle mucha importancia ya que pudo verlo estar bajo el Sol.
Durante el camino, charlaron un rato antes de que Kamado cayera dormido sobre su hombro pero curiosamente seguía sosteniendo la rama que lo cubría del Sol, algo que agradecía internamente pues si no terminaría desvaneciéndose.

La noche fué llegando y hace algunos minutos que el pelirojo había despertado, no tardaron mucho antes de adentrarse en las montañas hasta llegar a una casa en medio de ellas.

-¡Wow, llegamos!desde que la Luna comenzó a salir la sombrilla fué guardada, amarrándola a su cintura como si se tratara de una espada nichirin.-

-Lo logré...Nezuko...Urokodakisusurró antes de que la puerta de aquella casa fuera pateada y tirada al suelo.-

De ahí salió una chica con cabellos bastantes largos con puntas anaranjadas, con un kimono rosa de patrones negros acompalado de un haori oscuro y un bambú en su boca. La chica miraba la Luna justo antes de girarse y posar su vista sobre ellos.

-¡Nezuko, eres tú! ¡Despertaste!-

La chica corrió hacia ellos extendiendo los brazos, Tanjiro creía que iba a abrazarlos hasta que vió como la cabeza del chico que lo cargaba fué pateada por su hermana y salió rodando hasta esconderse en unos arbustos.

El grito ahogado de Tanjiro alarmó al tan hablado Urokodaki.

-Ah..diablos, esto pasa seguido..el cuerpo dejó en el suelo a Tanjiro antes de ir corriendo tras su propia cabeza.-

-¡¡N-Nezuko!! ¿P-por qué hiciste eso?cuestionó alarmado el Kamado mayor.-

La pregunta se contestó sola cuando vieron regresar al chico de quien ahora dudaban que fuera humano, con su cabeza en manos y la volvió a unir con su cuello, apreciando como esta quedaba como nueva. Viendo al peli-__ tocar su cuello y notar que ninguna cicatriz quedó, como era evidente por su naturaleza.

Nezuko abrazó a su hermano de forma protectora al igual que Urokodaki, mirando amenazante al demonio frente a ellos.

-Ah...supongo que tendré que explicarlo...-

Soltó un largo y cansado suspiro, rascando su nuca y cuestionándose internamente si es que Yushiro lo matará por rebelar algo así.

• • • • •editado🌙

Luna Roja || Tanjiro x Male!readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora