FLICKER || S.M N.H||

Capítulo 17

"Te dejaré notas
Debajo de tu puerta
Debajo de la Luna que canta"

— Nini, ¿quieres que te ayude con eso? — Shawn trotó hasta alcanzarlo en uno de los pasillos de la escuela, el mencionado caminaba con dificultad al sostener una caja de cartón, que contenía todos los instrumentos necesarios para incendiar la escuela, pero esos solo eran detalles.

La apariencia del ojiazul era la de un auténtico científico loco, llevaba la bata médica abierta, unas gafas de seguridad que posaban en su frente y su pelo rubio andaba más desordenado de lo normal. Aquel día se había realizado la feria de ciencias anual, la misma en la cual, se había preparado por meses y meses, llevándose de recompensa el primer puesto.

— Estoy bien, Shawnie. No soy un debilucho.— dijo a penas, intentando caminar sin tomar descanso alguno. El castaño rodó los ojos divertido, quitándole la caja de cartón en un dos por tres.— Hey, dame eso. — protestó cruzándose de brazos.

— Eres un niño orgulloso, déjame ayudarte.— Le dio un beso fugaz. — Puedes ayudarme llevando esta libreta.— tomó en sus manos lo que era una libreta vieja y con las hojas claramente descuidadas, Niall asustado lo tomó y la ocultó en su pecho, sus mejillas se habían coloreado considerablemente. — ¿Sucede algo? — Niall negó a penas respirando.— Es tu diario ¿Verdad? — sonrió enternecido.

— No, es peor que eso.— tener un diario ya era algo común, pero tener ese tipo de libreta no lo era, tenía vergüenza de lo que contenían esas hojas, era patético ¿no es así? Era patético coleccionarlas. Pero aún así, resignado relajó su agarre, dejando a la vista la tapa de pino de lo que era su herbario. — Me gusta todo lo que tenga que ver con plantas, es por eso que desde que soy pequeño...— abrió la tapa dejando ver las hojas secas con sus descripciones al lado de cada una.— ... Colecciono plantas, desde su hojas, flores, tallos e incluso raíces. Es patético lo sé.

Shawn soltó una pequeña carcajada aún más enternecido, dejó la caja en el piso, posando sus manos en los hombros del pequeño, para que lo mirara solo a él. — No le veo lo patético, me parece algo muy interesante.

— ¿Qué?— Sus ojos se abrieron exageradamente.— ¿No te reirás de mi? ¿No tratarás de romper mi herbario?

¿Quien le había hecho tanto daño? ¿A quien debía darle una lección? Las preguntas rondaban por la cabeza del más alto. Volviendo a su realidad, atrajo el cuerpo del rubio a su pecho, besando su cien con delicadeza.

— No me burlaré no te trataré mal, es más, te ayudaré a recolectarlas ¿te parece bien? — Niall asintió, dejando un corto beso en sus labios. No sabia con exactitud que es lo que le habían hecho pero de algo si estaba seguro, no dejaría que nadie más volviera a hacerle daño.

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El frío de aquella mañana se había encargado de quemar las mejillas del muchacho de la gran sonrisa, el cual cerraba la puerta del copiloto despidiéndose su padre con un ademán para finalmente darle la espalda y caminar en dirección a la tediosa escuela.

Las hojas secas que anunciaban la llegada de otoño cubrían las calles de Richmond, dándole una vibra mucho más melancólica de lo habitual, Shawn pisó algunas de las tantas hojas muertas por la satisfacción de su crujir contra las suelas de sus zapatos.