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La casa de los Hwang es algo que solo recuerdo por las múltiples cenas a las que yo asistía, una increíble casa debo decir, y creo que ese es el motivo por el que mi mamá y la señora Hwang congeniaban tan bien, por la decoración y ese tipo de cosas y bueno, ahora estaba exactamente como la última vez que entré, seguía igual de sencilla y con ese mismo toque magnífico y elegante.

—¡Esta es Amber! ¡Pero como ha crecido!— la señora Hwang expresó viendo a la niña y yo quise rodar los ojos cuando la vi pestañeando repetidas veces como un ángel, sus ojos después pasaron a mi— Hayden, estás muy guapa cariño.

—Gracias...—susurré y observé como mi papá y el señor Hwang estaban ya rumbo al comedor y yo fruncí el ceño por que faltaba alguien.

—¿Donde está el pequeño Erik?—preguntó mi mamá.

—Justo allá, desde que llegó se ha despegado de ese videojuego— la señora Hwang habló, después se acercó al chico pequeño que no quería soltar en mando del Playstation en el que juzgaba, sonreí unos minutos y fruncí el ceño.

—¿Y HyunJin?.

Pregunté y la señora Hwang me miró, igual sonrió con ternura señalando a las escaleras queriéndome decir que estabas en su habitación.

—Ya sabes cómo es, Hayden querida— sonrió— No quiere bajar pero tal vez tú lo convenzas, debe estar durmiendo.

Si, ¿Quien duerme a esta hora?, solo Hwang HyunJin, yo asentí con toda la buena voluntad de ir y quedarme también junto a él y también para exigirle explicaciones sobre el motivo por el que me dejó sola ayer, subí las escaleras, mis botas sonando en el mármol de las mismas con fuerza por la velocidad de los pasos... al final, me paré en la puerta de la habitación que era de Hyunjin... una puerta negra con una manija dorada, lo recuerdo perfectamente y antes de girarla respiré.

Cuando entré al lugar, todo estaba exactamente como mismo, la habitación a oscuras a excepción de la ventana abierta que daba con la de mi habitación, los estantes llenos de cosas como dibujos, objetos, trofeos, libros, el gris seguía en las paredes y las sábanas negras de su cama aún estaban ahí.

Sonreí pero al presionar el interruptor me di cuenta de que él no se encontraba en la cama, entonces fue que me volteé, desde la puerta del baño provenía música escandalosa de esa que él suele escuchar, decidí esconderme detrás de las cortinas para darle un susto, intento que es inútil porque ese a lugar de temerle a los muertos los muertos le temerían a él.

Cuando la puerta se abrió y yo estuve bien escondida él frunció el ceño, idiota Hayden, dejaste la luz encendida.

Pero eso no fue lo más importante si no lo que estaba viendo... HyunJin estaba saliendo del baño y no tuve el valor de salir... por la imagen, su cabello ahora rubio estaba suelto goteando agua, su torso estaba al descubierto y se iluminaba por estar mojado. Sus hombros eran anchos y tenía una toalla envolviendo su cuerpo, tragué en seco cundo dejó el teléfono encima de la cama. Apreté las manos cuando lo observé llevarse las manos al borde de la toalla, hay Dios.

Se la quitará, ¡se la quitará!.

Apreté los ojos cuando lo hizo, no vi nada, juro que no vi nada, solo sé, que cuando abrí los ojos tenía unos bóxers negros puestos, de repente sujetó una caja de cigarrillos que allí había y salió al balcón... este era mi momento para escapar, pero no pude evitar pensar, ¿este man estaba loco? ¿En bóxers en el balcón?.

Tragué y conté hasta tres.

Uno, dos, tres...

Salí de mi escondite y me acerco con pasos sigilosos a la puerta pero antes de que pudiera sujetar la manija alguien o mejor dijo, él me sujetó de la muñeca a mi, haciendo que pegara un grito y terminara forcejando.

Not Friends - Hwang Hyunjin [+18] ✔️[EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora