Not Friends - Hwang Hyunjin [+18] ✔️[EDITANDO]

27

En el trayecto ese día no había parado de pensar en qué haríamos sin decirle nada a nuestros padres, y pues resulta que Minho nos dijo que su familia tenía una casa en San Francisco, que no había ningún problema en que todos nos quedáramos ahí por un tiempo, solo por seguridad.

Después de eso, pasaron dos días en las que mi rutina eran las mismas, hablar con mis padres en la noche, salir con Haeri y Félix siempre, siempre acompañada, incluso Minho insistía en hacerlo conmigo de vez en cuando, todo estaba superado, digo... no había nada que superar.

O tal vez el hecho de que yo caí en una interminable depresión cuando me vi sola, y ya ustedes saben a quién me estoy refiriendo.

En estos momentos estaba con Haeri en la cocina de la casa. Dos días después de que todo sucedió, mi madre me había llamado preguntándome si me encontraba bien y yo le respondí que claro que sí, tuve que evitar todas las preguntas a cerca de Hyunjin porque de ningún modo, quiero que ellos se metan de nuevo en esa parte de mi vida.

La televisión de la cocina estaba encendida. Y estaban hablando de nuevo en ese canal de noticias a cerca de lo que ocultaba la familia Hwang.

—¿La prensa no puede simplemente olvidarlo?— preguntó Haeri rodeando la isla de la cocina y tomando el control para apagar la televisión.

—Esto no se olvidará en un buen tiempo— escuchamos la voz de Jake que se acercó al refrigerador a agarrar algo, yo me quedé comiendo mi ramen tranquilamente mientras Haeri volvía al fuego a prepararse el suyo.

—Pues vaya chismosos— dijo ella entrecerrando los ojos— Les pagan por chismear sobre la vida de los demás.

—Es un trabajo normal, a mí me gusta— dije encogiéndome de hombros y ella me miró señalándome con el índice, es que el año pasado ella quería ser doctora, no le gustó y comenzó a criticar, después pasó lo mismo con lo de ser abogado, y ahora con lo del periodismo.

En fin, esa etapa de los niños en las que quieren ser de todo, solo que ella ya es mayor.

—Bueno bueno, ¿y dónde está Félix?— preguntó ella, yo respondí.

—Sabes, hoy en la mañana fue a mi habitación y no dijo nada, lo sé porque yo estaba como media dormida, y después... dijo que saldría— dije removiéndome el cabello y Haeri frunció el ceño.

—No creo que sea sospechoso, Minho también salió— yo asentí, comencé a comer mi ramen de nuevo, después de lo que me dijo Jake.

Minutos pasaron desde eso y todos salimos a la sala, nos quedamos viendo una película un rato considerablemente extenso y me fui a dormir el medio día porque normalmente hago eso en estos dos días, estaba cansada y aún tenía el pómulo algo lastimado por los golpes.

Agarré mi teléfono, que Félix y Haeri me compraron por cierto, y llamé a Minho, porque no tenía nada que hacer.

—Hey— le dije y me mordí una uña nerviosa— ¿Qué haces?

—Nada, linda— ya me había acostumbrado a que me llamara de esa forma, así que no dije nada— Estoy por regresar, ¿quieres algo?

Entrecerré los ojos.

—No, nada, solo vuelve pronto— este se quedó hablando conmigo un rato más y después de eso llamé a mamá para que no se preocupara.

Porque en verdad sonaba paranoica, y yo no entendía el por qué, supuse al principio que se trataba del trabajo, pero después me di cuenta de que no... de que era algo más.

En fin, en la noche aún esperando a los chicos que no llegaban, Haeri se metió a mi habitación.

—¿Planeas darle una oportunidad a Minho?— preguntó ella desde mi cama mientras yo sacaba de mi maleta uno de esos pijamas que ella lanzó antes de venir, sí, era uno negro muy revelador pero de noche nadie más que ella y Félix entraban a mi dormitorio.