19. Tonto

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Odiaba sentirse de esa manera: enfermo por sentimientos del pasado, que regresaban una y otra vez sin darle un poco de tiempo para respirar.

– ¿Taehyung?

El mencionado escaneó el lugar en busca de Baekhyun, quien, hace más de quince minutos, había en búsqueda de los atunes con los que sobrevivirían el resto de la semana. Sin embargo, en lugar de encontrarse con un joven de casi su altura, se encontró con la chica que había sido su primer interés romántico en el tétrico vecindario de sus padres hace más de cinco años.

– Hola, Nayeon –saludó, correspondiendo su abrazo–. Es un gusto volver a verte.

– Te he extrañado mucho –dijo esta contra su pecho y, apartándose un poco, preguntó–. ¿Dónde has estado todo este tiempo?

– En Japón. Ahora estoy aquí por trabajo –respondió Taehyung, recordando aquellos días en los que la había querido tanto, dejando así que la nostalgia lo invadiera.

– Oh, igual es bueno tenerte aquí de nuevo –comentó Nayeon y, luego de revisar rápidamente un mensaje que le acababa de llegar al celular, se disculpó–. Perdona, es Sooyoung. Debo acompañarla a ver su vestido de novia. Me tiene cansada con su indecisión. Por cierto, su boda será este sábado. Tengo aquí una invitación. Me encantaría ir contigo.

Nayeon buscó algo en su bolso y, al cabo de unos segundos, le extendió un elegante sobre de color perla, decorado con finos trazos de flores y rosas. Taehyung lo recibió y abrió. Así, de repente, ya no pudo concentrarse más en los detalles de la boda que Nayeon le estaba revelando. Su mente solo logró enfocarse en los nombres de la pareja que contraería matrimonio en tan solo una semana: Jeon Jungkook & Park Sooyoung. 

– Lo pensaré. Hazle presente a Sooyoung mis felicitaciones por su matrimonio, por favor.

– Por supuesto, aunque sería mejor que lo hagas tú mismo en la boda –insistió Nayeon y añadió, extendiéndole una tarjeta de negocios–. Este es mi número. Llámame si decides ir conmigo.

– Adiós, Nayeon –se despidió, quedándose con una agria sensación en el estómago.

– ¿Quién era? –preguntó Baekhyun, acercándose a Taehyung, luego de haberse cruzado momentáneamente con Nayeon.

– Nayeon.

– Oh, no había escuchado de ella desde que salí de la universidad –comentó Baekhyun, poniendo en el carrito de compras los atunes y los siempre necesarios extras: hamburguesas y mucho ketchup. Ante el repentino silencio de Taehyung, se detuvo para observarlo y la preocupación se apoderó de él. El rostro de su amigo estaba a punto de igualar el color de su cabello–. Oye, ¿estás bien? Estás demasiado pálido.

Taehyung continuó en silencio por unos segundos más.

– Se va a casar, Baekhyun –informó de repente y repitió la oración una vez más. Esta vez para sí mismo, porque, a pesar de que era imposible que todo ello fuese una confusión, todavía se negaba a aceptarlo por completo–. Jungkook se va a casar.

Tonto. Había sido un tonto.

Himitsu (Taekook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora