Mientras Angélica mantenía a Tita entre sus brazos, se dedicó a resumirle algunas de las cosas que sucedieron a los supuestos cuatros años en donde él no había estado con ella. Como la morena aún no estaba segura de que ese sea el verdadero Bakugo que al parecer estuvo en su realidad, decidió omitir algunas cosas.
El cómo llegó ahí y qué método utilizó, diciendo que simplemente apareció de la nada en ese lugar.
Su relación con Egan...
Y era más que nada porque ni siquiera estaba segura de lo que le estaba ocurriendo. Su cabeza realmente estaba en un lío y hasta este punto seguía reacia a abrirse por completo al rubio que estaba frente a él por el miedo de que todo volviera a desaparecer de repente.
Si todo resulta ser nuevamente falso... no serviría de nada darle tanta información. Si todo era falso solo debía disfrutar lo que ese mundo le ofrecía ya que por eso había visitado esa realidad.
Si todo era falso... seria realmente decepcionante.
Aunque claro, una pequeña punzada de culpa se había formado en su pecho al no haber mencionado al otro rubio que se encontraba en su realidad; pero de igual forma, no es que pensara tener algo con Bakugo ahora... después de todo sería una relación que simplemente no llevaría a nada.
Ella y él no eran de la misma realidad, siendo que tampoco ninguno de los dos podía quedarse en el del otro.
Era tan nostálgico e impactante volver a ver al rubio después de tanto tiempo, frente a frente... su pecho se llenaba de unos sentimientos encontrados que habían una extraña presión que la empujaba a querer romper en llanto. Pero ahora no cometería el mismo error que la llevó a cuatro malditas años de depresión.
No se dejaría llevar y mucho menos bajaría la guardia ante el gran muro que creó para no salir lastimada nuevamente.
Para no salir lastimada inconscientemente por Bakugo.
—Esos hijos de puta... —gruñó el rubio por lo bajo mientras apoyaba sus codos en sus rodillas y juntaba sus manos par presionarlas entre sí con fuerza— tus padres son una puta mierda. Es que te había dicho qué... agh...
Bakugo escuchó la historia que Angélica le había contado referente a lo acontecido con sus padres y los muchos problemas que tuyo gracias a ellos, haciéndola trabajar de forma temprana, incluso logrando de dejara en pausa sus estudios.
Quiso reclamarle el hecho de que no se había ido con él cuando pudo, pues si ella simplemente hubiera elegido desde el principio ir con él... se hubiera asegurado que algo así nunca sucediera.
—¿Que tu eras la jodida cómplice de conseguir amantes para tu padre junto a tu hermana menor? —cuestionó el rubio sin creerlo— ¿Y tú madre dice asegurarlo porque un brujo se lo dijo? ¿Lo aseguró hasta echarte de la casa incluso sin tener una puta prueba?
—Aunque no lo creas, así fue —contestó la joven suspirando ligeramente—. Soy la más indignada aquí, pero ya no hay nada que hacer. Pasó ya hace dos años.
"Angélica tuvo que dejar sus estudios de lado" pensó irritado.
"Sus jodidamente importantes y apreciados estudios..."
Katsuki recordó las escenas en donde había visto a la fémina estudiar arduamente en cada examen que habían tenido en su estadía en aquel estúpido colegio. La observó completar sus deberes incluso con semanas de anticipación e incluso tuvo que verla llorar en cuando no llegaba a las expectativas que ella había esperado.
Porque ella siempre se había esforzado tanto en sus estudios para no causar problemas y para que sus mismos padres estuvieran contentos con ella... para que finalmente la echen de casa como un perro y que todas las horas, dolores de cabeza y angustias que había dedicado a cumplir con ello fueran despreciados al hacerla dejar de estudiar para que trabajara con tal de conseguir mantenerse a ella junto a su hermana menor.
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Realidad deseada [BakugoXOc]
FanfictionAngélica pasó sus días tratando de olvidar lo que creyó haber vivido junto a su amado Bakugo Katsuki, incluso teniendo que ir a terapia por ello. Ya siendo adulta, con pareja y una vida ya planteada, un dia se entera de que se puede ir a una realida...