Malditos infiernos

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Este capítulo está especialmente dedicado a Zafiro_VIP porque la extraño mucho y ella me aguanta mis ideas pendejas.  Ahora sí a leer.

Hoseok solía escaparse de sus padres a la tierra, amaba los atardeceres y ver cómo el sol se ponía ante su maravillada mirada, amaba los atardeceres porque entonces su amor
podía ir a la superficie a verse con él, eran contrarios Hoseok delicado, suave, dulce y él fuerte, tosco, hosco pero era todo lo que amaba, su amor desde que puso los ojos sobre él y hasta la infinidad de su existencia. La brisa del mar en aquel acantilado acariciaba su acaramelada piel y aún con los ojos cerrados sintió aquella poderosa presencia. A pesar de ser miedoso no temía a su lado y sonrió al sentir sus brazos rodeandolo con calidez. —¿Me extrañaste solecito? — Hoseok sonrió brillantemente y se dió la vuelta para poner sus brazos alrededor del cuello y besar con ternura los labios de su amado.—Te extraño siempre, todo el tiempo... Hoseokie.

Hoseok sonrió, amaba que su solecito lo llamara así tan diferente de como todos en el inframundo, ese hombre precioso que se escapó de su todopoderoso papá para explorar las tierras bajas junto a sus revoltosos primos y que se quedó mirándolo mientras afilaba su guadaña y sin miedo alguno se acercó a él.

—¿Te han dicho que es de mala educación mirar a la gente fijamente, solecito?— Hoseok sonrió y se sentó junto al enorme guardián —Eres lindo, tus brazos son enormes ¿me darías un abrazo?—El guardián lo miró como si le hubiera salido otra cabeza y con media sonrisa se levantó para empezar a alejarse —No— pero el jovencito se pegó a él como una sanguijuela y Wonho no podía evitar mirarlo allí tan cerquita con su sonrisa brillante y su cabello tan rojo como el fuego y en un descuido del angelito que fascinado miraba a los cambiaformas de su prisión lo acorraló apresandolo en sus brazos —¿Qué quieres solecito?— Hoseok sonrió brillantemente al hombre que admiraba y con gran convicción le respondió —A ti, sólo a ti Hoseok– Y el guardian sonrió antes de besarlo.

Los amantes se sonrieron al separarse recordando aquel primer encuentro y caminando a su hogar. Hobi ponía sobre la mesa la comida humeante y miró con preocupación a su amado —Hoseokie papá te envió galletas de nube, mientras te las comes ¿me contarías lo que te aqueja?— Hoseok miró a su pareja y soltó un suspiro que estremeció la casa—El inframundo es un desastre desde que Mingyu y los mocosos no están— Hobi iba  preguntar pero decidió esperar — Jeonghan  está loco, mira que desterrar a los engendros y castigar a Mingyu ha sido de lo peor, las criaturas de Soo están recluidas en la segunda prisión y se rehúsan a salir, Tzuyu está devastando con sus vendavales a todo el reino y la estúpida de Sowon cree que tiene alguna potestad sobre los territorios de Mingyu o sobre nosotros. Chungha, Seungkwan, Cheol, Jaebeom, los gemelos y todos en la Séptima Prisión hemos puesto resistencia pero francamente no se cuanto vayamos a aguantar además se nos triplicó el trabajo, quisiera agarrar a ese par y hacerlos picadillo con mi guadaña o mandarles a mis cambiaformas pero se que le sirvo a Mingyu más en mi lugar que atrapado en el muro junto a él— Hobi frunció el ceño ante lo que su amor le había contado y ahora que la bola estaba en su terreno iba a jugar, con suavidad besó a su amado y se dedicó a amarlo y disfrutar de su presencia hasta el amanecer, en cuanto Hoseok partió él mismo endureció sus facciones y subió a ver a sus padres, iba a ser una conversación entretenida.

Woozifer era por mucho el de apariencia más tierna entre sus hermanos pero también era sabido que era el más brutal y frío, odiaba cualquier muestra de afecto salvo que viniera de su padre Mingyu y detestaba mostrar debilidad, pero allí en ese mugroso cobertizo con sus hermanos heridos y vulnerables y su cuerpo y corazón lastimados sucumbió a lo más humano que sintió hacer... salió sigilosamente torciendo los ojos ante la ineptitud de los humanos para encerrarlos y se sentó en el pavimento con una manta que a duras penas cubría su desnudez y lloró, primero con lágrimas y sollozos queditos y luego con todo el dolor de haber sido desterrado y ver a su padre sacrificarse por ellos, esperaba que estuviera bien pero conociendo a su padre Jeonghan lo dudaba no por nada era el amo del mal.

—Mi mamá dice que un plato preparado con amor hace que las penas sean más llevaderas— Una voz cálida y unas manos lo cubrieron y pusieron una taza de algo frente a él. Woozifer no estaba acostumbrado a estos gestos y miró al muchacho con cara de pocos amigos, el chico agachó la mirada y puso la sopa en el suelo.

—Lo siento soy Dokyeom, no se lo que te hace sentir tan triste pero come algo por favor y si necesitas hablar con alguien aquí voy a estar—Sonrió enormemente y una calidez extraña recorrió al diablillo, acepto la comida sin chistar y esperó junto al sonriente muchacho a su lado.

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Kimchicitossssssss nueva actualización (casi que no) un pequeño vistazo al seokhoon y a uno de mis ships extraños favoritos (Hoseok+Hoseok) esperó que les guste y que me den amor.