Dos semanas han pasado desde que Alex y yo discutimos. Siempre me escribe y me llama como si nada; pero no viene y yo tampoco le pregunto cuando lo hará.Todo cambio desde que acabo la cuarentena; antes venia hasta dos o tres veces por semana; Unos días se quedaba a dormir y otros solo almorzábamos juntos.
Dice qué hay tanto trabajo en el hospital que no da abasto. Yo pienso que no da abasto con tanta mujer que debe de tener, yo sé qué hay otra por ahí u otras. De todas formas yo pasó ocupada.
Aparte lo qué pasó la última vez me dejo muy claro que su exclusividad es una farsa al igual que él.
Cuando me pide alguna foto sexy le envío la misma que subo a mis redes al igual que él lo hace conmigo.
Al inicio me mandaba fotos de camino al trabajo o mientras estaba en el hospital, ahora las sube solo a sus redes y yo hago lo mismo.
Todo se siente distinto, frío, supongo que al caer su telón de mentiras todo tiene sentido, pero yo le sigo el juego para que él crea que soy la mensa que se traga el cuento de que somos más que sexo como él dice.
Mis amigos me tratan mejor que él y están aún más atentos, también salgo con ellos cuando los niños se van con su papá, otras solo me quedo en casa descansado y leyendo.
Cada día mis artículos tienen nuevos lectores y también mis redes. Ariadne ha retomado su relación con un ex y ha dejado atrás al abogado.
La veo feliz, más relajada;
ella dice que no quiere a nadie pero a mi no me engaña pues solo se la vive hablándome del famoso "Troyano" un moreno atractivo de 1.85 de ojos color chocolate. Su nombre real es Edward.Esta noche los niños se van a dormir temprano, así que aprovecho para escuchar música y poder relajarme tomando algo.
Paz y tranquilidad, solo mis hijos y mis libros; pero por otro lado, el haberme abierto al mundo me ha traído muchas bendiciones como Ariadne, David, Robin.
Mis amigos que siempre me están apoyándome o haciendo reír. Sobre todo mi Ariadne querida que me dio las armas y me presto sus sentidos para percibir tantas cosas que por falta de experiencia yo no miraba.
"Demasiado inocente aveces" me decía Alex y ella... Lo acepto, mi peor error es creer que todos tienen buenas intenciones, o que van con la verdad de frente como yo.
Le mando un saludo de buenas noches a Alex y cómo es su costumbre me contesta: "Noches linda."
¿Ya en serio para qué le escribo?
Seguro que este maje ya tiene nueva conquista, cambia de mujer como de calzones.
Me alisto para dormir y paso por el cuarto de mis niños para ver que todo este bien, los arropo y beso sus frentes. Sonrío al ver sus lindas caritas mientras duermen.
Mis hijos son mi fuerza y mi razón de vivir, por ellos me levanto cada día y trato de sonreír aunque duela.
¿Qué mujer anda por la vida sonriendo en mi situación? Un ex esposo violento; una madre con Cáncer terminal que tiene fuerzas para destruirte psicológicamente; un trabajo que no tiene hora de entrada y salida, un amante ausente.
«¡Joder Vania, basta de victimizarte!»
Por Dios, estoy viva y tengo a mis hijos, merezco distraerme un poquito y relajarme.
Me voy a la cocina, abro el refrigerador y tomo una botella de un mix de vodka con sabor a limón.
Tomo mi iPhone para buscar música, apago las luces y solo dejo encendida la lámpara de la cocina.
Y Taylor Swift comienza a sonar en mi Spotify.
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Resiliencia
RomanceSiempre he pensado que las princesas no existen y que este mundo es para las guerreras. Yo... Soy una de ellas porque no tuve elección. Todas las malas decisiones nos pasan factura en algún momento; la pregunta es, ¿hasta cuando se terminan de paga...