Bestia

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- recuerda samuel, no le abras la puerta a nadie, si se acerca una bestia... Hay una escopeta en la sala y otra en la cocina, tu madre y yo volvermeos en dos semanas - el azabache de unos 15 años asentía a todo.

Sus padres salían de viaje constantemente y su abuela lo cuidaba... Pero ella ya no estaba para eso - y recuerda pensar la propuesta de frank, eres un doncel joven y hermoso, podría darnos un buen estatus.

- si madre, lo pensaré - rodó los ojos, ansioso. Quería que se fueran para el poder ser libre en su casa - que les vaya muy bien en su viaje. - Los adultos se miraron y asintieron antes de subirse a la carroza y salir del lugar, suspiro aliviado y entró para cerrar todo a su espalda. - eres un doncel, tienes que hacer esto, tienes que hacer aquello, tienes que usar vestido, tienes que tener el cabello largo - imitó la voz de sus padres antes de dejarse caer en el sillón.

El no tenía que seguir esas normas tontas que lo obligan a no ser el... Su gatita llegó a sus piernas y la acaricio para poder escuchar su suave y lindo ronroneo.

Estaba tranquilo, al menos hasta que escucho un ruido muy fuerte atrás, en El patio de su casa, se asusto bastante pues no había sido un ruido pequeño, si no bastante alto y grande, trago saliva y fue hasta la cocina por la escopeta...

Miró por la ventana y al no ver nada suspiro, salió al patio y encendió la luz y... Se quedó helado, había un gran oso pardo en su jardín... Y parecía hambriento.

Recargo la escopeta y apuntó - por favor... Vete, no quiero lastimarte. - el oso volteo a verlo, al verlo con el arma se encogió y comenzó a negar con la cabeza.

Vegetta entonces bajó el arma algo confundido, la dejó a un lado y se acercó al eso, este le gruñó pero al ver que el humano tenía buenas intenciones dejó que se acercará... Hasta cierto punto.

Vege se acercó hasta estar a su lado y sonrió - supongo que tienes que tener hambre, espera aquí - volvió a la cocina, tomó un salmon que había pescado ese mismo día, luego volvió a salir y se lo dejó en el suelo - come, no te haré nada, no soy como los demás.

El oso ladeo la cabeza, aún así agarró el salmón y comenzó a comerlo, cuando estuvo satisfecho se acercó al pelinegro y le dio las gracias con la mirada, este sonrió y le acaricio la cabeza antes de ponerse de pie y darle un suave beso en la cabeza - ahora vete, tu cueva tiene que estar lejos y no quiero que algún cazador te vea.

Se dio la vuelta para volver a entrar a la casa más relajado... Pero vio una brillante luz a sus espaldas y al darse la vuelta se sonrojo - más bien... Yo te voy a cazar a ti. - había un hombre alto, de cabello castaño y unos hermosos ojos verdes.

Se sonrojo inmediatamente y trató de retroceder pero chocó con la pared y cerró los ojos - disculpa.

- eres un humano amable... Ademas de un doncel - chasqueo los dedos un búho se posó cerca, en un árbol - vendrás conmigo.

Negó rápidamente - ¡no puede obligarme! No se quien sea pero esto es ilegalisimo.

- soy el rey del bosque protegido - el búho se transformó en un hombre que sonreía constantemente - y tu ahora eres mio.

El hombre/búho se acercó y con un polvo lo hizo dormir para luego cargarlo y sacar sus alas - ¿en serio un humano? Hay muchos oso de tu especie que hubieran aceptado. O incluso mangel y nieves...

- silencio fargan, solo llévalo al palacio y dejalo en mi habitación - comenzó a caminar hacia la casa y vio salir una gatita, la cargó y sonrió - anda, vuelva antes de que me dé hambre y se me antoje búho rostisado.

El nombrado salió volando mientras hablaba solo, el oso volvió a esa forma y dejó a la gatita en su lomo para comenzar a caminar, llevaba mucho años buscando una pareja, humana claro. Los híbridos como el solo buscaban poder mientras los humanos desconocían ese reino...

💜Mis Aventuras Junto A Ti💜 //One-shots Rubegetta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora