Not Friends - Hwang Hyunjin [+18] ✔️[EDITANDO]

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Mi cuerpo se sentía cálido a diferencia de ayer en la noche cuando la frialdad me había hecho su víctima, él cuerpo de Hyunjin estaba a mi lado transmitiéndome seguridad y calidez.

—Necesito que me lo expliques.

—¿El qué?— preguntó neutro, con los ojos cerrados, yo estaba a un lado suyo, con la cabeza apoyada en su pecho y trazando un camino con mis dedos desde su cuello hasta la V que seguía después de sus caderas.

—Todo... lo que sucedió contigo.

Abrió los ojos de golpe mientras soltaba un suspiro que me avisó de que en verdad le costaba hablar de toda la situación. A continuación se sentó en la cama y yo hice lo mismo.

—No hay mucho que contar, está bien no recordarlo— hizo una mueca y después continuó— Nosotros vivíamos con Haejun, yo, mamá— de nuevo hizo un movimiento con sus cejas— Éramos esa típica familia que daba una imagen perfecta pero que en realidad estaba complemente perdida, yo no recuerdo, era demasiado niño—se encogió de hombros— Lo que sí recuerdo perfectamente es como se llevaron a mi padre a la carcel y después de un año mi madre metía a mi tío a nuestra casa como si fuera lo más normal del mundo, ya lo dije antes, yo era un niño— sonrió sarcástico— Los años pasaron, y mi odio por esa persona a la que tenía que llamar mamá, se hizo mucho más fuerte, todo empeoró cuando descubrí que mi padre estaba vivo, yo en ese entonces seguía siendo un adolescente a penas— me miró— Me metí en drogas, escuché sus palabras, sus órdenes, sus comentarios de odio hacia mi madre y tío— se pasó las manos por el cabello— y eso fue lo que sacó de control a Hwang Haejun— sonrió con ironía— Que llegó un momento determinado en el que me importaba una mierda lo que sucediera con él, o con nadie, y ya ves, que ni siquiera me importaba lo que sucediera conmigo— fruncí el ceño— pero entonces te conocí y ya sabes el resto de la historia, desobedecí las órdenes y aquí estamos.

Ese era el resumen, y si solo el resumen me podía contar entonces me quedaría con él, no le forzaría a contarme algo que no le hacía bien recordar, es lo mismo que me pasó a mí con los recuerdos de cuando estábamos juntos.

Cada que intentaba recordar, algo de mí se quebraba.

—Esa chica...

—Se llama Wen, es una amiga de la infancia— dijo mirándome ahora con una sonrisa divertida— Esa de la que te sentiste celosa, pero tranquila, ese día fue solo para ayudarme con el tema de la adicción.

—No me sentí celosa— le golpeé en el hombro— Solo me sorprendió... como la trataste, a mí con suerte al principio de los años en los que no recordaba me dejabas hacerlo.

—Pero es diferente. Porque cuando tú estabas cerca despertabas en mí muchas cosas que jamás había sentido y por tu seguridad era mejor mantener distancia, sabes que soy impulsivo, me costó mucho contenerme— tomé su mano entrelazando nuestros dedos y comenzando a acariciar su mano.

—¿Tu mamá...?

—Está de acuerdo en que me interne, es lo mejor— estuve de acuerdo yo también, me costó asimilarlo mientras más lo pensaba, pero el necesita salir de todo esto, necesita estar sano.

Lo dejé descansar, dejé un beso en su mejilla y decidí que dormir en este momento era la mejor opción, esa noche se me hizo más corta que las demás, y cuando nos despertamos al día siguiente, en la cocina estaban los chicos, todos, Jake, Félix, Minho, y Haeri.

Me miraron a mí primero.

Yo iba dada de manos con Hyunjin y estos entendieron a la primera que todo estaba solucionado.

Nos acercamos a la mesa y comenzaron a bromear como de costumbre, me gustaba el ambiente pacifico que teníamos porque incluso Minho no estaba tenso, como si ya él se esperara que yo y Hyunjin estuviéramos así de cerca.