Se supone ♡Rubirena♡

Al descubierto

Omnisciente

Todos los presentes quedaron atónitos antes las palabras de Macarena, por obvias razones Jose fue la más afectada, no podía creer lo que estaba escuchando, inicialmente ella se acercó hasta Rubí para consolarla pero ahora era la castaña quien consolaba a la menor de las hermanas Correa

-Papá ¿es verdad lo que está diciendo la Maca? –preguntó entre lágrimas

-Josefa, hija, usted aún es muy chica para entender los problemas que nos trae su hermana

-¿Es en serio papá? ¿Me quieres dejar a mí como la mala? –sonrió burlesca –de verdad que no sé cuántas cosas más debo esperar de ti

-No voy a hablar nada más contigo aquí Macarena, haz lo que quieras y si quieres decirme algo más me buscas en el penthouse

-Claro, huye, no esperaba otra cosa de ti ¿eso hace la gente cobarde cuando está acorralada o no?

-Soy tu padre Macarena y me tienes que respetar ¿Qué diría tu madre si te viera, si te escuchara hablarme así?

-No te atrevas a mencionar a mi madre –lo apuntó con el dedo –ella sería la más decepcionada de ver en lo que te has convertido, un hombre sin escrúpulos, para el que todo tiene un precio, un hombre que termina reduciendo todo a dinero

-No tengo porque seguir escuchando las atrocidades que me dices –dijo Sergio haciéndose el ofendido –tengo que ir a trabajar

-Tranquilo, ya no debes preocuparte más por eso –respondió sacando un sobre de su cartera y extendiéndoselo a su padre

-¿Qué es esto? –preguntó incrédulo Sergio

-Tu finiquito por supuesto, estás despedido papá ¿o pensaste que después de descubrir tus fraudes voy a permitir que tú sigas haciéndote cargo de todo?

-No puedes hacer esto –respondió entre gritos Sergio –soy tu papá

-Por supuesto que puedo, por si no te acuerdas este y los otros dos edificios eran de mis abuelos maternos, al morir ellos todo lo heredó mi mamá que era su única hija, antes de morir ella traspasó todo a nombre de la Jose y mío en partes iguales y ¡shh! ya sé que me vas a salir con el cuento de que eres su viudo pero te recuerdo que además se casaron con separación de bienes. Al morir mi mamá y como nosotras éramos menores de edad tu quedaste a cargo de todo hasta que yo cumpliera los 18 y podía hacerme cargo de lo mío

-Pero queda el 50% de tu hermana

-Sí, tienes razón ¿pero qué crees? Me enteré de la cláusula que dejó pactada mi mamá y que tú parece que olvidaste contarme –dijo irónica porque tenía claro que en realidad Sergio se lo había ocultado a propósito

-¿Qué cláusula Maca? –interrumpió Josefa

-Que al cumplir yo 25 años me convertía automáticamente en la curadora de tus bienes hasta que cumplas los 18 enana y puedas hacerte cargo de lo tuyo ¿y qué crees? Tengo 26 –sonrió triunfal

Macarena tenía todo perfectamente claro, antes de llegar al edificio el abogado le había entregado toda la documentación física para enfrentar a su padre con pruebas y le había aclarado la situación poniéndola en conocimiento de los derechos y deberes que tenía respecto de ella y su hermana.

Sergio parecía no creer todo lo que estaba viviendo, siempre subestimó a Macarena, pensó que con su vida establecida en España jamás sería un problema para él y ahora todo se había venido abajo.

Rubí rápidamente unió las piezas y entendió porque Macarena aquella noche en la Plaza de la Lealtad cuando le contó la verdad le insistió en que le debería haber dicho todo desde un principio porque ella la hubiese podido ayudar, entendió porque no tenía miedo y entendió porque en el hotel cuando le manifestó su temor la rizada le aseguró que nada malo pasaría con su familia. La rabia y la impotencia consumían a Rubí porque comprendió que se había perdido 4 años de Macarena en vano, porque en realidad Sergio no podía correrlas de ahí, se había dejado embaucar por sus amenazas y él se había salido con la suya.