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Una cucharada detrás de otra, llorando de vez en cuando, pasando el canal de vez en cuando, ojeando el celular de vez en cuando.

Eso era lo que estaba haciendo porque si tenía que sufrir por amor, por lo menos lo haría con estilo como dice Haeri, con una bata color rosa palo de baño, unas cuantas porciones de helado y k-dramas, sí, de esos que veíamos con Félix y su mamá cuando éramos niños y ella nos cuidaba a los tres.

Y hablando del australiano, ahora mismo la pantalla de mi teléfono se había iluminado con su nombre.

Cuando lo tomé grité, lloré pataleé, y todo con un Félix tratando de calmarme al otro lado de la línea.

—Cálmate Hayden— dijo este en un tono tranquilizado, me alegró escuchar su voz— Ya se porque estas así, ¿de nuevo eso con...?

—¡No digas su puto nombre!— grité.

—Vale vale— dijo a modo de rendición, casi que lo imagino alzando los brazos— ¿Pero me explicarás por qué estás así?, vi el mensaje que me enviaste.

—Porque soy estupida, porque vino y porque dejé que pasara algo solo por bajar la guardia...—después me encontré contándole todo lo que había sucedido entre yo y Minho, él australiano escuchaba todo con atención.

—Joder, Hayden, no sé qué decir, creo que más que eso es raro— dijo y yo apagando la televisión solté un bufido cansado— Se que te ha removido algo.

—Es por eso...

—Pero bueno, es tarde.

—Ni que pudiera dormir de todas formas.

Sentí que lo llamaban fuertemente del otro lado de la línea y este respondió de mala gana.

—Mañana no iré al instituto y ahora no puedo pasar por ahí porque mi madre se enteró de la fiesta y está más insoportable que Haeri cuando tiene la cosa esa que les cae a las mujeres— tuve que soltar una risita ante eso.

—No creo que sea peor que ella pero bueno... ¿Por qué no vas?.

—Ah creo que pesqué un resfriado, normal.

—Oh... bueno, mañana si puedo te visitaré.

—¿Me traerás algo?, estoy lesionado.

—Claro, te llevaré a Haeri.

—Entonces ni vengan— dijo y soltamos una risa, pero después dijo que era una broma aunque eso obviamente yo lo sabía.

Y seguí su consejo sobre dormirme a pesar que de no pude hacerlo... me encontraba dándole vueltas al asunto una y otra vez, estuve andando en mi laptop por un momento, incluso estudié. Y al final amanecí en un sofá al lado de la ventana...


[...]


—Pareces Drácula.

Bromeó Haeri y yo le di una mirada de pocos amigos, estábamos ambas en los vestidores cambiándonos para clase de deporte, yo había amanecido con este aspecto y ahora ella me lo recordaba una y otra vez.

—Bueno, pues entonces mejor, porque así reclamaré su herencia, como somos parientes— dije atándome el cabello castaño en una coleta alta, ella me miró con los ojos entrecerrados.

—Lo que me contaste... lo siento, se que lo estás pasando mal.

—Así es, pero bueno... pensando ahora con la cabeza fría me doy cuenta de qué hay cosas raras, ejemplo... dijo; no puedo meterte en esto— puse mis cosas dentro de mi casillero en el vestidor y solté el aire, Haeri me imitó y con las chicas detrás, todas comenzamos a caminar a las canchas— ¿Crees que está metido en algo?.

Not Friends - Hwang Hyunjin [+18] ✔️[EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora