—¿cuál es tu color favorito?. — Luz pregunto
Inés rio y negó un par de veces, su rostro se notaba cansado. Había pasado una semana y la prensa estaba tras ellas, era extraño que se sintiera tan agotada, probablemente el hecho de guardar todo el tiempo su sentir, le estaba pasando factura
—no tienes que hacer ese tipo de preguntas, somos adultas, Luz, y esto es raro. — añadió con una pizca de diversión
Ambas se encontraban en un restaurante bastante cálido, incluso la mesa resultaba acogedora. El lugar era casi por completo de madera, olía a bambú y alguna especie de flores.
—lo sé, es solo que quiero conocerte. — sé encogió de hombros mostrándose desinteresada —A veces me parece que no quieres que te conozca, eres muy cambiante
El mesero llegó y puso en aquella mesa ambos platos de comida, después aquellas copas con un poco de vino rosado, ambas mujeres le agradecieron y el chico desapareció
—no tienes que conocerme, es cierto que soy cambiante, pero ¿Quien no lo es?. Ahora puedo decirte que en este momento mi color favorito podría ser el azul, pero tal vez mañana sea el negro. — la miro con diversión —no encuentro necesarias estas preguntas
Luz tomo un pequeño sorbo de su bebida y apretó los labios
—supongo que son cosas importantes que se deben de conocer, quiero decir, tal vez quiera darte un obsequio, pero imagina que te doy algo de un color que no te gusta
—probablemente lo acepte, la gente no valora los obsequios, pero yo si, digo si me regalaras algo de algún color extraño, no lo rechazaría. Soy agradecida y aprecio los gestos lindos que la gente tiene conmigo.
La ojiazul asintió lentamente, tratando de procesar las palabras de aquella mujer.
—sigo creyendo que no quieres que te conozca
Inés suspiro y golpeo con sus uñas la mesa de madera
—eres joven, tienes un mundo por conocer, las personas resultamos irrelevantes. Conoce de países, de historia, de arte, de música. Las personas siempre vamos a decepcionar a más personas. — musito
—no creo eso
—no lo entiendes ahora, eres joven. — repitió y jugo con su copa de vino —el día de hoy puedo decepcionarte, también puedo hacerlo mañana y creeme que si te enfocas en conocer a fondo a las personas, terminaras igual que como comenzaste
—¿como?
—sin entender. — soltó con simpleza —las personas somos mundos diferentes, tenemos traumas y demonios, pero creeme querida, que si tu tratas de salvarme de mis demonios o de mi pasado, es más fácil a que yo te arrastre a él a que tu me saques
—no creo en eso
—pensamos diferente
Luz asintió y comenzó a mover su pierna con nerviosismo
—yo creo que si puedo salvarte de tus demonios. — habló con cautela
Inés apretó los labios en un intento de no dejar escapar una sonrisa
—no me conoces
—no te conozco, por que tu no me dejas
—no quieres conocerme, Luz, creeme no quieres hacerlo y yo no quiero que me conozcas
La muchacha asintió lentamente, era algo que hacía mecánicamente, como si su mente tratara de comprender algo
—¿por qué no quieres?
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CUANDO ME ALCANCE LA VIDA
RomanceElla odia el café con mucha azúcar, pero ella lo ama Ella es fría como el hielo, pero ella es el sol Ella es invierno y ella primavera Ella es experimentada, seria y controladora, mientras que ella es todo lo contrario. Ojalá le hubieran advertid...